Por Luis Alejandro Rizzi.-

Poco importa el nivel de rechazo que puede tener Cristina. Lo que debemos mirar es su piso, que no baja del 25%. En este momento político de miserabilidades y pequeñeces, ese 25% vale más; es como decir que 25 kg de Cristina pesan más que 25 kilos de JxC.

Esa es la realidad y, para oficialistas y opositores, es el «problema; no lo ven como «cuestión» y siguen perdiendo el tiempo en el supuesto beso de Larreta a una Patricia que lució frígida.

Milei está demostrando que es el candidato de los «ateos y agnósticos» políticos; sólo ofrece «negaciones»; en definitiva, se enredó en su propio nihilismo; su campo electoral reunirá la «bronca» de la Provincia de Buenos Aires y algo de CABA; le restará más a JxC que al FdT.

Pese a «eso», ese 25% de Cristina podría ser decisivo, porque se aseguraría la participación en un balotaje.

Lo que tenemos que ver es cómo quedaría integrado el congreso de la Nación, siendo probable que no haya mayorías y de una buena vez el Congreso debería ser la sede de la «gran negociación».

Nadie le presta atención al Congreso y probablemente el período 23/27 sea el de un gobierno parlamentario. Por eso el 25% de Cristina pesa mucho que el 25% de los opositores, se llamen como se llamen.

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