Por Carlos Tórtora.-

El gobierno de la Ciudad presentará en horas más ante la Corte Suprema un recurso de amparo con una medida cautelar solicitando se mantengan las clases presenciales. Si bien la Corte carece de plazos, dada la urgencia del tema no hay que descartar que convoque a una audiencia de conciliación del mismo modo que lo hizo para el próximo miércoles para analizar el reclamo de la administración de Horacio Rodríguez Larreta por el recorte de fondos de coparticipación que dispuso el presidente Alberto Fernández el año pasado.

Si la Corte nada decide al respecto en lo inmediato, no habría clases en la próxima quincena y saldría gananciosa la Casa Rosada.

Se da la circunstancia de que la Corte llega a esta instancia en una situación particular. El 1 del mes pasado, en su discurso ante la asamblea legislativa, el presidente mencionó dos temas que impactan en el alto tribunal. En primer lugar, la posibilidad crear un tribunal intermedio que absorba parte de las competencias de la Corte, lo que representa para ésta una amenaza de envergadura inédita. En segundo lugar, estuvo la referencia de AF a que tendrá en cuenta el informe final de la llamada “comisión Beraldi”, que propone como medida tomar la ampliación de la Corte de 5 a 9 miembros.

Especulaciones

De más está decir que si los ministros de la Corte le concedieran una medida cautelar a la Ciudad, el gobierno recibiría un fuerte golpe, casi una invitación a tomar medidas para restarle poder a aquella.

Así las cosas, el máximo tribunal está ante una disyuntiva más que difícil y es probable que opte por no enfrentarse con el kirchnerismo con la expectativa de que el creciente deterioro de la situación económica, sumado a la pandemia, termine haciendo que el gobierno atenúe su ofensiva contra la justicia.

Share