Por Luis Américo Illuminati.-

La vicepresidenta acusó al máximo tribunal de ser «protector del macrismo».

Cristina Kirchner lanzó un duro ataque a la Corte y dijo que en la causa Vialidad -en la que está acusada de asociación ilícita- su condena “está escrita y firmada”. Invadiendo otro poder o jurisdicción del Estado cual encarnación misma de la Justicia grabó un video con el farragoso título: “De la Corte ejemplar a la Corte de los cuatro: breve crónica de la decadencia”, dividido en dos partes de más de siete minutos cada una, y lo subió a sus redes sociales. Y disparando munición gruesa contra los cuatro miembros del máximo tribunal, dijo: “Con tantos muertos en sus roperos, no les queda más remedio que hacer lo que les manden bajo pena de ejecución sumaria en titulares y noticieros”.

Esta reacción de neto corte pandillero de la vicepresidente -típico manotazo de ahogado- más allá que constituye un avasallamiento, una barrabasada constitucional, no luce muy prolija como estrategia o estilo jurídico para alguien que se jacta de ser una «abogada exitosa».

Un vídeo tan atrabiliario no es el camino o medio correcto para alguien que ostenta el segundo cargo más alto de la república -aunque, de hecho, manda más que el presidente-, máxime en vísperas de un juicio donde se juega su suerte y su deseo casi cumplido del «Vamos por Todo» se podría hacer añicos. El mismo video es una prueba clarísima que teme ir presa porque es consciente de que es culpable (mens rea).

Se acerca el día del juicio (falta menos de un mes) y está fuera de sí, zafada e incontrolable, comentan los que la conocen. Resulta más que evidente que ya no sabe más a qué triquiñuelas y chicanas recurrir para intimidar a los jueces. El pueblo quiere justicia: quiere que vaya presa.

Epílogo

-Manos atrás «doctora». Está detenida; no se resista; tiene derecho a guardar silencio. Cualquier cosa que diga puede ser usada en su contra en un tribunal. Tiene derecho a la asistencia de un abogado durante su interrogatorio. Si no tiene uno, el Estado se lo suministrará de oficio. ¿Entiende usted estos derechos?

-¿Dónde me llevan pelotudos?

-A la Comisaría y mañana a la Penitenciaría…!

-Soy la Vicepresidenta de la Nación. Tengo inmunidad…y bla bla bla bla bla bla bla…

-La tenía, ya no la tiene más. El Sr. Massa está ahora en su lugar.

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