Por Juan José de Guzmán.-

En medio de los múltiples debates que agobian a la opinión pública (ex Presidente golpeador, maltratador y “pajero serial”, la designación de Ariel Lijo a la Corte Suprema, el veto total o parcial a la ley jubilatoria aprobada en el Congreso Nacional, un ministro de Justicia que desconoce leyes de igualdad de género, la trata de menores, que puede estar detrás de la desaparición de Loan y el debate entre la ex Vicepresidenta con el Senador Mayans respecto a quiénes pueden considerarse peronistas y quienes deben asistir al psiquiatra) , como si fuera poco y no bastara con la angustiante situación socioeconómica que vivimos los argentinos la Corte Suprema de Justicia, de manera por demás inoportuna, rechazó el fallo de segunda instancia que había resuelto que las jubilaciones no podían ser inferiores al 70% del promedio de los sueldos de los últimos 10 años de aportes con lo cual le está sirviendo en bandeja a la ANSES la posibilidad de apelar hasta el infinito las sentencias en su contra, como sucedió con la causa Hartmann Gabriel c/ANSES s/reajustes varios de 5 años atrás que finalmente llegó en apelación y la Corte rechazó.

Comprendo la depresión del Juez Herrero (la comparto plenamente) que calificó al 27-08 como un día de luto para los jubilados elevando una súplica ante el Supremo para que se apiade de las almas de estos jueces inhumanos.

Yo vaticinaría que es la sentencia de muerte al Sistema de Seguro Solidario para la Vejez también llamado de Reparto Jubilatorio.

Share