Por Guillermo Cherashny.-

Se sabe más del Meinl Bank, fundado en 1923 en Viena, Austria, y su CEO, Julius Meinl, fue detenido en ese país y ahora le reclama al estado austríaco 200 millones de euros. En realidad, el actual CEO es Julius Meinl V, ya que su fundador fue su bisabuelo y es ciudadano británico, porque su familia en 1940 huyó ante el avance nazi. Más cerca, en 2015, Juluis Meinl V fue acusado en Ucrania por ese gobierno de lavar 750 millones de euros, con lo cual tanto en Austria como en Europa del Este tiene estos antecedentes. Pero lo interesante para la Argentina es que en 2011, la constructora brasileña Odebrecht compró el 51% de las acciones de ese banco en las islas Antigua y Barbuda, conocida porque fue la base de los piratas ingleses que asolaron el Caribe en 1700 y 1800 y que pertenecen al Commonwealth. Julius Meinl ya tenía una sucursal en el paraíso fiscal de Jersey cerca de la costa inglesa.

Pero es aún más interesante que el Meinl Bank de Antigua y Barbuda en manos de Odebrecht se vino al sur del continente y compró las acreencias que el Banco Interamericano de Desarrollo y la corporación financiera internacional tenían contra el Correo Argentino S.A., propiedad del grupo Macri y como acreedor de 400 millones de pesos -recuérdese que al estado le deben 294 millones- votó a favor del acuerdo de julio del 2016 que fue cuestionado por la fiscal Boquin.

Esta extraña relación entre el banco de Odebrecht y la aprobación del acuerdo de los Macri demostraría una relación que quizás no aparezca entre los denunciados por recibir los 35 millones de dólares pagados en Argentina.

Vinicius Borin, directivo del Meinl Bank en Antigua y Barbuda, confesó que por ese banco se pagaron 1600 millones de dólares en coimas y después de la confesión de la constructora en New York las autoridades bancarias de Antigua y Barbuda intervinieron el banco y desplazaron a los tres directores de Odebrecht.

Share