Por Antonio Rossi.-

A siete meses de haber desembarcado en la Casa Rosada, la administración de Alberto Fernández aún no ha terminado de completar los organigramas y los nombramientos previstos en los cargos ejecutivos clave de los distintos ministerios.

Si bien en las últimas semanas el gobierno ha comenzado a subsanar esa situación, los movimientos que se vienen registrando en varias reparticiones con las postulaciones y designaciones para los casilleros en juego han generado un creciente descontento interno.

En la cartera de Desarrollo Productivo y el área energética, el malestar de los empleados y contratados que están identificados con el Frente de Todos se focaliza en el hecho de que buena parte de los cargos de directores están siendo cubiertos con ex funcionarios macristas y ex ejecutivos de YPF.

Los destinatarios de las críticas son el ministro Matías Kulfas y el Subscretario de Hidrocarburos, Juan José Carbajales, quienes han decidido incorporar al staff de directores nacionales a las siguientes personas.

La primera cuestionada es la elegida para ocupar el cargo de directora de Contrataciones y Compra. Se trata de Leticia Nicole Paganotti Di Prinzio, una ex funcionaria macrista que formó parte de los gabinetes Aranguren y del ex secretario de Energía, Gustavo Lopetegui.

Vocal de la agrupación política de Elisa Carrió en el partido de San Martín, Paganotti Di Prinzio había ingresado en julio de 2017 como asesora legal del ex subsecretario de Coordinación Administrativa, Marcelo Blanco, quien había sido presidente de la filial local del Deutsche Bank y gerente de Pampa Energía.

Una de las primeras medidas que llevaron adelante Paganotti y Blanco en el ministerio de Energía fue el desmantelamiento del “call center” de atención a los usuarios donde trabajaban más 100 operadores contratados. Cuando en mayo de 2018 Blanco renuncia para pasar al gobierno de María Eugenia Vidal, Paganotti Di Prinzio pasa a trabajar con Pablo Giampieri, la mano derecha de Lopetegui hasta diciembre de 2019.

El segundo apuntado es Mariano Santillán, designado como nuevo Director de Inspecciones y Seguridad del ministerio de Desarrollo Productivo.

Entre 2007 y 2014 fue Director de Servicios de la Municipalidad de Avellaneda. Después pasó los últimos meses del segundo mandato de Cristina Kirchner como asesor de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y la Acumar.

Tras el cambio de gobierno a fines de 2015 se suma la administración macrista y en 2017 es nombrado como Director Ejecutivo de la Agencia de Residuos de la intendencia de Pilar que encabezó Nicolás Ducoté.

El tercero en la mira es Daniel Francisco Rigou, el principal candidato a ocupar el cargo de Director Nacional de Refinación y Comercialización. Rigou proviene del sector petrolero. Entre 1986 y 1997 trabajó en Astra CAPSA y luego se incorporó a YPF donde se estuvo hasta febrero del año pasado como “Project Manager”.

En la última elección del Centro de Graduados de la Facultad de Ingeniería de la UBA, Rigou integró la lista de Cambiemos y el PRO, ocupando el segundo lugar entre los candidatos de ese especio.

Los que objetan su elección para el cargo advierten que, si se formaliza su nombramiento, se incurriría en una violación de la normativa de ética pública porque estaría alcanzado por la incompatibilidad para ser funcionario público debido a que dejó su cargo en YPF hace menos de dos años.

A esos tres nombramientos se agregan otros tres correspondientes a profesionales que ya habían trabajado durante la administración kirchnerista bajo las órdenes de Carbajales en la empresa estatal Enarsa.

Se trata de Adriana Serrani, Directora de Gas Licuado de Petróleo; Nicolás Ferri, Director de Tarifas y Regalías, y Santiago Evers, el nuevo titular de la Dirección de Producción y Reservas.

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