Por Francisco Viotti.-

En estos momentos, se encuentra circulando en las Redes Sociales, un video titulado “Con los jubilados NO” y si bien el tema es angustiante y real, las personas que se muestran en el mismo, no tienen la suficiente altura moral para pronunciar una sola palabra sobre el tema. Los mismos son todos ultra kirchneristas recalcitrantes, pertenecientes al mundo del espectáculo y a ellos más que a nadie, “NO LES IMPORTAN EN ABSOLUTO LOS JUBILADOS”.

Seguramente esa “gente” no recuerda o no quiere recordar que su Jefa, la Arquitecta Ladrona Egipcia de Tolosa, fue quien nos VETÓ por Decreto, la Constitucional Ley del 82% Móvil, a horas de ser sancionada por el Congreso Nacional. También con el pretexto que si se pagaba a los Jubilados, el país entraría en Default. A la vez que acompañada por el entonces Director Ejecutivo de la ANSeS, su posterior socio en el latrocinio gubernamental y vicepresidente elegido a “dedo en la intimidad”; su “Amado” Boudou; nos tildó de BUITRES y CARANCHOS.

Si el haber trabajado y aportado en tiempo y forma durante cuarenta años o más y reclamar por nuestros legítimos derechos, nos habilita a recibir el calificativo de Buitres y Caranchos; de la misma forma diríamos que los súbditos de una COMADREJA LADRONA, sólo pueden ser Ratas Inmundas y oportunistas por conveniencia. Por tal, el poner cara de circunstancia y decir “Con los jubilados NO”, no les otorga ningún derecho a opinar sobre la cruel problemática que padecemos los Jubilados.

Esta problemática, es la misma de siempre y la utilizada por todos los gobiernos desde hace 70 años. Si bien el sistema Jubilatorio fue creado hace 110 años, las Cajas de Jubilaciones, luego de su fragmentación en la década del 30; a fines de los 40 y principios de los años 50 se crea un fondo estabilizador. En 1954 comienza a funcionar el Régimen de Reparto, del que fue acérrimo inspirador, el Diputado Don Alfredo L. Palacios y auto-adjudicada después entre otras leyes laborales, por las huestes peronistas de ese entonces.

Es así que se crea la Ley 14.499, que estableció el 82% Móvil, pero también comenzaron a deteriorase en los 60. Luego, en los en los años 90 y bajo el mandato del gobierno peronista de Carlos Menem y su Ministro de Economía Domingo Cavallo, se sanciona la Ley 24.241 y con ella el comienzo de un nuevo deterioro de las Jubilaciones en las que inclusive se nos llegó a descontar de las mismas, el ignominioso 13% que luego fue devuelto en cuotas devaluadas.

Después de la “Década Afanada” y cuando creíamos que se había terminado con la payasada N&P y la utilización de los Fondos de la ANSeS, para ser destinados a cualquier tipo de demagogia gubernamental y el “latrocinio K” generalizado; volvemos a ser tratados como “Con-dones” a los que se nos trata de cambiar la fórmula de liquidación ISBIC, por el engendro RIPTE, sancionada en el 2012 y ya sabemos que no fue Magia… fue MAFIA.

Hoy nos encontramos aguardando que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se expida sobre el Juicio “Lucio Orlando Blanco c/Anses s/Reajuste Previsional”; pero ocurre que los expedientes de los 150.000 juicios por igual motivo, fueron enviados por la ANSeS a la CSJN y si el Alto Tribunal fallara sólo en favor del Jubilado Lucio O. Blanco, (a fin de quedar bien con DIOS y con el diablo) deberíamos iniciar otra nueva Apelación Judicial o Juicio utilizando la Jurisprudencia de este caso.

La CSJN se expenderá el próximo 18 de diciembre, por lo tanto recién se podrá accionar legalmente, después de la Feria Judicial. Es decir, hasta marzo de 2019 no habrá manera de “hacer nada”. Para el gobierno, sólo es hacer y ganar tiempo. Para los Jubilados, sólo es poder esperar y restar tiempo del poco que nos queda y el que sobreviva podrá tener al menos la esperanza de cobrar lo que Constitucional y Merecidamente nos corresponde.

Sólo hay algo que es indiscutible y que siempre se repite; los Jubilados somos denigrados a diario y por todos los gobiernos, al ser utilizados de Con- dones, muy a pesar que el término y la palabra sea muy grosera; pero es nuestra triste y pobre realidad. Realmente somos Ciudadanos con dones muy especiales, ya que soportamos todas las variables y tropelías de quienes necesitan utilizar nuestros dineros de la ANSeS para cualquier fin, menos para devolver a los Jubilados lo que nos pertenece. ¿HASTA CUÁNDO TENDREMOS ESOS DONES ESPECIALES?

¡Con los jubilados, no!

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