Por Ovidio Winter.-

El tratamiento que le dieron el Senador Paoltroni y Carolina Losada al juez Lijo estuvo acorde con el rechazo que su candidatura generó en todos los ámbitos.

El apoyo que un kirchnerismo decadente pueda darle al candidato que Lorenzetti y Caputo (Santiago, que no es querido como el de Leo Dan) sugirieron al presidente podría sufrir un severo traspié si el senador Lousteau le retaceara el suyo, algún otro apoyo se sumaría y se lograría, por fin el rechazo a la candidatura del tan cuestionado juez.

Es innegable que las aspiraciones políticas del Presidente del radicalismo apuntan bien alto. Sería un grave error suyo dejarse seducir por quienes no militan en el bando de los buenos.

La ciudadanía lo tiene muy claro y ya ha dado muestras de que no le temblará el pulso a la hora de castigar, con su voto, a quienes le hagan mal a la República.

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