Por Guillermo Cherashny.-

El nuevo ministro de hacienda Nicolás Dujovne dijo que buscará bajar el déficit, subir el gasto en infraestructura y bajar impuestos, lo cual supone una abierta contradicción de objetivos, aunque habrá que verlo actuar porque, al estar la economía en recesión, encarar una baja del gasto público puede significar que se profundice la recesión, que este año puede llegar a cerca del 3% del PBI, y da la impresión de que con el atraso cambiario existente será una tarea difícil de cumplir, ya que la inflación fue del 40% y la devaluación fue sólo del 20% y esta combinación de atraso cambiario con recesión facilita la baja de la inflación, que en este mes de diciembre puede ser la más baja con 1,2%. Pero la caída del consumo es brutal y se ve este fin de año por la soledad con que se encuentran los supermercados y almacenes con productos de primera necesidad y parece difícil que el verano de buenas noticias.

Así las cosas, Dujovne tendrá una tarea difícil de cumplir en un año electoral donde el gobierno necesita ganar, especialmente en la provincia de Buenos Aires.

Share