Por Israel Rabinowicz.-

Si el Presidente de Bolivia con su regalo al Papa Francisco buscó ser noticia mundial, lo consiguió, superó seguramente cualquier pronóstico inicial, demostró conocer muy bien cómo funciona el marketing, la promoción.

El obsequio del presidente boliviano Evo Morales al Papa Francisco – un Cristo crucificado sobre una talla en madera con la hoz y el martillo- suscitó controversias, era obvio que así sería, muchos consideraron a ese regalo como una provocación.

No obstante diversas fuentes desde el gobierno boliviano insistieron con el argumento que se trata de una creación del sacerdote jesuita, poeta y cineasta Luis Espinal, asesinado en 1980 por paramilitares de derecha.

«Estamos acostumbrados a la originalidad creativa del presidente Morales», comentó monseñor Eugenio Coter, vicario apostólico del departamento amazónico de Pando, al ser interrogado sobre el regalo, que alude a un símbolo del comunismo.

«Es una provocación, una travesura», consideró por su parte el obispo emérito castrense Gonzalo del Castillo.

«El padre Espinal ha estado con los pobres, ha sido torturado antes de ser asesinado. Es el padre que ha diseñado, tallado, se trató de un regalo simbólico «porque la hoz significa labrador y el martillo carpintero ambas figuras representan a poblaciones humildes, trabajadoras, personas de Dios». No es invento de Evo Morales, solo estamos recuperando ese mensaje del padre Luis Espinal»

«Esa fue la intención de este regalo y no fue ninguna otra maniobra o cualquier otro supuesto que se puede estar manejando al respecto», agregaron fuentes de la presidencia.

El propio Papa, con su fina inteligencia y conocedor de la picardía latino americana, lo asumió con seriedad pero sin inclinarse hacia ninguno de los extremos, la sonrisa y el silencio fue su mejor respuesta.

Era claro que habría comentarios para todos los gustos, para más el propio Papa Francisco al llegar a Bolivia rindió homenaje a Espinal rezando ante el lugar donde su cuerpo torturado y acribillado fue encontrado en La Paz.

Todo lo arriba simplemente para llevar mis recuerdos a fines de 1961comienzos del 62 cuando el que estas líneas escribe cursaba su licenciatura en la Facultad de Ciencias Económicas en la Universidad Nacional de Córdoba.

Invitado para dictar una conferencia llegó el Profesor Dr. Silvio Frondizi, reconocido intelectual de izquierda que años después por sus ideas fue asesinado. La conferencia transcurrió con toda normalidad dentro de los parámetros ideológicos previstos, llegó el turno a las preguntas de los asistentes muchas de ellas lo llevaron al terreno de la religión.

Dijo, mi esposa es católica practicante, muy creyente, por ello sobre nuestra cama matrimonial cuelgan una cruz y la foto de Marx, no son incompatibles, ambos lucharon por la salvación del hombre…

Hasta la próxima.

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