Por Guillermo Cherashny.-

Circula un video en las redes sociales donde Macri dice que la inflación es lo más fácil de solucionar y se viraliza en un ámbito donde el PRO es ampliamente mayoritario y, si bien esas afirmaciones se hicieron durante la campaña electoral, están pegando por primera vez en la opinión pública, que también comienza a percibir que hay corrupción en este gobierno.

En efecto, aunque todavía es prematura la reaparición de la causa del Correo porque el procurador interino removió al fiscal Zoni, que había imputado al presidente, también el mismo Dr. Casal le hizo lugar al pedido de Mario Quintana para que Farmacity pueda funcionar en la provincia de Buenos Aires, unos días después que el subjefe de gabinete dijera en el programa televisivo de Carlos Pagni que está por vender sus acciones en Farmacity después de más de dos años en el gobierno.

Está claro que, si la Corte Suprema autoriza a Farmacity a operar en Buenos Aires, lo que hace Mario Quintana es poner en valor su empresa, que valdría mucho más con un fallo favorable.

Lo mismo pasó cuando Angelo Calcaterra, el primo del presidente, le vendió IECSA a Marcelo Mindlin cuando Odebrecht abandonó el soterramiento del Sarmiento, que debería ser anulado por el cambio societario en la UTE que ganó la licitación. Fue otra «puesta en valor» para que el primo presidencial cobrara más dinero en la venta.

La publicación en la revista Noticias sobre el ministro Dujovne, que blanqueó 20 millones pesos antes de ser ministro de hacienda, lo coloca en una situación éticamente dudosa.

Toda esta nueva percepción se da en marco de la famosa frase antes mencionada, donde el presidente dijo que la inflación es fácil de bajar en momentos en que no para de subir y da la impresión de que será igual al 25% del 2017, lo que evidenciaría el gran fracaso de la política económica del gradualismo y una pérdida de apoyo que ya se ve en las últimas encuestas.

Pero ahora el gobierno respira tranquilo porque los votantes que está perdiendo se van a la tribuna a mirar pero todavía no apoyan a ningún sector peronista.

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