Por Guillermo Cherashny.-

El libro “La raíz”, del periodista Hugo Alconada Mon ilustra sobre la corrupción generalizada en el país e de incluye en esta descripción los tres años del gobierno de Macri. En efecto, en una página de ese libro señala que Mauricio Macri, entonces jefe de CABA y candidato a presidente, les pidió a los empresarios más importantes el 1% de su patrimonio porque en sus futuros cuatro años de gobierno el valor de las compañías valdría muchísimo más.

Alconada fue citado por el juez federal de La Plata para ratificar lo que escribió en el libro y así lo hizo. Pero había una causa en Comodoro Py a cargo del juez Sebastián Casanello; Cambiemos apeló y la Cámara Federal, insólitamente y con fundamentos jurídicos insostenibles, determinó que esa causa pasara a la Justicia Electoral.

Calificamos despectivamente el resolutorio de la Cámara Federal de Comodoro Py porque pedir el 1% del patrimonio de empresas importantes es un grave delito y se tomó esa decisión sin indagar a esos empresarios y a Alconada Mon. Y mandarla a la Justicia Electoral como si ese pedido de Macri fuera un delito electoral es un verdadero disparate jurídico. Ya había pasado algo parecido con los aportantes truchos de Cambiemos para la campaña de 2017, donde disfrazaron aportes de sectores humildes que declararon no haber aportado y que ocultaban una siniestra maniobra de lavado de dinero, porque se supone que eran donaciones de empresas que prestan servicios y concesionarios de obras públicas del gobierno de la provincia de Buenos Aires, porque estos empresarios no pagan los gigantescos montos que cobraban Néstor Kirchner, De Vido y Baratta, como se demostró en la causa de los cuadernos. En el caso de la campaña de Cambiemos del 2017 había que seguir investigando para descubrir que eran aportes en negro de las empresas conectadas al gobierno de la provincia de Buenos Aires, porque si los aportantes que figuraban negaron hacerlo es obvio que el dinero sucio salió de otro lado.

La justicia argentina, tanto en Comodoro Py Como en La Plata, ha demostrado que la corrupción de un gobierno en ejercicio nunca es investigada, lo cual es una verdadera vergüenza y nos convierte en un país sin instituciones.

Share