Por Guillermo Cherashny.-

Germán Fermo es un joven economista que publica artículos en varios medios; es especialista en finanzas y opina habitualmente sobre si hay que invertir en bonos, monedas, metales, etc. Dirigía la maestría de finanzas en la Universidad Torcuato Di Tella, una casa universitaria de excelencia que provee materia prima al gobierno de Cambiemos. Fermo es un crítico del excesivo déficit fiscal que tiene el Gobierno y del cuasifiscal que producen las LEBACs en el BCRA con las altas tasas de interés.

Hace diez días publicó un artículo en «El Cronista» titulado «¿Duranomics y un gigantesco esquema Ponzi?», donde desarrolla la interesante teoría de que la macroeconomía de este Gobierno está diseñada por un especialista en marketing político como es Jaime Durán Barba, el estratega de las políticas del Gobierno, que lo llevaron al triunfo en 2015 y 2017.

El análisis de Germán Fermo es puramente económico en la crítica a Durán Barba, cuestión que hasta ahora no fue desarrollada en profundidad. Al hablar de Duranomics está diciendo que los ministros del área económica de Cambiemos manejan la macroeconomía bajo los consejos del ecuatoriano y señala que la Argentina tiene un déficit fiscal financiero del 6,7% del PIB, un 2% cuasifiscal y un 4% del comercio exterior y que todo se financia en gran parte con el endeudamiento externo y con el privado nacional a través de las LEBACs.

Pero lo más grave de esa nota y que seguro incomodó a los economistas del Gobierno -y no se sabe si al presidente- es que comparó al primer mandatario con Bernie Madoff, el financista americano que utilizó el esquema Ponzi y que terminó en la cárcel; es decir, tomaba dinero prestado y lo invertía, hasta que dejaron de prestarle y eso lo llevó a la ruina.

En el caso de Mauricio Macri, estaría tomando prestado del exterior y del sector privado para construir rutas, cloacas y puentes, hasta que un día les diga a los ciudadanos que no puede seguir con las obras porque no le prestan más.

Se supone que el Presidente de la República, cuando se entere de esta decisión del rectorado de la Di Tella censurando una opinión económica, tratará de que se repare esta enormidad con la inmediata restitución en el cargo de Germán Fermo; caso contrario, estaríamos ante una grave violación de la libertad de expresión.

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