Por Carlos E. Viana.-

“Anima Christi… No permitas me separi a te. Aho hoste maligno defende me”. San Ignacio de Loyola (Exercicios Spirituales).

Sus candidatos con el aborto

Su Santidad, como ya usted sabe, su candidato a Presidente declaró que impulsaría la ley del aborto durante el debate presidencial y ahora lo ha confirmado anunciando que enviara un proyecto al Congreso, para que se legalice este crimen, pero ya su candidata a Vicepresidenta había votado a favor del aborto el año pasado. Ambos lo traicionaron y esto no debería extrañarle, porque sus compañeros políticos de estas tierras, solo superan su corrupción con la traición.

Ricos corruptos privilegiados

Usted también se jugó por ellos; a pesar de las desmentidas de un arzobispo; oponiéndose a las prisiones preventivas, con lo cual los más ricos de la Argentina y algunos terroristas se verán beneficiados. A pesar que usted se declara a favor de los pobres, con su propuesta se ha beneficiado a unos 50 ricos que le robaron a los más humildes U$S 200.000 millones de dólares. Estos empresarios no son precisamente un ejemplo de su condenado capitalismo liberal, sino del capitalismo del monopolio y el privilegio que propicia el fascismo corporativista de sus compañeros peronistas.

Asesinos privilegiados, víctimas abandonadas

Siguiendo con los delincuentes, en 2016 se opuso a una ley que bajara la imputabilidad de los menores y no quiso ni siquiera debatir cómo se podría mejorarla. ¿Usted tiene conciencia de los cientos de muertes que este vacío legal produjo?

¿No pensó usted en las víctimas sino solo en los criminales?

Además con una ley se podría haber impedido que muchos menores cayeran en la delincuencia. Sus representantes políticos, solo protegieron asesinos que volvieron a matar impunemente, especialmente a pobres.

Chile y Venezuela

También ha condenado al gobierno de Chile exaltando a los agitadores a quienes llamo esos cristos asesinados y que en realidad en su mayoría, unos 50, fueron extremistas que organizados por el Foro Social Mundial y que ahora están incendiando Iglesias Católicas, como lo hicieron sus compañeros peronistas en 1955.

Pero más allá del sacrilegio de comparar a asesinos con Cristo, quien nunca uso la violencia, usted no ha dicho nada de los 7000 asesinatos políticos cometidos por el gobierno socialista de Venezuela y certificados por las Naciones Unidas con la autoridad de Michelle Bachelet. Para colmo sus representantes políticos en Argentina, formados en el Vaticano apoyaron al dictador Maduro.

Parecería que algunos tienen licencia para matar y otros no tienen derecho a la vida.

En Venezuela la falta de medicamentos, que el tirano Maduro se niega a recibir como ayuda humanitaria de otros países, está provocando la muerte de los más pobres.

Tampoco usted no se ha hecho eco de los 4 millones de exilados que abandonaron ese país. La pobreza en dicho Nación supera el 90% con resultados trágicos, que usted no denuncia, como lo hace hacer con sentido político en Argentina.

Intrusos crucificados en Bolivia

A usted se lo ve con una sonrisa abrazando Evo Morales, sin tener en cuenta asesinatos graves. Este dictador con la cocaína envenenó a la juventud argentina, brasileña y de Estados Unidos y que en la región cocalera a los intrusos se los ejecuta en la hoguera o se los crucifica, rociándolos con miel, para que se lo coman las hormigas, en una tortura que dura unos tres días hasta su muerte.

Tampoco lo veo actuar frente al sitio a una iglesia católica, efectuado por la policía del dictador Ortega en Nicaragua, en contra de un grupo familiares de los presos políticos, que se han refugiado allí.

Teología sin Dios

Su invitación al enunciador católico de la Teología de la Liberación, ignora que está junto con la subversión soviética-cubana, mataron a más de 200.000 hispanoamericanos, además de los africanos. Más allá del sacrilegio de llamarle teología, que solo pertenece a Dios, porque esta llamada teología es una ideología política, con fundamentos materialistas. Usted debería saber que desertores de la KGB, denunciaron como la teología de la Liberación fue urdida en las oficinas de dicha agencia de inteligencia soviética, para infiltrarse y destruir la Iglesia, pero ahora lo veo entusiasmado con la Teología del Pueblo, que niega tácitamente el pecado original y se funda encubiertamente en el materialismo histórico.

90% de pobres en Cuba

No comprendo su acercamiento a Raúl Castro y su inclinación ante Fidel. En Cuba hay un 90% de pobres y crecen las villas miserias alrededor de la Habana y otras capitales provinciales. Estas villas son peores que las más miserables de Argentina y los resignados cubanos le llaman “llegopun”, abreviación de llego y pongo, por ejemplo cartones, chapas, maderas. Además existen diferencias raciales contra los negros. Pero usted en su visita a la isla, se negó a recibir a las “Damas de Blanco”, que piden libertad en la ínsula.

Un santo con kalashnicov

Tampoco entiendo la beatificación de Monseñor Angelelli, quien alentaba a los montoneros a matar a quienes no pensaran como ellos y además que no vea que su muerte fue un accidente, debido a su imprudencia para manejar. Hubo testigos no escuchados que estaban en el lugar y no vieron otros autos en el momento del accidente. Lo más grave es que condenaron a inocentes.

¿Usted se lo puede imaginar a Cristo con una kalashnikov?

Alta Política

Alta política es la predicación del Evangelio y la intervención directa en la moral que es lo que está en crisis en Argentina y el mundo hispánico. No la organización de un frente político y para colmo con los más inmorales del país, tienen más de 10.000 causas penales, un asesinato político y la acusación fundada de traición a la Patria.

Me parece Su Santidad que está mal asesorado. Usted se quejó de que en el Vaticano hablan y conspiran detrás suyo, por eso le hablo de frente. No le pido que apoye a nadie como lo hizo en las elecciones, sino que se mantenga por encima de los grupos políticos para poder tener la autoridad moral de intervenir para impedir tragedias y violencia. Usted debe ser el representante de Cristo en la Tierra, darle a Dios lo que es de Dios y al César observarlo, para aconsejarlo moralmente, no políticamente. Realmente le soy franco, esperaba una actitud casi divina de su parte y más siendo compatriota, pero me ha desilusionado. El peronismo está terminando de destruir moralmente la Argentina, no destruya usted la Iglesia, que ahora aparece atada al aborto en los candidatos que usted creo.

Su Santidad le saludo respetuosamente, rogando para que Dios lo ilumine.

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