Por Claudio Chaves.-
En lo personal no tengo dudas que el gobierno de Nicolás Maduro es una de las siete plagas que azotan a la humanidad, razón por la cual hubiera sido grato para mí que Francisco no recibiera al presidente de Venezuela, como lo hizo, ponerle mala cara o sencillamente llamarlo a la reflexión acerca de su desgobierno y mal trato a los opositores. Pero a veces las cosas no salen como uno quiere y eso no está mal.
Dicho esto me pregunto: ¿es que el Papa debe hacer lo que a mí me agrada o lo que corresponde? En principio el gobierno venezolano ha surgido del libre ejercicio de la democracia. Podemos discutir, sí, cuanto se ha alejado de ella y fijar con alguna precisión el quiebre institucional existente. Muchas voces se han pronunciado hacia un lado o hacia el otro de la prolífica biblioteca republicana. Sin embargo mientras discutimos y tratamos de acercar voces tan disonantes, el pueblo y la Nación venezolana sufren la inestabilidad y la latencia de lo inminente. En síntesis ¿qué ha hecho el Papa? tratar de mediar en un conflicto sumamente grave que anticipa una posible guerra civil. ¿Es malo esto? ¿Es incorrecto mediar para evitar muertes y una fractura difícil de cerrar una vez que silban las balas?
Desde Tordesillas en 1494 cuando España y Portugal se disputaban el dominio del mundo hasta 1978 cuando el Cardenal Samoré por orden de Juan Pablo II medió en el conflicto entre Chile y nosotros, la Iglesia ha intervenido en conflictos terrenales evitando su progresión. Seguramente de haberse producido la guerra en el sur uno de los dos tiranos, Videla o Pinochet, habría desaparecido. Para la democracia, muy bueno, para el pueblo argentino y chileno hubiera sido una tragedia incalculable. Lo mismo aplica para Venezuela.
Entre una fecha y la otra pasaron quinientos años y el Vaticano no siempre medió, a veces tomó partido abiertamente por uno de los bandos en pugna. Eso fue así cuando una de las partes no solo se enfrentaba a otra sino cuando en esa guerra se ponía en juego la integridad de la Iglesia y sus ovejas al decir de Bergoglio. Por caso, la Guerra Civil española cuando el bando comunista-trotskista-anarquista destruía iglesias, asesinaba sacerdotes y violaba monjas. En esa oportunidad el Papa Pío XI fue claro y drástico poniéndose abiertamente del lado del bando franquista o nacional. En la Encíclica Divini Redemptoris de 1937 afirmaba: “en nuestra queridísima España, el azote comunista no ha tenido tiempo todavía para hacer sentir todos los efectos de sus teorías, se ha desencadenado, sin embargo, como para desquitarse, con una violencia más furibunda. No se ha limitado a derribar alguna que otra iglesia, algún que otro convento, sino que, cuando le ha sido posible, ha destruido todas las iglesias, todos los conventos e incluso todo vestigio de la religión cristiana, sin reparar en el valor artístico y científico de los monumentos religiosos. El furor comunista no se ha limitado a matar a obispos y millares de sacerdotes, de religiosos y religiosas, buscando de un modo particular a aquellos y a aquellas que precisamente trabajan con mayor celo con los pobres y los obreros, sino que, además, ha matado a un gran número de seglares de toda clase y condición, asesinados aún hoy día en masa, por el mero hecho de ser cristianos o al menos contrarios al ateísmo comunista. Y esta destrucción tan espantosa es realizada con un odio, una barbarie y una ferocidad que jamás se hubieran creído posibles en nuestro siglo. Ningún individuo que tenga buen juicio, ningún hombre de Estado consciente de su responsabilidad pública, puede dejar de temblar si piensa que lo que hoy sucede en España tal vez podrá repetirse mañana en otras naciones civilizadas.”
O Juan Pablo II que en su cruzada anticomunista avaló al Sindicato Solidaridad de Lech Walesa en su Polonia natal o cuando condenó exigiendo el apartamiento de los sacerdotes que acompañaban la revolución marxista del sandinismo en Nicaragua. Se conservan aun filmadas las imágenes del Papa retando a Ernesto Cardenal en Managua, aunque el poeta tratara de convencer a Karol Wojtyla del carácter cristiano de dicha revolución.
¿Es este el caso que se presenta en Venezuela? Muy lejos de ello. En el enfrentamiento político la Iglesia no está en cuestión, los cristianos tampoco. El mismo Chávez al conocer la presencia en su cuerpo de un mal incurable se aferró a la Cruz como lo mostró en distintos actos públicos. De modo que al no estar involucrada de manera directa la Iglesia puede y debe mediar. Pero lo esencial, lo geopolíticamente insoslayable es que el poder del comunismo mundial ha desaparecido. Terminó la Guerra Fría y no hay una ideología alternativa al capitalismo capaz de destruirlo. Lo que hay es progresismo, o mejor dicho retroprogresismo, una izquierda a la violeta y perfumada que es como la bosta de paloma ensucia pero no da olor, al decir del general Perón. De modo que a no desesperar. Por otro lado es interesante la opinión del recientemente nominado Superior de los jesuitas SJ Arturo Sosa Abascal, natural de Venezuela, que al referirse al conflicto en su país observó que los dos bandos en pugna tienen el mismo programa económico, básicamente rentista. Sustentado en la renta que deja los ingresos petroleros. Justifica un mismo modelo económico la muerte entre compatriotas. Ha hecho muy bien Francisco en mediar. Es bueno que la sociedad política venezolana lo escuche.
28/10/2016 a las 11:20 AM
Bergoglio es un «teólogo de la liberación», es decir, marxista «cristiano».
Por eso no tiene nada de raro que apoye al régimen comunista en Cuba, gobiernos neo comunistas, como el de Maduro y Kirchner, y las FARC y haya «beatificado» Arnulfo Romero.
28/10/2016 a las 11:50 AM
TENES UN LADRILLO DONDE DEBERIAS TENER EL CEREBRO, WAIBEL.
29/10/2016 a las 6:10 PM
Le pido que demuestre su acusación.
29/10/2016 a las 9:28 AM
comparto totalmente su opinión
29/10/2016 a las 11:57 AM
Y UDS. DOS PAJAROLOCO Y LUIS TIENEN UNA BOLSA VACIA Y SECA DONDE DEBERIAN TENER LOS HUEVOS.
FELICITACIONES DON TOMAS WAIBEL, BERGA-AL-OLEO ES UN ZURDO HIJO DE MIL PUTAS, VIOLENTO, CORRUPTO, MENTIROSO, POPULISTA, FALSAMENTE HUMILDE, EXTASIADO POR LA PLATA Y MARICON.
29/10/2016 a las 6:12 PM
Gracias por el apoyo. Realmente solamente personas totalmente enceguecidas no ven lo que es Pancho I.
No hay peor ciego que aquel que no quiere ver.
29/10/2016 a las 6:10 PM
Le pido que demuestre su acusación.
28/10/2016 a las 1:21 PM
Estimado Sr. Chaves:
La empresa Indra:
elmundodeloslocos.wordpress.com/2016/06/30/los-escandalos-de-indra-la-empresa-encargada-del-conteo-electronico-en-las-elecciones-del-26j/
¿Ni una sombra de duda sobre la «democrática» contratación?
28/10/2016 a las 5:37 PM
Simplemente ¡Buenísimo!
28/10/2016 a las 9:27 PM
Claudio Chaves pro potato, das pena. No importa solo un modelo económico, que tampoco son iguales, sino que está en juego la democracia, mucho más grave. Tampoco surgió este gobierno chavista de una elección democrática sino que salió del fraude y el apriete. Todo eso vos lo podés soslayar, pero los que tenemos los ojos abiertos te vemos bien como sos: un pelafustán. El «comunismo» vive en el relato k de los kabezas lavadas gracias a los muertos insepultos como Zannini, Verbistky, Abales Medinas, compañera Teresa, etc. que fueron puestos en el poder por el tuerto asesino y chorro para crear la «mística» que todo populachismo necesita para inventar una contra ficticia, en este caso para seguir pegándole a los militares y a los «gorilas neoliberales», o sea nuestra sufrida y vapuleada clase media, vampirizada, saqueada y asesinada por la lakra inmunda que propagaron desde las cárceles.
Así que cerrá el pico y dejá de decir giladas.
28/10/2016 a las 9:49 PM
La «oración común» del encuentro católico-luterano
Guía de la ceremonia «litúrgica» que concelebrará Francisco con una «arzobispa»
por Marcelo González
Reproducimos algunos textos de la Oración Común que será la guía de la ceremonia a realizarse en Suecia, en la ciudad de Lundt, teniendo como oficiantes a Francisco y una “arzobispa” luterana.
Los conceptos aceptados por la parte católica en esta “liturgia” celebratoria de Lutero y la Reforma protestante son increíbles. Cuestionan todo el Magisterio posterior a la Reforma, en particular el Concilio de Trento y ciertamente puntos ya definidos por la Iglesia antes de Lutero, que negó en sus tesis y en su obra posterior la existencia de un clero con poder sacerdotal, comenzando por la Sede Romana y el papa, a quienes el reformador insultó del modo más soez. La existencia de la Tradición como fuente de Revelación así como el Magisterio. La existencia de los sacramentos, salvo el bautismo y el matrimonio. La presencia real de Cristo en el Santísimo Sacramento y consecuentemente la Misa como renovación incruenta del Sacrificio de la Cruz. Y así, muchísimos errores destructores de la doctrina católica fundada en la Revelación misma.
Esta “oración común” de celebración de la Reforma es imposible de intepretar sino como un acto de apostasía expresa y sin ambigüedades. De todos modos queda por ver qué ocurrirá en la ceremonia más allá de lo que la guía común indica.
A continuación algunos textos seleccionados de esta guía. Al fin del artículo se puede ver en archivo pdf el documento conjunto con todos los detalles de la ceremonia.
Conmemoración conjunta luterano-católico romana de la Reforma en el 2017
La sección titulada Acción de gracias expresa nuestro regocijo por los dones recibidos y redescubiertos de diversas maneras a través de la renovación e iniciativas de la Reforma. Después de la oración de acción de gracias, toda la asamblea se une cantando en gratitud y alabanza por la obra de Dios. Lo mejor sería incluir cánticos que sean familiares a toda la asamblea. Algunos ejemplos incluyen, “Thanks be to You Forever” (Marty Haugen), o “To God Our Thanks We Give” (“Reamo leboga” de Botswana), o “Laudate Dominum” de Taizé. (…)
Es decir, la Reforma “redescubrió” cosas que la Iglesia Católica había olvidado.
El sermón debería reflexionar sobre la relación entre Jesucristo como centro y fundamento de la iglesia (Juan 15) y la conmemoración de los 500 años de la Reforma como parte del camino Del conflicto a la comunión, alentando a la asamblea hacia un compromiso continuo de servicio y testimonio común y a orar por la unidad. (…)
Aquí se da por supuesto que la Iglesia no es la Católica, sino que el catolicismo es “una rama” del árbol de la iglesia que contiene a todas las confesiones cristianas. Una vieja herejía reiteradamente condenada.
La conmemoración de la Reforma debería ser una celebración de Jesucristo, puesto que los reformadores consideraron su tarea principal apuntar a Cristo como “el camino, la verdad y la vida” y llamar a las personas a confiar en Él. Es Cristo quien debería ser celebrado. Martín Lutero y los otros reformadores sólo aspiraban a ser «testigos de Cristo.» (…)
Canonización informal de Lutero, hombre virtuoso que trabajó para difundir la Fe. No solo su doctrina herética, sino su vida plagada de vicios y su persecución violenta a la Iglesia Católica desmiente esta falsedad.
El énfasis sobre los frutos y la limpieza de los pámpanos en Juan 15 nos trae el reto del examen autocrítico. Esto también nos permite relacionarlo con el momento del arrepentimiento en el servicio, pero debería estar más orientado hacia el futuro: el llamado siempre renovado a la conversión a Cristo y al prójimo como la superación del egocentrismo propio de las personas (y también del egocentrismo de las iglesias) através del poder del Espíritu Santo. Aquí los imperativos pueden ayudar en la descripción de este llamado a la conversión y a la unidad. (…)
“El egocentrismo de la Iglesia” sería considerarse la única verdadera, la Esposa de Cristo, su cuerpo místico. Demos por tierra con decenas de documentos del Magisterio, y por cierto con las Escrituras.
¡Jesucristo, Señor de la iglesia, envíanos tu Espíritu Santo! Ilumina nuestros corazones y sana nuestros recuerdos. Oh Espíritu Santo, ayúdanos a reconocer con gozo los dones que la Reforma ha brindado a la Iglesia, prepáranos para arrepentirnos de las murallas divisorias que nosotros y nuestros antepasados hemos levantado, y apréstanos para el testimonio y servicio común en el mundo. Amén. (…)
Los dones de la reforma. Por ejemplo: la destrucción de la unidad de la Cristiandad, las guerras y violencias sufridas por los católicos en los países que adhirieron a Lutero o siguieron sus pasos de otro modo, como Inglaterra. La devastación de conventos, iglesias y catedrales. El saqueo de los lugares de culto y centros religiosos. La creación de una burguesía enemiga de la Iglesia enriquecida con esos bienes. El debilitamiento de Europa frente a la amenaza turca. La Masonería. La Revolución francesa y la destrucción del orden político cristiano. La creación de miles y miles de sectas fanáticas que llevaron al error, no pocas veces a la locura a millones de cristianos, con la consecuente perdición de sus almas… Solo algunos “dones”.
“Los luteranos están agradecidos de corazón por lo que Lutero y otros reformadores les hicieron accesible: el entendimiento del evangelio de Jesucristo y la fe en él; el reconocimiento del misterio del Dios Trino, que se da a sí mismo para nosotros, los seres humanos, por gracia, y que solo puede ser recibido en la confianza total de la promesa divina; en el reconocimiento de la libertad y la certidumbre que el evangelio crea; en el amor que procede de y es despertado por la fe; en la esperanza frente a la vida y frente a la muerte que la fe trae consigo; y en el contacto vital con la Santa Escritura, los catecismos y los himnos que le dan vida a la fe” (#225), en el sacerdocio de todos los creyentes bautizados y en su llamado para la misión común de la Iglesia. “Los luteranos…se dan cuenta de que aquello por lo que agradecen a Dios no es un don que pueden reclamar solo para sí mismos. Desean compartir este don con todos los otros cristianos.” (#226) (…)
El documento insulta a la Iglesia negando que las Sagradas Escrituras y su entendimiento fuera accesible a los católicos antes de Lutero. Como si los padres de la Iglesia, los teólogos medievales y el Magisterio mismo no hubiesen sido capaces de discernir el contenido de las Escrituras…
“El caminar ecuménico hace posible que luteranos y católicos puedan apreciar juntos la visión de Martín Lutero y su experiencia espiritual acerca del evangelio de la justicia de Dios, que es a la vez su misericordia.” (#244)
Nuevamente, un Lutero santo cuya “experiencia espiritual” es modelo de vida para los católicos, o para cualquiera que desee vivir cristianamente.
“Así como la conmemoración común en 2017 traerá expresiones de alegría y de gratitud, también deberá permitir un espacio para que tanto luteranos como católicos experimenten el dolor por los fracasos, las transgresiones, las culpas y los pecados relativos a las personas y acontecimientos que se conmemoran.” (#228) “En el siglo XVI, católicos y luteranos frecuentemente no solo malinterpretaron, sino que exageraron y caricaturizaron a sus oponentes para ridiculizarlos. Repetidamente violaron el octavo mandamiento, que prohíbe dar falso testimonio contra nuestro prójimo.” (#233)
Más allá de que pueda haber hechos reprobables de algunos católicos para con algunos luteranos, y viceversa inmensamente más, lo que aquí se destruye es la obra doctrinal de la Iglesia realizada por el Concilio de Trento. En él se defendió la verdadera doctrina, se esclarecieron los puntos que puso en cuestión el luteranismo y se definió dogmáticamente un cuerpo de verdades que han sido el pilar de la doctrina en los tiempos modernos. En este texto se implica esta obra monumental como “caricaturización” de la Reforma. Y un papa estará presente para aceptar, o tal vez leer él mismo el texto que haga esta referencia.
Si los tiempos no fueran abreviados…
Oración común, texto completo para descargar:
http://panoramacatolico.info/sites/panoramacatolico.info/files/dtpw-lrc-liturgy-2016_es.pdf
29/10/2016 a las 6:16 PM
Un falso papa y una falsa arzobispa van a celebrar la persona de Lutero y su «obra». Todo concuerda y muestra que la «iglesia conciliar», cuyo cacique es Bergoglio, no es la Iglesia de Cristo.