Por Luis Alejandro Rizzi.-

Más de una vez se intentó pagar las importaciones con moneda local las operaciones de comercio exterior. Obviamente esta “idea” aparece cuando los países no tienes divisas, que es lo que nos pasa en la Argentina.

Ahora se intenta usar las mondas locales en el comercio con Brasil y China, pero lo que no se tiene en cuenta es que los precios se fijan en “dólares” y en algunos casos en “euros”, por lo tanto, en el comercio con Brasil, por ejemplo, Argentina pagará sus importaciones y cobrará sus exportaciones con moneda local, al tipo de cambio “dólar”, con el agravante que, si se aplica el tipo de cambio oficial, se subsidiarán las importaciones y se desalentarán las exportaciones. Brasil no tiene el problema de la carencia de divisas que, tenemos nosotros, por lo tanto, es obvio que la idea mucho no le debe gustar. Además, ese dinero no será genuino, será “emitido”, otro impulso a la inflación.

Si el intercambio comercial fuera parejo sería posible compensar los saldos con las monedas locales, pero los saldos favorables se deberían pagar con la moneda del país acreedor, que estará relacionada con el tipo de cambio con el dólar o con dólares cantantes y sonantes.

Carlos Pagni lo explica en La Nación de hoy con sólo tres renglones en el caso del uso del “yuan”: “…llega una fecha a partir de la cual hay que devolver los yuanes, para lo cual hay que gastar dólares. Dicho de otro modo: la caída de reservas no se cancela, se posterga.

Por otra parte, siendo la Argentina país deudor neto, carece de capacidad de “crédito” por lo tanto en este último y disparatado viaje de “eso” y Massa a Brasil terminó en un pedido de limosnas que sabemos, implica la imposibilidad de su devolución, por eso se pidieron “garantías” lo que no deja de ser una humillación a un país que se cree “soberano”.

Pasa que Massa es un “mamarracho” y cree que se mueve en un mundo de giles que como dice Pagni, no usan internet…

Estamos viviendo uno de los tiempos más vergonzosos de nuestra historia.

Lamentable.

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