Por José Luis Milia.-

Es una aclaración obligada decir que no dudo de la buena voluntad que expresa el Dr. Viana en la carta de marras, pero pedir al poder británico que haga algo por los sesenta y dos veteranos de la guerra de Malvinas que aún están presos por el cuento de la “lesa humanidad” utilizando los argumentos que él expone, roza un carácter de mendicidad que me impide compartir la misma.

El reino Unido, en tanto y cuanto siga ocupando las islas es nuestro enemigo. Que hoy ya no haya ni siquiera una hipótesis de guerra para con ellos indica el éxito que han tenido en su acción desmalvinizadora. El empeño puesto por los políticos argentinos tendiente a difamar a las FF.AA. argentinas por su accionar en Malvinas, desde Alfonsín hasta hoy, tuvo más éxito con el pueblo que con ellas, que simplemente fueron desguazadas por políticos corruptos y cobardes que contaron con la colaboración de algún que otro general traidor comprado con embajadas u otras canonjías, pero que a treinta y cuatro años de la guerra han recuperado, al menos, su fuerza moral.

Es cierto que el Reino Unido subsidió a “orgas” de derechos humanos para que hicieran el trabajo sucio contra las Fuerzas Armadas, pero esto no sorprende a nadie que conozca la manera en que generalmente procede la política británica; para comprender su manera de actuar solo basta como muestra el apoyo que dio Churchill a los comunistas de Tito en desmedro de la ayuda que le había prometido a los monárquicos del general Mihajlovic pese a que estos eran antinazis declarados y tampoco olvidar que los chetniks que no pudieron huir al terminar la ocupación alemana en Yugoslavia fueron fusilados o estuvieron presos largos años.

También es menester saber que no vale la pena, si uno no es inglés, apelar al Bill of Rights. Desconocer que a éste le siguió la Toleration Act, que daba libertad religiosa a todos los ingleses excepto a los católicos nos puede dar una idea cabal de cuanta libertad se daba o no a quienes estaban excluidos de estas leyes, por ello la opinión del Dr. Viana sobre el occidente y sus valores es simplemente subjetiva, mi occidente y los valores que la civilización judeo-cristiana nos han legado, nada tienen que ver con el occidente anglicano y mercantil. No debemos olvidar que si bien muchos creen que las ideas que desarrollaron John Locke, Edmund Burke y John Stuart Mills son universales, a poco de leer historia uno ve que estas ideas las aplicó el gobierno inglés durante siglos para todo el mundo, excepto para los irlandeses, los católicos, los hindúes y un muy largo etcétera.

Es posible que, como el Dr. Viana dice en su carta, el fin último del subsidio por parte del Reino Unido a las “orgas” de derechos humanos haya sido que los héroes de Malvinas terminaran todos en prisión, no en vano, la “filósofa” Bonafini dijo en su momento que: «Los veteranos de Malvinas eran todos unos fascistas y no debería haber vuelto ninguno», pero de lo que estoy seguro es que si ese era el empeño inicial de la política británica al día de hoy ya lo han olvidado, como se olvidaron de lo que le sucedió al general Vlasov y sus cosacos al ser entregados a los comunistas terminada la segunda guerra mundial.

De cualquier manera, me parece bien la forma en que el Dr. Viana termina su carta saludando a la reina y su primer ministro; la cortesía, cuando de damas se trata, debe primar por sobre todo.

* Ver también: Carta abierta a la Primera Ministra Británica

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