Por Israel Rabinowicz.-

Mi origen argentino, además por mi edad los he vivido, hacen que en el tema golpes de estado juegue de local, con ventajas.

No habían transcurrido 2 horas desde que comenzaron las primeras informaciones sobre el golpe en Turquía, todas las cadenas informativas del mundo sorprendidas, en Israel fue tanto el impacto, el shock, es tanta la importancia de todo lo que suceda en ese país que hizo que las cadenas de televisión y radios israelíes profanaran el Shabat para movilizar a todos sus equipos periodísticos y de comentaristas, transmitieron continuado toda la noche siguiendo los acontecimientos, repito, no habían transcurrido 2 horas cuando en un correo electrónico dejé escrita mi opinión, nada que ver con un verdadero golpe, nació ya fracasado, muerto, los hilos conducían a un solo beneficiado.

No existe golpe de estado en donde desde un primer momento no aparezca un nombre aglutinante, un jefe, una figura que fuere su cabeza, aquí no lo había o por lo menos no se lo conocía que, para sus efectos es exactamente lo mismo, no existe golpe en donde la detención de jefe del gobierno “ derrocado “ no sea la primera acción que se concreta, tampoco se conoció que Erdogan fuere detenido o asesinado, tampoco existe golpe en donde los ministros y figuras del gobierno que se pretende derrocar continúen realizando libremente declaraciones periodísticas, todos hablaban y así muchos otros pequeños grandes detalles se acumulaban que muy rápidamente me esclarecieron el panorama, no es una golpe, es una farsa.

Dentro de los muchos comentarios post golpe me interesó escuchar al de un ex jefe del Mossad, dijo que era imposible que los preparativos del mismo no hubieren trascendido, que Erdogan no los conociese, además los mejores servicios de inteligencia de muchos países operan en Turquía intercambiándose información, imposible que dichos movimientos de preparación no fueren detectados, el espionaje y contraespionaje está activo en cualquier mesa de café, muchas exitosas novelas del genero allí se ambientaron.

Para el que estas líneas escribe el Presidente Erdogan no podía desconocer la preparación del golpe y que, ante su precariedad e improvisación lo dejó avanzar, ahora como fortalecido ganador las consecuencias no se hacen esperar, le ha dado la excusa perfecta para avanzar en su proyecto religioso y político, internamente miles de detenciones contra golpistas y opositores, externamente muchos nuevos conflictos internacionales esperan, le agrada jugar fuerte capitalizando que todos lo necesitan como amigo, ya los abrió con Estado Unidos al reclamar públicamente la extradición de quien él decidió elegir como enemigo, como ideólogo jefe de la revuelta, el clérigo Fethullah Gullen exiliado en los Estados Unidos desde 1999, además ahora Europa con Angela Merkel a la cabeza tienen de qué preocuparse, los demorados comunicados de sus cancillerías repudiando el golpe, la diplomacia siempre espera hasta comprobar hacia donde soplan los vientos, en el rencoroso Presidente Turco no quedarán en el olvido.

También es claro que si éste no fue un golpe de estado de verdad por las razones que fueren, como consecuencia a las medidas de persecución interna e internacional que el Presidente Erdogan aprovecha para instrumentar, el verdadero golpe, el que sí va a triunfar ya comenzó a gestarse, según el jefe del Mossad antes de 3 años nuevos aires soplaran sobre Turquía, en el medio solamente conflictos a diestra y siniestra, nadie ni nada estarán exentos.

Pero no todas son noticias tremendistas o preocupantes, ya podemos detectar ganadores, la rapidez, inteligencia y picardía de los Argentinos nuevamente se hace notar, como dentro de los primeros detenidos en Turquía ya hay más de 3000 jueces desde Argentina se apresuraron a ofrecer cubrirles en forma inmediata ése faltante, dicen que están en condiciones, sin pasar previamente por el Consejo de la Magistratura o por los juicios políticos de destitución, de enviarles todos los jueces que requieran, como parte del acuerdo les garantizarán que nadie revisará sus patrimonios, sus cuentas off shore, sus millonarios saldos en el exterior ya podrán ser por ellos directamente administrados, disfrutar de la vida, evitarán acciones penales, nadie en Turquía nada les reclamará. Varios aviones charters de Turkish Airlines ya esperan en Ezeiza para partir a medida que se vayan completando.

Es posible que otros países latinos americanos rápidamente se adhieran al original acuerdo entre Turquía e Argentina, siempre hay que mirar la parte llena de las copas, además después de éste primer acuerdo piloto especial para jueces argentinos puede ampliarse hacia otras direcciones, lo único negativo de su generalización es la posibilidad de despoblar Argentina, suerte que con la llegada de los refugiados Sirios que el gobierno argentino aceptó recibir parte de ésa calificada migración puede compensarse.

Hasta la próxima.

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