Por Guillermo Cherashny.-

En la última semana dos condenados y un ex funcionario procesado vincularon a Aníbal Fernández con el tráfico de efedrina y la experiencia penal internacional sugiere que el momento de arrepentirse del imputado es mucho más creíble si lo hace desde el primer momento en que es imputado y si se puede comprobar con la realidad lo declarado. Por eso en los Estados Unidos apenas acusan a una persona vinculada a la mafia le ofrecen un trato generalmente con inmunidad total y cambio de identidad y de domicilio, pero tiene que corroborar todo lo que declare imputando para arriba con pruebas concluyentes. En ese país casi no se toman en cuenta los arrepentimientos de condenador por delitos de narcotráfico y homicidios, por la simple razón de que, si no lo hicieron al ser imputados, procesados, durante el juicio o antes de ser condenados, es difícil que se los tome en cuenta. Es decir, si están condenados y en una cárcel o bien prófugos y se los captura, en ese momento será más difícil que el juez y el fiscal le crean, porque ya tuvieron la oportunidad y no lo hicieron; por tanto, se cree que lo hacen para salir antes de prisión o para seguir en libertad.

Las declaraciones de Ibar Pérez Corradi fueron una decepción para los jueces y para todos. Y las nuevas de Mario Segovia todavía no pueden ser analizadas con seriedad hasta que no se comprueben con la realidad. En ambos casos los condenados aportan información de los diarios y portales de noticias, que son fácilmente descubiertas de todos. Aníbal Fernández sigue en la picota por todas las pistas que se dirigen a Quilmes y a las fuerzas de seguridad que él manejó durante doce años.

La declaración de José Granero, ex jefe de la Sedronar, recién está siendo procesada por Servini de Cubría y eso es positivo porque podría complicar a Aníbal Fernández mucho más que Pérez Corradi o Segovia. De todas formas, Aníbal Fernández por mucho tiempo no podrá respirar tranquilo por la simple razón de que, para la opinión pública, es el autor intelectual del triple crimen y el capo del tráfico de drogas.

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