Por Guillermo Sandler.-

En estos días se están ejecutando y anunciando medidas económicas ante el descalabro que ha dejado Cristina Fernández de Kirchner en materia económica. Creo que es necesario que la legislación nacional cree la figura penal que enjuicie a funcionarios que no solo se han enriquecido sino más severamente para aquellos que han llevado el país al borde de la quiebra social y cuya recuperación demandará años. Los argentinos todavía no han asumido la gravedad de la situación económica y que recién en el transcurso del año 2016 sentirán los efectos del daño causado en su bienestar personal y social.

No debemos permitir que el Gobierno del Presidente Macri se vea acorralado por los necesarios aumentos que se producirán en las tarifas de los servicios públicos tales como electricidad, agua y gas, elementos esenciales para la vida, después de 12 años de maniqueo tarifario.

El tema se encara mal si sólo se piensa en subsidiar a los menos pudientes con una tarifa social. No es un buen punto de partida. La realidad es que las empresas se han descapitalizado en estos 12 años con un gobierno corrupto e inútil. Pero no hay que llorar sobre la leche derramada. Hay que buscar soluciones, pero para ello se requiere tener un buen diagnóstico a cargo de esa disciplina poco atendida por los profesionales de ciencias económicas que se llama FINANZAS PÚBLICAS, que estudia la problemática pública en su integridad.

Así se habla académicamente de las funciones que hacen a la organización del Estado, comenzando por la provisión de bienes públicos (servicios de educación, servicios de salud, el cuidado del medio ambiente, la estabilidad monetaria, la defensa, las relaciones con el mundo, la seguridad, la cultura, el desarrollo regional, la igualdad de oportunidades para todos, el ordenamiento territorial), pero además cumple otras funciones como mejorar a través de la redistribución del ingreso las diferencias sociales; coadyuvar a los objetivos de la política de corto plazo (estabilidad de precios, mayor ocupación posible y equilibrio externo); asimismo debe ocuparse del crecimiento y de desarrollo del país en cuanto a las comunicaciones en sus diversas formas (transporte, (vías navegables, autopistas, aeropuertos, ferrocarriles, etc); fundar un ordenamiento territorial que integre el país no como la actual estructura territorial con provincias con apenas 1 hab/km2 (Santa Cruz), con escasa población pero con igual poder político que la Provincia de Buenos Aires. Por ejemplo, Tierra del Fuego con 21.571 habitantes cuenta con 3 senadores nacionales igual que la Provincia de Buenos Aires con 16.000.000 habitantes o los 24 Partidos del GBA cada uno tiene más habitantes que varias provincias juntas. Así no puede funcionar ninguna democracia en serio y estable.

Cómo puede ser que un país como el nuestro con estas dimensiones no cuente con un sistema ferroviario que una todas las regiones del país como lo pensó la Generación del 80 que llegamos a tener 50.000 km de vías férreas hasta que en 1948 J.D. Perón estatizó los ferrocarriles dando origen a su decadencia actual y que la política no sólo consiste en tener nuevos coches cuando la estructura es obsoleta y decadente en todas sus dimensiones.

Para el cumplimiento de las funciones mencionadas se requiere contar con un orden impositivo de pocos impuestos en que todos aporten sin excepción ni privilegio de cualquier naturaleza, por el simple hecho de formar parte de una sociedad moderna y no como bien dice el Prof. Antonio Margariti el régimen impositivo actual es una jungla de corte totalitario que inhibe cualquier actividad, tarea, profesión, ahorro personal, inversión, puesto que antes de comenzar esa actividad aparecen inspectores de entes recaudadores nacionales, provinciales y municipales solicitando comprobantes y demás yerbas de una actividad que no se sabe si va a tener éxito o fracaso.

Entre la multitud de temas que deberá encarar el Gobierno actual, se reflejarán en el Presupuesto Nacional 2016 que se eleve al Parlamento Nacional. Esa problemática fiscal deberá ser consistente no sólo en los objetivos de las entidades y jurisdicciones nacionales sino con los gobiernos provinciales y municipales de todo el país. De no ser así volveremos a caer en la política que se viene ejecutando desde hace 85 con las crisis recurrentes de los años 1943/1955/1966/1975/1983/1989/2001/2016 (¿).

Es decir, el Presupuesto Nacional consta de tres elementos básicos en su composición: recursos genuinos (tributos), gastos de funcionamiento (corrientes) e inversiones (gastos de capital). No existe otra forma financiamiento, como decía el Dr. José Terry, Ministro de Hacienda de Luis Sáenz Peña, Julio A Roca y Manuel Quintana): un buen cálculo de gasto y recursos garantiza la solvencia del gobierno, los gastos únicos que deben admitirse son los indispensables, los necesarios y los útiles. Los gastos innecesarios de lujo, superfluos, improductivos, que no encuadren dentro de estos deberes del Estado, deben ser rechazados o eliminados, porque en definitiva importan un gravamen injusto e ilegal para el contribuyente o para el pueblo que los paga. El engaño en esta materia es un crimen.

Esta breve introducción es al solo efecto de analizar el tema que se está debatiendo en el Ministerio de Energía a cargo del Señor Ministro Ing. Aranguren, las tarifas públicas. El tema de la estructura de precios en la actividad privada es relativamente sencillo. Primero, el bien o mercancía que se ofrece responde a las condiciones del mercado y en segundo lugar a los costos de cada empresa con tendencia a bajar costos a los efectos de incrementar la participación en el mercado. En última instancia siempre existe una competencia potencial a través de la apertura al comercio internacional. Además, por otra parte cada individuo tiene en mente un principio elemental: la restricción presupuestaria o recta de balance, como se estudia en microeconomía.

En el sector público la situación cambia, en primer lugar los bienes públicos no tienen precio. Por eso se habla más de gastos que de costos, porque los bienes públicos se formulan, aprueban y ejecutan mediante el instrumento político que se llama presupuesto, mientras que los bienes privados resultan de las leyes del mercado: oferta y demanda. Dentro de los bienes públicos existe un ámbito reducido que son aquellos bienes (monopolios naturales) cuya producción requieren una alta inversión en infraestructura que no encuentra incentivo en la actividad privada pues sus precios serían prohibitivos. Por eso interviene el Estado bajando el precio de la prestación del servicio a los efectos de aumentar la demanda de la población, pero a tal fin se transfiere un subsidio tanto si es de producción pública o es de producción privada, para lo cual se requiere contar con un control del Estado a cargo de excelentes profesionales y honestos.

Como se comprenderá así como el mercado en condiciones más o menos competitivas actúa con un alto grado de eficiencia y aquel que no tiene en cuenta las condiciones del mercado a la larga o a la corta desaparece del mercado (Competencia destructiva, Schumpeter).

En el Estado no es el caso. Por ejemplo AA es altamente ineficiente y toda la sociedad se ve obligada a financiar ese servicio que sólo es un privilegio para un sector muy reducido de la población que usa su pésimo servicio y usufructúan especialmente los políticos, como es públicamente sabido.

Por lo tanto, antes de anunciar el cuadro tarifario de las empresa s concesionadas de Edenor, Edesur, Metrogas y otras sugerimos consensuar una tarifa con criterio económico, previo acuerdo con las concesionarias que tengan la libertad de modificar sus estructuras organizativas que han sido violadas por la gestión anterior y vuelvan a funcionar como “empresa concesionaria” y no como “organismo estatal”. En cuanto a AySA someterla a una auditoria externa y preparar las condiciones jurídicas para transformarla en “empresa concesionaria” previo acuerdo con Aguas Argentinas.

Sin mayores análisis, el sistema tarifario debería calcular los costos de funcionamiento, inversiones y utilidades de la empresa concesionaria como para que exista la voluntad de los capitales privados en invertí en tales sectores de la economía.

En la medida que se vaya satisfaciendo lo anteriormente expuesto, se darán las condiciones para establecer el cuadro tarifario anual para los años siguientes, con valores económicos que cubran parte del servicio. Solamente en casos muy extremos se podrán fijar tarifas subsidiarias, pues este no debe ser el cartabón de la política tarifaria sino seguiremos con pésimos servicios. No se mejorará ni se ampliará el universo de personas que necesitan y reclaman el servicio. La historia argentina demostró que esa política distribucionista vía tarifa pública fracasó rotundamente.

La Canciller alemana Merkel lo ha dicho muy claramente: al mercado todo lo máximo posible, al Estado lo imprescindible.

Hecha esta breve introducción de economía pública quisiéramos hacer un comentario a las boletas de dos empresas concesionadas Edenor y Metrogas y un “organismo público” como AySA, en el suministro de electricidad, gas y agua, respectivamente.

En primer lugar, analizaremos al organismo público: AySA. Para ello, tomamos el Caso 1 y 2.de la CABA y el Caso 3: Partido de Vicente López en la Provincia de Buenos Aires.

AySA

Caso 1: CABA

Total a pagar 11/01/16 235.28
Cargos por servicios 200.28
Subsidio al servicio 10.03
Total cargos serv. 190.25

Tasas e impuestos

Fto. ERAS 1,550% 2.95
Fto. APLA 1.120% 2.13
IVA base 21,00% 39.95
Total impuestos 45.03

C/Recargo al 26/1/16

Recargo 2,055% 2.41
IVA base 21,00% 0.51
Total a pagar el 26//16 238.20

Caso 2: CABA

Total a pagar 11/01/16 48,23
Cargos por servicios 85,72
Descuento s/AUD) 44,68
Total cargos por servocios 41,04
Subsidios al servicio -2,04

Tasas e impuestos

Fto. ERAS 1,550% 0,6
Fto. APLA 1.120% 0,44
IVA base 21,00% 8,19
Total impuestos 9,23

C/Recargo al 26/1/16

Recargo 2,055% 0,49
IVA base 21,00% 0,1
Total recargo e impuestos 0,59
Total a pagar el 26//16 48.82

Caso 3. Buenos Aires (Vte. López)

Total a pagar 11/01/16 1.366,44
Cargos por servicios 929,08
Subsidio al servicio 46.46
Tasas e impuestos 483.82
Fto. ERAS 1,550% 13.68
Fto. APLA 1.120% 9.89
IVA base 27,00% 238.31
Perc IVA suj no cont 13,50% 151.33
Perc. IIBB RI 8,0% 70.61

C/Recargo al 26/1/16

Recargo 3.083% 20.90
IVA base 21,00% 5.64
Perc. IVA suj.no categ. 13.50% 3.58
Perc. IIBB RI 8,000% 1,67
Total a pagar el 25/01/16 1.398.23

Observaciones:

En primer lugar, se observa una complejidad en la confesión de las boletas pues existe el cargo del servicio, que indicaría el precio por al prestación del mismo, luego aparece el subsidio, una compleja carga impositiva de fondos de financiamiento, impuestos nacionales, provinciales, locales. En algunos casos el IVA con la alícuota del 21% pero en el Partido de Vicente López es de 27% y se percibe un IVA sujetos no contribuyentes del 13,5, lo que hace que se pague un IVA de 34,50%. Si no se paga en término a los pocos días se incrementa la deuda volviendo a pagar recargos y los demás impuestos sobre impuestos ya acreditados. Sinceramente un mamarracho que demuestra la baja capacidad profesional de quienes diseñan estas tarifas.

En el Caso 2 el monto de pago del servicio está para una cochera de 2×2.50m2 en un edificio de cocheras donde existe únicamente un bañito en el último piso de 0.70×1 m2 y una piletita para lavarse las manos el personal de seguridad. Sinceramente una locura, lo que pasa es que las tarifas de agua se calculaban en la CABA por los arquitectos en base a los m2. Totalmente absurdo.

EDENOR CABA

Total a pagar 22/12/2015) 116,18
1. cargo fijo s/subsidio 15,76
2. cargo var. s/subsidio 214.62
3. Resol. ENRE 347/12 10.00
10. Subsidio al consumo 189,4
Subtotal serv el. c/sub. A 50,98
Factor de estabil. 15.75
Subtotal B 66,73
Ajuste anual FE 11.52
Subtotal C 78.25
IVA 21% 16,43
Contr. Municipal 6,383% 5.00
F. Santa Cruz L. 23.681 0,6000% 0,47
Cargo Resol. SE. 745/05 11.41
Ajuste anual FEP 4,61
Subtotal D 37,83
Total C + D 116,18
Total al 22/01/16 118,31

Recargo s/ítems 1a 4, 6, 7, 8, 10 a 13

15, 16, 18 y 23 – 1,4374% 1,67
Recargo IVA 21,00% 0,35
Contrib. Municipal 6,3830% 0,11

Observaciones:

En el caso de EDENOR hay una explicación del cargo fijo y variable sin subsidio y luego el subsidio al consumo. Hay una serie de ítems 1, 2, 3, 10. El 10. subdividido en Subtotales A, B y C con factores de estabilización, ajuste anual, IVA 21%, Contribución Municipal 6,383%, Fondo de Santa Cruz 0,6000%, resoluciones varias y recargos por el pago en segundo vencimiento donde figura un recargo sobre los ítems 1 a 4, 6, 7, 8, 10 a 13, 15, 16. 18 y 23 sin aclarar de que se trata. Nuevamente se aplican multas sobre impuestos ya devengados. Evidentemente esto no es una estructura tarifaria, es un mamarracho.

METROGAS CABA

Total a pagar 20/7/15 46.35
Cargo fijo 13.55
Resol. ENRG 1240 + FOCE Gas 4.00
Consumo 18.06
Costo gas importado 2.84
Subtotal 38.45
IIBB transporte (2) 0,14
IIBB distribución (2) 1,9
Ajuste L. 25463 (2) 0, 53
Total consumo 41,02
IVA general 21,00% 8,02
Fondo Art. 75.L. 25565 0,15
Total factura 46.35

Nota: (2) monto facturado no constituye percepción y no podrá computarse como pago a cuenta.

Observaciones:

En el caso de Metrogas, no se observa grandes diferencias con la las boletas de AySA y EDENOR, pero cabe observar que hay el pago de un Ingreso Bruto transporte y un Ingreso Bruto distribución. La tarifa se compone del cargo de gas del país y el costo del gas importado. Hay resoluciones administrativas y un nota 2 monto facturado no constituye percepción y no podrá computarse como pago a cuenta. Muy claro por supuesto (¿).

Como se habrá podido observar en base a los antecedentes teóricos expuestos y a la complejidad del tema que está en sus manos, evidentemente no será fácil la solución para las actuales Autoridades Nacionales, pues corremos el riesgo de un traspié en la figura presidencial, ya que todos estamos esperando, algunos con piedras en las manos para cascotear a la figura presidencial como si fuese el responsable del desaguisado que dejó la irresponsable sureña mientras que otros estamos dispuestos a pagar lo que se decida definitivamente.

En nuestro carácter de profesor de Finanzas Públicas con experiencia profesional en el sector público (área presupuesto) sugerimos no tomar ninguna decisión definitiva sin tener claro el objetivo e implementación de lo que se haga con consenso y unificación de los objetivos que se implementen en el Presupuesto Nacional 2016 y explicando a la población a la manera que lo hacia el Ing. Alsogaray cuando fue Secretario de Comercio, tanto por medios televisivos y periodismo, sobre la verdadera situación económico-financiera que encontraron el país el 10 de diciembre pasado y los costos que todos debemos pagar por una pandilla de irresponsables que la justicia deberá condenar penalmente.

Dada la formación y ejercicio profesional que algunos Ministros han desarrollado en la actividad privada, conociendo muy bien como funciona una empresa multinacional en materia de recursos humanos, inversiones, mercados, planes, programas, proyecciones de crecimiento y desarrollo en las empresas públicas es totalmente diferente: no hay un propietario que atosigue al personal, que toma decisiones, que observa y estudia los mercados nacional e internacional.

En el sector público prima el burócrata que generalmente ignora al consumidor y no tiene inconveniente alguno cuando no le cierran las cuentas de crean un impuesto, tributo o cualquier triquiñuela como usted podrá observar en las boletas que hemos comentado como hace actualmente YPF.

Una buena medida a los efectos de no incrementar económicamente demasiado las boletas de luz, agua y gas, nosotros eliminaríamos todos los impuestos nacionales, provinciales y municipales y el producido por ese conjunto vaya a parar a las empresas como parte de las tarifas. La recaudación que le falta a los entes públicos no habrá otra manera que bajar el monstruoso gasto público que se ha generado en estos 12 años en inversiones antieconómicas, exceso de personal, corrupción masiva y despilfarro generalizado.

En el caso que el país no cuente con especialistas en el diseño de tarifas públicas, contrate especialistas extranjeros de países que tienen gran experiencia sobre el tema tarifario de servicios públicos. No se permiten equivocaciones en este momento tan difícil para la estabilidad gubernamental del país, en especial aquellos que deseamos que Argentina cambia el rumbo decadente de estos 85 años.

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