Por Guillermo Cherashny.-

Desde que Mauricio Macri asumió la presidencia, no quiso tener un Ministro de Economía fuerte, de ahí que dividiera la gestión económica en varios ministerios y, en el ajuste de cargos políticos, seguirán los mismos ministros del área económica: Dujovne, Caputo, Cabrera, Ibarra, Etchevehere, etc.

El súper ministro de hecho fue hasta ahora Federico Sturzenegger, Presidente del BCRA, quien con el manejo de las tasas de las LEBACs era mucho más importante que los otros ministros del área. Pero anteayer, Luis Caputo, el Ministro de Finanzas, salió a competirle a las LEBACs con las LETES, es decir, las Letras del Tesoro, y tomó pesos a 91 días al 26%, es decir 3 puntos menos que el BCRA.

Está claro que el Presidente autorizó esta competencia porque se anotició sobre lo que predijo el economista Miguel Broda, quien señaló que con esta tasa de LEBACs el atraso cambiario y el déficit fiscal en junio se terminaría la recuperación económica, y se supone que el Presidente se asustó y le encomendó a Caputo tomar pesos del mercado a menor tasa.

Sin embargo, tanto Sturzenegger como Luis Caputo están empatados en el déficit fiscal que generan, que es casi idéntico, a saber, 2,5% del PBI es el que se generó con el endeudamiento externo que maneja Caputo y una cifra parecida es el déficit cuasifiscal del BCRA por las LEBACs, en tanto Nicolás Dujovne, el Ministro de Hacienda, bajó el déficit el 1%; pero como los otros dos lo subieron el 5%, la diferencia es una suba del 4%, de ahí que se genere el atraso cambiario, por lo cual las LETES de Caputo no podrán evitar que se cumpla el pronóstico de Broda.

Ayer el Gobierno intentaba aprobar las reformas tributaria y previsional en la Cámara de Diputados para ralentizar 1,5% del PBI, pero su rechazo es un grave problema para el Gobierno.

Así las cosas, el Gobierno está en un serio problema económico derivado del gradualismo que eligió el Presidente y que no piensa abandonar, salvo que le salga mal y se cumpla en junio el pronóstico de Broda.

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