Por Oscar Dufour.-

En la foto de portada, Carlos Selva junto a su hija Sabrina.

Un salto de calidad con políticas activas, que después de 12 años de gestión, el Intendente de la ciudad de Mercedes (BA) Carlos Selva, deja a sus habitantes: Educación, salud, seguridad, obra pública, Gobierno abierto y digitalizado.

La opción de mejorar nuestras posibilidades de progreso como ciudadanos de nuestra querida Argentina está directamente vinculada con la institucionalización del proceso de toma de decisiones y la mejor representación posible de las demandas ciudadanas. La calidad Institucional, la calidad de vida cotidiana, generalmente se logra con un salto de calidad de quienes tienen la responsabilidad de conducir, una Nación, una Provincia o un Municipio.

El caso del Intendente Carlos Selva es muy particular, ya que rara vez se ve algo parecido, con un trabajo espectacular, absolutamente increíble al transformar con políticas activas, una ciudad pequeña en cuanto a cantidad de habitantes como lo es Mercedes en la Provincia de Buenos Aires, pero grande como el espíritu de todos y cada uno de sus habitantes, pero que aun siendo ciudad, conserva costumbres pueblerinas. Podía haber solicitado una entrevista y realizarle un reportaje de cuatro o cinco preguntas, que seguramente hubiera respondido con mucha precisión, pero conociéndolo, preferí realizar esta breve descripción, para tan silenciosa labor. Se trata de una gestión «brillante» de 12 años intensos de logros continuos, luchando contra muchas “adversidades” y en especial, contra inundaciones que devastan cada año, toda una ciudad y en consecuencia a los mercedinos; donde muchos y especialmente los más desprotegidos que no tienen nada, o casi nada, si no es por la asistencia oficial, se quedan totalmente desamparados. La fuerte inclemencia del tiempo de Agosto pasado, lo puso nuevamente a Carlos Selva al frente de la crisis, fue el primero en requerir la “emergencia hídrica”, poniendo inmediatamente en marcha el “Protocolo” para la evacuación, asistencia alimentaria y resguardo de cientos de vecinos, y como es su “perfil”, de estar permanentemente en contacto con los vecinos, también trabajó como un rescatista más. No es poca cosa, en tiempos de tanta fatuosidad y vedetismo de algunos políticos.

La realidad política en nuestro País, nos dice a cada instante, que el espacio público de nuestra sociedad está poblado de un número creciente de ciudadanos y representantes que cambian rápidamente sus adhesiones políticas; ante ello, lo más extraordinario del Intendente Carlos Selva, además de sus lealtades profundas con sus convicciones peronistas, son el poseer amplitud de pensamiento y a posteriori, aplicarlo con un elevado nivel de calificada eficiencia en gestión, conducta que demostró ininterrupidamente todos estos años, con importantes logros, y que debido a mantener como otra arista de su personalidad, una elevada cualidad de humildad, pasan casi desapercibidos para quienes no viven en su ciudad o cercanías. Logró que Mercedes tuviera un “Gobierno abierto”, creando espacios de diálogo y participación, con el objetivo final de facilitar el acceso de los mercedinos a los espacios de transparencia, colaboración y participación que el Estado tiene disponible para ellos, proporcionando información de su gestión y acceso a la información producida por la gestión pública.

En general nuestros problemas son simples, pasa que muchos no tienen vergüenza; se le suele escuchar decir a propios y ajenos al Intendente Carlos Selva, que integra y motoriza el Frente Renovador desde sus comienzos liderado por el candidato presidencial Sergio Massa. Selva es un político que se supo ganar el afecto y respeto hasta de sus adversarios, es un hombre, que todos quisieran tener en su espacio, que construye con propuestas propositivas, y gestiona como si su municipio integrara las grandes ciudades del mundo; su salto de calidad, y sus resultados están a la vista, como también importantes reconocimientos internacionales a la hora de actuar; y como alcalde de una ciudad digitalizada que supo construir; se comporta de igual manera también cuando las cámaras y los micrófonos están apagados; un trato no muy común por estos tiempos de “petulancia” de algunos, y que lo lleva sin buscarlo, a tener seguidores de otros distritos provinciales, que se enorgullecen de referenciarse con él.

Pese a la grave adversidad que tuvo nuevamente que sortear recientemente junto con sus conciudadanos, un ascendente Carlos Selva, transmite la creencia que los hombres movidos por ideales, siguen interesándose por la política, que por sobre todo es una actitud ante la vida, aunque a veces saque a flote lo peor del ser humano. La “Casa del Estudiante” es la que adquirió la Municipalidad de Mercedes para que los jóvenes que estudian en la Universidad de La Plata pueda albergarlos. Por lo tanto, es el deseo de muchos, verlo a partir desde Diciembre próximo, ocupando una banca en la Cámara de Diputados de la Nación, desde donde y conservando su esencia, continuará trabajando sin descanso, por su ciudad, la Provincia de Buenos Aires, y ahora la defensa de los interés Nacionales, donde seguramente dejará también su “huella”.

Reitero lo que ya en alguna oportunidad expresé, en esta etapa de construcción de “puentes al siglo XXI”, necesitaremos de muchos Carlos Selva; y si hubiera más políticos que supieran también de poesía, y más poetas que entendieran de política, la Argentina sería un lugar un poco mejor para vivir en él.

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