Por Carlos Vilchez Navamuel.-
El actual presidente de Colombia, Juan Manuel Santos Calderón, está festejando el acuerdo que se firmó recientemente con las FARC. Solamente falta que los colombianos voten por el sí al plebiscito que se realizará en Colombia el próximo domingo 2 de octubre para que el acuerdo quede sellado.
Mientras esto sucede, en las redes sociales apareció un video que está dando que hablar, el video muestra la declaración del periodista venezolano, Pedro García, explicando la traición de Juan Manuel Santos a Álvaro Uribe. El video tiene una duración de cerca de 14 minutos, allí el periodista asegura que Santos fue un infiltrado del régimen cubano en el gobierno del ex presidente colombiano Álvaro Uribe.
Pedro García, afirma en el video entre otras cosas que Juan Manuel Santos es “Un comunista que no ama a su patria. Un comunista que odia a Colombia. Un comunista que se arrastra como una meretriz ante los intereses cubanos. Un comunista que apoyó movimientos terroristas y lo sigue haciendo”.
https://www.youtube.com/watch?v=JYc9KXSAyaE
Y para fermentar más dudas a la denuncia que hace el periodista venezolano García en ese video, Sergio Araújo, amigo de Santos por más de 30 años escribió el 2 de marzo de 2016 lo que sigue “¿Será otra fábula latinoamericana? ¿O será posible que “Santiago” haya sido el arma más sofisticada del comunismo para Colombia? Una organización militar de 60 años, bien financiada, pudo hacer una infiltración así y muchas más. Camilo Torres es un ejemplo de cómo personas de relevancia fueron seleccionadas y reclutadas. ¿Es Juan Manuel un Camilo exitoso?
Su comentario termina con estas palabras “He repasado en la memoria los 31 años que tengo de conocer a Juan Manuel Santos y nada encaja; todo en su parábola pública es incomprensible ante el presente. Sus actos y palabras antes del 7 de Agosto de 2010 son tan distintas a su norte como gobernante, que lo único coherente sería que todo haya sido un plan y Santos sea el perfecto Caballo de Troya del comunismo internacional. Suena delirante, pero ya nos está entregando a las FARC”.
http://www.kienyke.com/kien-escribe/el-regalo-griego/
Para aquellos que quieran profundizar más en este tema pueden leer un extenso artículo que publicó, Periodismo sin Fronteras, el 1 de julio de 2013 escrito por Ricardo Puentes Melo titulado: “Los Santos y su militancia castrocomunista” donde afirmó que “Juan Manuel Santos, desde sus años mozos de universitario, ya admiraba al Ché Guevara y a Fidel Castro. Esa fue la razón porque la que su padre, Enrique Santos Castillo, un seguidor de la vida de Franco, lo recriminara frecuentemente. No por nada, sus clases de comunismo avanzado en el Colegio San Carlos, cuyo rector es hoy el padre Francis, lo prepararon para ser el encargado de llevar a Colombia al desierto del comunismo de Castro”.
http://www.periodismosinfronteras.org/los-santos-y-su-militancia-castrocomunista.html
A nosotros siempre nos pareció extraña la transformación de Juan Manuel Santos que pasó de ser enemigo de Hugo Chávez cuando era Ministro de Defensa en la presidencia de Álvaro Uribe a su inmediata amistad (muy sospechosa) con el difunto presidente venezolano cuando él llegó a la presidencia.
Para algunas personas, esta información responde también a todas esas preguntas que se hacen del por qué el gobierno de Juan Manuel Santos cedió tanto en el acuerdo que firmó con las FARC. ¿Usted qué piensa?
01/10/2016 a las 6:28 PM
No sería de extrañar, pero había que terminar una guerra civil tan prolongada y terrible de una buena vez.
Yo me preguntaría mucho más que ganó el campesinado y los adherentes de la guerrilla en todo este proceso tan doloroso, y no tanto que pierden los colombianos que no integraron el movimiento insurreccional.
¿Tendrán acceso a la tierra, o a la vivienda que merezca llamarse así, a mejoras en los hospitales y escuelas, o a la promoción de sus derechos cívicos?. ¿ O sus líderes terminan siendo multimillonarios, y los mega terratenientes siguen siendo tales, y continuarán mandando como si fueran modernos virreyes?.
¿ Qué sucederá con las plantaciones de coca?. ¿Se destruirán, y se convertirán en tierras de cultivo para mejorar la alimentación, y erradicar la desnutrición de los más pobres del país?.
Son las mismas preguntas que debemos hacernos respecto a la «revolución cubana». Todos ya sabemos la respuesta de lo que pasó, y de lo que presumiblemente pasará con todas estas preguntas, y es ahí donde deberemos poner el foco en nuestro análisis.
La situación de los más pobres hoy es muchísimo peor que hace cincuenta años en toda Latinoamérica y el Caribe. El aumento de la pobreza e indigencia son intolerables.
Los procesos de paz solo son sostenibles cuando se encara a fondo la erradicación de todos estos males. Hay que lanzar un sostenido programa de desarrollo económico y social sustentable en el continente. Está claro que los procesos populistas de los últimos quince años son un fracaso rotundo, a juzgar por sus resultados en Venezuela, Brasil y Argentina principalmente.
El proceso de paz es un buen comienzo, aunque sea de origen dudoso, y sus firmantes y mediadores por demás de cuestionables, por no llamarlos a algunos de ellos repulsivos.
Saludos Cordiales
03/10/2016 a las 3:45 PM
Si una vez se meó encima en el
escenario donde estaba hablando,
hay que rogar que no suba ahora,
luego del resultado del plebiscito
porque inexorablemente se cagará
encima.
Pobre zurdito chotonga; eso se
llama ir por lana y volver esquilado.