Por Hernán Andrés Kruse.-
En la madrugada del sábado 19 de agosto un bombardeo del Ejército de Israel contra una escuela en la ciudad de Gaza, provocó la muerte de un centenar de personas y heridas a otras 150 personas. En un comunicado difundido a través de Telegram, el gobierno gazatí expresó: “El ejército israelí está cometiendo una masacre dentro de la escuela Al Tabin en la ciudad de Gaza, con más de 100 muertos y decenas de heridos, y esto se enmarca claramente en el crimen de genocidio y limpieza étnica contra nuestro pueblo palestino”. “Hacemos plenamente responsables de esta masacre a Israel y a la Administración estadounidense”. Por su parte, el Ejército israelí reconoció el ataque: “Hoy, un avión de la Fuerza Aérea ha atacado, bajo la dirección de Inteligencia de as Fuerzas de Defensa de Israel, el Shin Bet y el Comando Sur, a terroristas que operaban en un cuartel militar situado en el complejo escolar Al Tabin, cerca de la mezquita de Darj Tafá, zona utilizada como refugio para los residentes de la ciudad de Gaza” (fuente: Infobae, 10/8/024).
Emerge en toda su magnitud el implacable accionar del premier israelí, Benjamín Netanyahu, uno de los más “célebres” genocidas del siglo XXI. Si alguien duda de lo que acabo de afirmar, lo invito a que lea la parte central del Informe Especial sobre la situación de los Derechos Humanos en los Territorios Palestinos Ocupados desde 1967 (“Anatomía de un genocidio”-Clacso), a cargo de Francesca Albanese (Consejo de Derechos Humanos-55 Período de Sesiones-26/2-5/5/2024).
Luego de reconocer la atrocidad cometida por Hamás y otros grupos armados palestinos en Israel el 7 de octubre de 2023, la autora expresa lo siguiente (transcribiré lo que considero es la parte central del trabajo)
ACTOS GENOCIDAS EN GAZA
“Los actos genocidas pueden incluir acciones u omisiones deliberadas, incluida la omisión de proteger al grupo de cualquier daño. Las pruebas presentadas en las siguientes secciones sugieren que Israel ha cometido al menos tres de los actos proscritos en la Convención”
MATANZA DE MIEMBROS DEL GRUPO
“Este acto abarca las muertes resultantes de acciones directas o derivadas de negligencia, incluidas las causadas por inanición deliberada, enfermedad u otras condiciones que pongan en peligro la supervivencia impuestas al grupo.
Desde el 7 de octubre, Israel ha matado a más de 30.000 palestinos en Gaza, lo que equivale aproximadamente al 1,4 por ciento de su población, mediante armas letales y la imposición deliberada de condiciones que ponen en peligro la vida. A finales de febrero, se daba por desaparecidos a otros 12.000 palestinos, presuntamente muertos bajo los escombros.
Durante los primeros meses de la campaña, el ejército israelí empleó más de 25.000 toneladas de explosivos (equivalentes a dos bombas nucleares) contra innumerables edificios, muchos de los cuales fueron identificados como objetivos por Inteligencia Artificial. Israel utilizó municiones no guiadas (“bombas tontas”) y bombas “revienta-búnkeres” de 2000 libras en áreas densamente pobladas y “zonas seguras”. En las primeras semanas, las fuerzas israelíes mataron a unas 250 personas al día, entre ellas 100 niños, en ataques que destruyeron barrios enteros e infraestructuras esenciales. Miles de personas murieron por bombardeos, disparos de francotiradores o en ejecuciones sumarias; miles más murieron mientras huían por rutas y en zonas declaradas “seguras” por Israel. Entre las víctimas se encontraban 125 periodistas y 340 médicos, enfermeras y otros trabajadores sanitarios (el 4% del personal sanitario de Gaza), así como estudiantes y académicos, científicos y sus familiares.
El 70% de las muertes registradas han sido sistemáticamente mujeres y niños. Israel no pudo demostrar que el 30% restante, es decir, varones adultos, fueran combatientes activos de Hamás, condición necesaria para que pudieran ser atacados legalmente. A principios de diciembre, los asesores de seguridad de Israel afirmaron haber matado a “7.000 terroristas” en una fase de la campaña en la que se había identificado a menos de 5.000 hombres adultos en total entre las víctimas, lo que implicaba que todos los hombres adultos muertos eran “terroristas”. Esto es indicativo de una intención de atacar indiscriminadamente a miembros del grupo protegido, asimilándolos por defecto a la condición de combatientes activos.
Además, la intensificación del bloqueo de Gaza por parte de Israel ha provocado muertes por inanición, incluidos 10 niños al día, al impedir el acceso a suministros vitales. La falta de higiene y el hacinamiento en los refugios podrían causar más muertes que los bombardeos, al haber creado “la tormenta perfecta para las enfermedades”. Una cuarta parte de la población de Gaza podría morir en el plazo de un año de enfermedades evitables.
CAUSAR GRAVES DAÑOS FÍSICOS O MENTALES A LOS MIEMBROS DEL GRUPO
“Este acto debe suponer “una desventaja grave y a largo plazo para la capacidad de una persona de llevar una vida normal y constructiva”. No es necesario que el daño sea permanente o irremediable, y puede producirse por diversas causas, como tortura, trato inhumano o degradante, violencia sexual, persecución, deportación u otras condiciones “diseñadas para degradar a las víctimas y privarlas de sus derechos, y para reprimirlas y causarles sufrimientos inhumanos y tortura”.
Desde el 7 de octubre, los palestinos han sufrido incesantes daños físicos y psicológicos. Muchos han soportado violencia y privaciones, incluida una hambruna severa.
Las fuerzas israelíes han detenido a miles de palestinos, en su mayoría hombres y niños, que a menudo se niegan a revelar su paradero. Muchos de ellos han sufrido graves malos tratos, incluida la tortura, que en ocasiones les ha causado la muerte.
Las armas y los métodos letales de Israel han herido a 70.000 palestinos, muchos de ellos con lesiones agonizantes que, en algunos casos, han provocado discapacidades a largo plazo o la muerte.
Al provocar una escasez crítica de suministros médicos, incluidos antibióticos y desinfectantes, las acciones de Israel han dado lugar a procedimientos sanitarios peligrosos, como amputaciones sin anestesia, incluso en niños. Esto también ha impedido la administración de tratamientos que salvan vidas a personas con afecciones médicas, incluidas enfermedades crónicas.
Los supervivientes llevarán un trauma imborrable, al haber presenciado tanta muerte y experimentado destrucción, falta de hogar, pérdida emocional y material, humillación sin fin y miedo. Tales experiencias incluyen huir en medio del caos de la guerra sin telecomunicaciones ni electricidad; presenciar la destrucción sistemática de barrios enteros, hogares, universidades, monumentos religiosos y culturales; excavar entre los escombros, a menudo con las manos desnudas, en busca de sus seres queridos; ver cuerpos profanados; ser acorralados, desnudados, con los ojos vendados y sometidos a tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes; y, por último, morir de hambre, tanto adultos como niños.
El salvajismo del último asalto de Israel queda mejor ilustrado por el tormento infligido a niños de todas las edades, asesinados o rescatados de entre los escombros, mutilados, huérfanos, muchos sin familia superviviente. Teniendo en cuenta la importancia de los niños para el futuro desarrollo de una sociedad, infligirles graves daños corporales o mentales puede “interpretarse razonablemente como un medio para destruir al grupo en su totalidad o en parte”.
INFLIGIR DELIBERADAMENTE AL GRUPO CONDICIONES DE VIDA CALCULADAS PARA PROVOCAR SU DESDTRUCCIÓN FÍSICA TOTAL O PARCIALA
Este acto implica una conducta que no mata directamente a los miembros del grupo, pero que puede conducir, por diversos medios, a su destrucción física. Estos pueden incluir hacer pasar hambre, deshidratar, desplazar por la fuerza al grupo protegido, destruir objetos indispensables para su supervivencia, reducir los servicios médicos esenciales por debajo del mínimo exigible, privar de vivienda, ropa, educación, empleo e higiene.
Para mediados de diciembre, las bombas y proyectiles israelíes habían destruido o dañado gravemente la mayor parte de las infraestructuras vitales, incluido el 77% de las instalaciones sanitarias, el 68% de las infraestructuras de telecomunicaciones, un gran número de servicios municipales, centros comerciales e industriales, casi la mitad de todas las carreteras, más del 60% de las 439.000 viviendas de Gaza, el 68% de los edificios residenciales, todas las universidades, el 60% de otras instalaciones educativas, incluidas 13 bibliotecas. Israel también ha destruido al menos 195 lugares patrimoniales, 208 mezquitas, 3 iglesias y los Archivos Centrales de Gaza (150 años de historia). A finales de enero, más de un millón de civiles habían sido desplazados a la fuerza hacia el sur, con sus ciudades devastadas.
Dieciséis años de bloqueo ya habían transformado Gaza en un enclave aislado, densamente poblado, agotado y casi “inhabitable”, cuando, el 9 de octubre de 2023, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, anunció un “asedio total (…) sin electricidad, sin alimentos, sin agua, sin combustible”. El ministro israelí de Asuntos Exteriores, Israel Katz (entonces ministro de Energía) fue más allá: “¿Ayuda humanitaria a Gaza? No se encenderá ningún interruptor eléctrico, no se abrirá ninguna boca de riego”. “Negar deliberadamente suministros esenciales a una población ya asediada estaba destinado a causar muertes más silenciosas que las causadas por las bombas”.
El asedio total y los casi constantes bombardeos de alfombra, junto con las draconianas órdenes de evacuación y las siempre cambiantes “zonas seguras”, han creado una catástrofe humanitaria sin parangón. Más de 1,7 millones de palestinos fueron desplazados y obligados a vivir hacinados en refugios de la UNRWA y hacinados en el sur de Gaza, objetivo sistemático del ejército israelí, y hospitales, ataques aéreos y terrestres los convirtieron gradualmente en zonas de muerte. Los soldados israelíes han ocupado los hospitales, rodeándolos con tanques y francotiradores (drones). El 12 de febrero, sólo 11 de los 36 hospitales y el 17% de los centros de atención primaria funcionaban, aunque sólo parcialmente. Los soldados israelíes han detenido, maltratado y torturado a personal médico, pacientes y desplazados, y los han obligado -incluso a bebés prematuros- a salir de los hospitales, causando en algunos casos la muerte de bebés. Los médicos que se han quedado han trabajado día y noche, tomando “decisiones imposibles” sobre los pacientes a tratar en función de las posibilidades de supervivencia.La invasión terrestre y los bombardeos aéreos han destruido tierras agrícolas, granjas, cultivos, animales y recursos pesqueros, socavando gravemente los medios de subsistencia de la población, el medio ambiente y el sistema agrícola.
Del 8 al 21 de octubre, Israel impidió la entrada de cualquier tipo de ayuda en Gaza, permitiendo posteriormente cantidades lamentablemente inadecuadas, limitadas en gran medida al sur. No se entregaron suministros de combustible hasta el 18 de noviembre. En enero, los ataques dirigidos por Israel contra la UNRWA, la principal agencia que proporciona una línea vital de ayuda en Gaza, provocaron que varios Estados suspendieran los pagos a la UNRWA, agravando aún más la situación humanitaria.
El 7 de diciembre, más del 90% de los residentes de Gaza sufrían una grave inseguridad alimentaria. En febrero de 2024, los palestinos atrapados en el norte de Gaza recurrieron a comer pasto y a la caza de animales y hierba para su sustento, con un aumento de las muertes por inanición. La ONU registró numerosos ataques contra palestinos que buscaban ayuda entre mediados de enero y fines de febrero.
El suministro de agua también se vio gravemente afectado. La escasez de combustible dificultó el saneamiento, empujando a la población a utilizar agua contaminada por aguas residuales, residuos sólidos y agua de mar.
El impacto de estas condiciones sobre los niños es bien conocido: en Gaza el riesgo de inanición, con miles de personas sufriendo emaciación, es ya una horrible realidad tangible.
Estas condiciones creadas por el hombre han puesto en peligro a unas 50.000 mujeres palestinas embarazadas y a 20.000 recién nacidos, y han aumentado los abortos espontáneos hasta en un 300% por ciento.
Gaza ha sido completamente saqueada. El implacable ataque de Israel a todos los medios de supervivencia básicos ha puesto en peligro la capacidad de los palestinos de Gaza para vivir en esa tierra. Este colapso provocado de las infraestructuras vitales se corresponde con las intenciones declaradas de hacer de Gaza un lugar “permanentemente imposible para vivir” donde “no pueda existir ningún ser humano”.
INTENCIÓN GENOCIDA
La definición de genocidio requiere la comisión de cualquiera de los actos enumerados con una intención específica. Debe establecerse que el perpetrador, al cometer uno o más de los actos prohibidos, busca lograr la destrucción total o parcial de un grupo nacional, étnico, racial o religioso, como tal. Esta intención debe establecerse mediante pruebas directas o indirectas.
Como el genocidio es un crimen organizado, cuya comisión implica invariablemente una dimensión colectiva, las pruebas de un plan estatal, incluso a través de declaraciones y manifestaciones de funcionarios del Estado, suelen ser decisivas para establecer la intención directa.
La prueba de la intención indirecta puede inferirse de hechos o circunstancias, incluidos el contexto general de los actos u omisiones, la escala de las atrocidades, la selección sistemática de las víctimas en función de su pertenencia a un grupo determinado, la comisión de otros “actos culpables” dirigidos contra el grupo, o la repetición de actos destructivos y discriminatorios. La CPI exige que tales hechos o circunstancias se produzcan “en el contexto de una pauta manifiesta de conducta similar dirigida contra el grupo o… una conducta que pudiera por sí misma causar tal destrucción”. Los tribunales internacionales también han establecido que la intención indirecta puede consistir en una pauta manifiesta de conducta similar a lo largo del tiempo. La sistematicidad con la que se cometen los actos genocidas implica cierto grado de “plan o política preconcebidos”.
La naturaleza y la escala de las atrocidades, si son demostrablemente capaces de lograr el resultado genocida, son una prueba sólida de la intención. Las palabras de las autoridades estatales, incluido el lenguaje deshumanizador, combinadas con los actos, se consideran una base circunstancial de la que se puede inferir la intención. La deshumanización puede entenderse como fundacional del proceso de genocidio. Las pruebas del contexto pueden ayudar a determinar la intención, y deben considerarse junto con la conducta real: la intención debe ser evidente sobre todo a partir de las palabras y los hechos, y de “pautas de acción deliberada”, de manera que no pueda inferirse razonablemente ninguna otra inferencia.
En el último asalto a Gaza, las pruebas directas de intención genocida están presentes de forma exclusiva. La vitriólica retórica genocida ha pintado a toda la población como el enemigo que debe ser eliminado y desplazado por la fuerza. Funcionarios israelíes de alto rango con autoridad de mando han emitido declaraciones públicas desgarradoras que evidencian la intención genocida, como las siguientes: (a) El presidente Isaac Herzog declaró que “toda una nación ahí fuera… es responsable” del ataque del 7 de octubre, y que Israel “les rompería el espinazo”; (b) El primer ministro Benjamin Netanyahu se refirió a los palestinos como “Amalek” y “monstruos”. La referencia a Amalec se refiere a un pasaje bíblico en el que Dios ordena a Saúl “Ahora ve y hiere a Amalec, y destruye por completo todo lo que tienen, y no los perdones; mata al hombre y a la mujer, al niño y al que mama, al buey y a la oveja, al camello y al asno”. (c) El Ministro de Defensa Yoav Gallant se refirió a los palestinos como “animales humanos” y anunció una “ofensiva total” contra Gaza, habiendo “liberado todas las restricciones”, y que “Gaza nunca volverá a ser lo que era”; (d) El portavoz de las IDF, Daniel Hagari, declaró que había que centrarse en causar el “máximo daño”, demostrando una estrategia de violencia desproporcionada e indiscriminada; (e) El Ministro de Agricultura, Avi Dichter, se refirió a la acción de Israel como “la Nakba de Gaza”; (f); el Ministro de Patrimonio, Amihai Eliyahu, pidió atacar Gaza con “bombas nucleares”. (g) Revital Gotliv, parlamentaria del Knesset por el partido Likud, escribió en sus redes sociales: “¡¡¡Derriben edificios!!! ¡Bombardead sin distinción!… Aplastad Gaza. ¡Sin piedad! Esta vez, ¡no hay lugar para la piedad!”.
Tales llamamientos a la violencia aniquiladora dirigidos a las tropas en servicio constituyen una prueba contundente de incitación directa y pública a cometer genocidio. Décadas de discurso que deshumaniza a los palestinos han preparado el terreno para tales incitaciones.
Desde el 7 de octubre, la proliferación de declaraciones incitando al genocidio también ha implicado a varios sectores de la sociedad israelí, líderes religiosos, periodistas, artistas, y diversos profesionales (incluidos médicos y comentaristas políticos).
Hay pruebas contundentes de que las tropas sobre el terreno han interiorizado estas declaraciones y han actuado en consecuencia. Los soldados israelíes se han referido a los palestinos como “terroristas”, “cucarachas”, “ratas”, incluso en canales de medios sociales gestionados por el ejército israelí, y han repetido términos articulados por líderes políticos, coreando que “no hay ‘civiles no implicados”, al tiempo que pedían la construcción de asentamientos en Gaza, “ocup[ando] Gaza. … borrar la semilla de Amalek”, jactarse de haber matado a “familias, madres y niños“, humillar a los palestinos detenidos, detonar decenas de casas, destruir barrios residenciales enteros y profanando cementerios y lugares de culto.
El Primer Ministro y el Presidente de Israel han declarado que Israel luchaba en nombre de “todos los Estados civilizados y… los pueblos”, contra “una barbarie que no tiene cabida en el mundo moderno”, que “desarraigarán el mal y será bueno para toda la región y el mundo”. Esta retórica racista se hace eco de la de otras potencias coloniales e intenta interpretar la violencia genocida de Israel como legítima a la luz del supuesto carácter “bárbaro” y “premoderno” de los palestinos”.
16/08/2024 a las 3:32 AM
SOLO UN IDIOTA O UN ANTISEMITA, PUEDE ESCRIBIR O TRANSCRIBIR DECLARACIONES AMAÑADAS DE MENTIRAS
Y DIFAMACION.
1) ISRAEL SE RETIRO DE LA FRANJA DE GAZA ENTRE AGOSTO Y SEPTIEMBRE DEL 2005. ADEMAS DE 4 ASENTAMIENTOS EN EL NORTE DE CISJORDANIA. LES DEJO LA ADMINISTRACION DE LA FRANJA A HAMAS.
2) A PESAR DE ELLO, DIARIAMENTE RECIBIO ATAQUES DE MISILES NO GUIADOS, SOBRE LA POBLACION CIVIL, A RAZON DE 30 O 40 POR DIA. ESO NO ES GENOCIDIO Y LO DEL 7 DE OCTUBRE COMO LO LLAMAS, «EXCURSION MILITAR» ?
3) NO OBSTANTE ISRAEL SUMINISTRABA AGUA Y ENERGIA ELECTRICA A LA MISMA, POR CUESTIONES HUMANITARIAS.
4) LOS PALESTINOS ORAN POR LA DESAPARICION DE ISRAEL, ENTONCES ES UNA GUERRA SIN FIN Y A MUERTE.
5) ESTA CLARO A ESTA ALTURA QUE, LA CONVIVENCIA ES IMPOSIBLE. ES UNO U OTRO.
6) EN NINGUN MOMENTO DIJISTE QUE, LOS DE HAMAS SE ASENTARON MILITARMENTE EN CENTROS CIVILES Y DESDE AHI ATACAN PARA HUIR RAPIDAMENTE Y DEJAR PAGANDO A LOS CIVILES Y A ISRAEL COMO ATACANDO SIN MOTIVO.
7) INCLUSO DESPUES DE SUFRIR LA MUERTE DE 1.200 CIUDADANOS (TAMBIEN BEBES DESCUARTIZADOS), HUBO HERIDO EN GAZA QUE FUERON TRATADOS EN HOSPITALES ISRAELIES.
8) TAMPOCO HABLASTE QUE AUN CONSERVAN 80 O 100 REHENES Y NO SE TIENE IDEA DE SU ESTADO EMOCIONAL NI FISICO.
9) NO HABLASTE QUE LA DIFICULTAD DE DISTRIBUIR ALIMENTOS ES POR CULPA DE HAMAS, QUE SECUESTRA LOS MISMOS PARA SUS GUERRILLEROS Y QUE TAMBIEN HAY BANDAS DELINCUENCIALES QUE SE APODERAN DE LOS MISMOS PARA COMERCIALIZARLOS.
10) NUNCA HABLASTE DE LOS 500 KM DE TUNELES CONSTRUIDOS PARA LA GUERRA, ELLOS QUIEREN LA GUERRA Y AHORA LA TIENEN AL POR MAYOR. DE QUE
SE QUEJAN.
11) A PESAR DE LA MATANZA QUE SUFRE LA POBLACION CIVIL POR LA TACTICA DE HAMAS, Y DE LA DESTRUCCION DE LAS CIUDADES, SIGUEN TIRANDO ALRREDEDOR DE 20 O 30 MISILES POR DIA.
12) NO HABLASTE DEL APOYO DE IRAN, QUE ABASTECE DE ARMAS A HAMAS, NO TENES NI IDEA DE LA DIMENSION DEL CONFLICTO Y LA RAIZ INTERNACIONAL QUE TIENE.
13) PORQUE, NINGUN PAIS ARABE LOS QUIERE RECIBIR A LOS QUE QUIEREN EMIGRAR ? SOLO SACAN DECLARACIONES DE COMPROMISO.
14) SI HAMAS SE RINDIERA, LA GUERRA SE TERMINA EN ESE MISMO MOMENTO, PERO ELLOS EN SU LOCURA ASESINA, LES IMPORTA POCO DE SU MISMA GENTE. POR ALGO LOS USAN DE PANTALLA.
15) CUANDO EMPEZO LA GUERRA, HUBO MILES DE PALESTINOS QUE TRABAJABAN EN ISRAEL Y TUVIERON
QUE ABANDONAR EL PAIS, POR ESE MOTIVO.
16) EN SUMA, CONTESTA LAS PREGUNTAS QUE TE HICIMOS Y DEJA EL COPY PASTE, POR MAS ANTISEMITA O DE IZQUIERDA QUE SEAS, PORQUE DA VERGUENZA TU FALTA DE HONESTIDAD INTELECTUAL.
16/08/2024 a las 8:54 AM
A defender lo indefendible muchachos, ya que ahí está el corazoncito del embajador de la luz… mala.
16/08/2024 a las 7:49 AM
Nunca es triste la verdad; lo que no tiene es remedio
Joan Manuel Serrat
16/08/2024 a las 7:50 AM
Histórico derrumbe del consumo masivo
Leandro Renou
Página/12
16/8/024
Un dato demoledor de la economía apareció en la escena justo cuando el Gobierno de Javier Milei empezaba a vender una recuperación de la actividad: el consumo masivo marcó en julio la caída más importante de la historia, ya superando comparaciones con los tres hechos históricos de menor demanda de los hogares: los comercios de todo tipo y color hoy venden menos que en la crisis del 2001, la pandemia y lo peor de la crisis del Gobierno de Mauricio Macri, y no hay hitos recesivos parecidos. Esto ocurre aún con un intento desesperado de apalancamiento de compras con descuentos con tarjetas, billeteras virtuales y promos de los super, que combinadas otorgan rebajas superiores al 30 por ciento.
El diagnóstico que hacen en los comercios es que, además de la caída del salario y las jubilaciones, no se siente la desinflación en el bolsillo de los consumidores porque los aumentos sin control en precios regulados (tarifas, naftas, prepagas, colegios, peajes, etc) arrasaron con el poder adquisitivo de los sectores medio, medio bajo y bajo, que sostienen casi el 80 por ciento de la demanda de productos de la canasta básica. En paralelo, la devaluación de diciembre que produjeron el tándem Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, dejó a los precios de los alimentos, bebidas y limpieza en niveles muy elevados, cuando no eran ya en ese entonces valores que estuvieran atrasados.
Según cifras de la consultora Scentia a las que accedió Página I12, en julio el consumo en hipermercados, comercios barriales y pymes se desplomó 16,1 por ciento interanual, 4 puntos más de caída que en junio (12,4). Y la crisis parece estar lejos del «lo peor ya pasó» que esgrimió el presidente, horas atrás, en la reunión con empresarios del Consejo de las Américas. Este diario accedió a un adelanto de números del sector, que muestran que en la primera semana de agosto el consumo en comercios cayó más de 21 puntos. De esa malaria se salvó sólo una de las cadenas del top 3, que salió con promociones muy agresivas y atenuó la caída. Aún así, sumada la menor caída de esa cadena, el consumo cayó al menos 20 puntos.
«Es una catástrofe nunca vista», resumió un empresario importante del interior del país ante la consulta de este diario. Es la primera vez, además, que según la medición de Scentia -que reporta tickets en todo el país en el 100 por ciento de los híper y 17500 autoservicios- hay siete meses de caída consecutiva del consumo masivo en niveles tan elevados, cuando además se venía de 7 meses de crecimiento consecutivo: en enero de este año, el consumo cayó 3,5; 4 en febrero; 7,4 en marzo; 13,7 en abril, 9,9 en mayo; 12,4 en junio y 16,1 en julio. Acmula una baja del 9,4 en el año.
Por citar sólo un ejemplo comparativo, en el peor mes de la era Macri, julio del 2016, la caída internual del consumo fue de 4,5 por ciento y era entonces una cifra que encendió alarmas. No casualmente, la razón de aquel desplome fue la misma que hoy: la liberación total de los precios regulados y las tarifas, que aplastaron a los sectores medios. Con Milei se suma la idea de generar una depresión económica brutal para intentar llegar a la inflación cero. Vale aclarar que, además, lo que queda de aquí a fin de año será peor porque ya se compara con datos buenos de consumo del año pasado.
Nadie compra nada
El 16 por ciento de caída del consumo de julio se compone casi en partes iguales por derrumbes en el cadenas de supermercados y autoservicios independientes, que bajaron en sus ventas un 16,6 y un 15,5, respectivamente. Sin embargo, el interior está sufriendo mucho más las bajas ventas.
En las provincias, los hipermercados cayeron 17,1 por ciento, por sobre la media general. Mientras que en autoservicios del interior la caída fue de 24,6 por ciento. Según explican los comercios, esto se debe a la crisis que generó Milei pero, también, al atraso cambiario, que hizo caer toda la demanda de países limítrofes en locales de frontera. Aunque parezca mentira, esas ventas pesaban mucho sobre los totales. «Ya no vienen a comprar acá», apuntan en el interior.
Otro dato de alto impacto del consumo en julio es que no hubo crecimiento de ventas en ningún rubro en ningún canal: el 16,1 de caída general se compone de una baja del 9,6 por ciento en Alimentación, del 12,6 en Desayuno y Merienda; y del 20,9 en Higiene y Cosmética. Las mayores caídas fueron, sin embargo, en dos rubros que antaño impulsaban el consumo: Bebidas con Alcohol cayó 25,2, sin Alcohol 23,7; mientras que Impulsivos (las golosinas, pilas y bebidas que ponen cerca de las cajas de pago), se derrumbó 25,5 por ciento, mismo porcentaje que había crecido en toda la última parte del año 2023.
Las promociones no mueven la aguja
En este escenario, y con stocks acumulados al borde de vencer (las fechas de la mayoría de los productos pasaron de 6 a 2 meses de quedar en desuso), las empresas de alimentos empezaron con promociones y los supermercados generaron crédito junto a bancos y billeteras virtuales.
Aún así, el consumo no reacciona y se ve en las cifras: en los grandes hipermercados, que con MODO y Mercado Pago están ofreciendo 20 por ciento de descuento sin tope, montado a las promos que ya hay en los propios locales, las ventas de Alimentos caen casi un punto más que el índice general. Igual que los Impulsivos, que caen casi 27 puntos.
En los autoservicios, en tanto, no hay acceso a promociones y reina una caída en las ventas de 15 por ciento, mezclada con escenas de miseria extrema. Este diario publicó en su edición del domingo que en el Conurbano, la Federación de Almaceneros empezó a reportar tickets de 6000 o 7000 pesos pagados con tarjeta de crédito. El asunto es que los datos de agosto no muestran nada mejor en el horizonte: el 21 por ciento de caída en el gasto de la primera semana del mes -que además coincide con una deflación de -0,1 por ciento en Alimentos medida por la consultora LCG- no sólo impacta en bienes de la canasta, sino que las ventas de textiles, electro y bazar en los híper llegan a caer hasta 50 por ciento, aún con 12 cuotas sin interés. «El temor a consumir es notable, no hay estímulo ni certeza», se lamentan los supermercadistas.
16/08/2024 a las 10:58 AM
Hernán Andrés Kruse titula su artículo como «El implacable accionar de un genocida»… Es cierto. Todo se inició con sucesivas guerras disfrazadas de «antiterrorismo». Concretamente se trata de ineficiente «panarabismo» contra variado «panyanquisionismo». Pero el accionar no es de un genocida: los sionistas y judíos engañados son numerosos genocidas.
Mariano Moreno, nuestro prohombre de Mayo, podría recordarles a los judíos de la diáspora: «No tienen los pueblos mayor enemigo de su libertad, que las preocupaciones adquiridas en la esclavitud».
16/08/2024 a las 3:55 PM
«PUCHERAZO»
Aleardo Laría Rajmeri
El Cohete a la Luna
11/8/024
El puchero es un suculento plato tradicional de la cocina argentina que proviene de Andalucía (España). La receta andaluza incluye garbanzos y verduras, como papas y zanahorias, a lo que se suman trozos de carne de vaca, pollo, huesos de cerdo y ternera y se pueden añadir chorizos y morcillas. La denominación del plato proviene del recipiente, originariamente de barro, donde se cocina el guiso. De allí deriva también el término “pucherazo” que en España ha perdurado como sinónimo de fraude electoral. Durante el período de la Restauración borbónica se manipulaban las elecciones mediante la incorporación de papeletas de votación que se guardaban en recipientes similares a los utilizados para cocer el puchero. Todas las evidencias apuntan a que el pasado domingo 28 de julio hemos asistido a un “pucherazo” en Venezuela.
El Consejo Nacional Electoral (CNE), controlado por el oficialismo, proclamó vencedor al Presidente Nicolás Maduro el mismo domingo mediante un escueto boletín que mostraba tres porcentajes que otorgaban a Maduro un 51,20% de los votos, 44,20% a su rival Edmundo González y un 4,60% a “los otros”. Se informó que estos porcentajes correspondían a un escrutinio del 80% y que era una tendencia “irreversible”. Pero desde entonces pasaron varios días sin que hubiese actualización de datos ni se aportó documentación alguna que permitiera verificar ese resultado. Durante ese período el CNE no publicó las actas de escrutinio que son generadas por las máquinas de voto electrónico al cierre de cada mesa. El votante utiliza la máquina para votar y recibe una constancia en papel que deposita en una urna para cualquier posterior verificación. Luego, al final de la jornada, primero la máquina imprime un acta con el resultado —ante testigos electorales— y después envía los datos por teléfono o satélite al centro de cómputos. Copias del acta se imprimen en el mismo centro de votación y se entregan a presentes y a los partidos. Cada acta incluye los resultados de la mesa, una versión en código QR de estos, su identificador, la fecha y la hora de cierre, una cadena hash de seguridad, y el nombre y la firma de los miembros de la mesa, los testigos y hasta del operador del dispositivo, de modo que resulta casi imposible falsificarlas. El CNE estaba obligado a publicar los resultados desagregados, por centro y mesa, salidos de las actas, pero en mitad de la noche del domingo su web dejó de funcionar y las autoridades alegaron que se había producido un hackeo desde Macedonia. Sin embargo, Jennie Lincoln, jefa de la misión de observación del Centro Carter, que había sido invitado por el Consejo Nacional Electoral como observadora, afirmó que “no hay evidencia” de que el sistema electoral de Venezuela hubiese sido blanco de un ataque informático. Añadió que la transmisión de la data de votación es por línea telefónica y teléfono satelital y no por computadora, por lo cual no se habría perdido dato alguno. El Centro Carter declaró en un pronunciamiento público que la elección “no se adecuó a parámetros y estándares internacionales de integridad electoral” y no podía “ser considerada como democrática”. A lo que cabe añadir que a posteriori tampoco se realizó la prevista Auditoría de Verificación Ciudadana, que consiste en el cotejo aleatorio de algunas de las actas de escrutinio con el recuento de las urnas que contienen los papeles depositados por los votantes.
Las actas de la oposición
La oposición reclama una victoria del 67% al 30%, apoyándose en más 24.000 actas que ha presentado en una página web y que es accesible a todo el mundo. Por consiguiente, al contrario que el CNE, la web que ha divulgado la oposición con las actas permite obtener y someter a comprobación los resultados en cada parroquia, municipio y Estado venezolano. El contraste es evidente: el gobierno de Maduro no ha aportado datos para sustentar su declaración de victoria, mientras que la oposición venezolana ha dispuesto un mega operativo para recoger y presentar miles de actas. Como señala Kiko Llaneras, el experto en estadísticas del diario El País de España, “la oposición ofrece más información, es más transparente, se expone a evaluación y escrutinio, y de esa manera, eleva la credibilidad de sus resultados”.
Existen otros indicios que hacen presumir la victoria electoral de la oposición. La más obvia es el notorio ocultamiento de los resultados por parte de quien está obligado a divulgarlos con transparencia e inmediatez. En cualquier elección, los resultados se van conociendo en su progresión a medida que se van recibiendo en el centro de cómputos. Aquí nada de esto ha sucedido y, con un pretexto tras otro, lo cierto es que las actas reclamadas por la oposición no han sido entregadas. Otro dato que ha llamado la atención es que los porcentajes difundidos por la CNE no resultan creíbles porque son exactos hasta el sexto decimal. Según la impresión de los expertos, el CNE partió del total de votos (10.058.774) y luego tomaron unos porcentajes redondeados y elegidos previamente, asignándole el 51,20% de los votos a Maduro, el 44,20% a Edmundo González y el 4,60% a “otros” lo que suma exactamente el 100%. Frente a los reclamos de la oposición y de numerosos países que exigen que se lleve a cabo un conteo de las actas, el gobierno de Maduro ha efectuado una presentación ante la Sala electoral del Tribunal Supremo de Justicia que carece de base legal, con el evidente propósito de judicializar un asunto político y técnico que debe solventarse primero ante el Consejo Nacional Electoral. El candidato opositor Edmundo González Urrutia ha confirmado que no aceptará esa instancia. “Si llegare a acudir ante la Sala Electoral, lo haría en situación de absoluta indefensión”, argumentó González Urrutia en una carta publicada en sus redes sociales. El político opositor destacó que el trámite de la Sala Electoral “no se corresponde con ningún procedimiento legal contemplado en la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia u otra ley sobre la Jurisdicción Electoral”.
Las evidencias de que se ha consumado un fraude electoral son tan fuertes que el gobierno de centro-izquierda de Chile ha tomado posiciones claras y contundentes. Gabriel Boric, uno de los primeros mandatarios de América Latina en pedir que el CNE transparente los resultados, ha indicado que él, personalmente, y esta es la postura del gobierno de Chile, “no tiene dudas de que el régimen de Maduro ha intentado cometer un fraude. Si no, hubiesen mostrado las famosas actas. ¿Por qué no lo han hecho?” El mandatario chileno también ha denunciado violaciones a los derechos humanos en medio de las represiones a los manifestantes y persecución penal en contra de los líderes de la oposición venezolana. El canciller de Venezuela ha respondido a las palabras del Presidente de Chile, con un exabrupto infantil: “El Sr. Gabriel Boric se coloca a la derecha de Milei y del Departamento de Estado de los Estados Unidos, se le cayó definitivamente la máscara, queda al desnudo su gobierno pinochetista y golpista”, escribió el diplomático en Twitter.
Falsas coartadas
Cuando se trata de determinar si un proceso electoral se ha realizado correctamente, el único tema a dirimir es si los resultados reflejan la realidad o si han sido manipulados. No deberían entrar a jugar otro tipo de consideraciones. Ahora bien, no se puede ignorar que la resistencia del gobierno de Maduro a permitir una auditoría imparcial de los resultados coloca a Venezuela al borde de una guerra civil. Por consiguiente, es comprensible que países que están intentando actuar de mediadores, como es el caso de Brasil, Colombia y México, actúen con suma prudencia y eviten pronunciamientos condenatorios que dificulten esa labor de mediación. Pero en el caso de quienes simplemente se limitan a expresar una opinión personal en un medio de comunicación, esa prudencia no tiene justificación. De allí que algunas notas periodísticas que se han vertido estos días acerca de cuestiones vinculadas con la geoestrategia o con la calidad de las democracias occidentales pueden ser interesantes para ser abordadas en seminarios específicos, pero carecen de relevancia alguna en el análisis de las elecciones de Venezuela y sólo pueden ser tomadas como coartadas irrelevantes. No es posible tener dos varas de medir para juzgar de modo diferente a los amigos de los supuestos enemigos.
Como señala Adam Przeworski en Las crisis de la democracia (Ed. Siglo XXI), el sistema democrático funciona correctamente cuando los conflictos que surgen en una sociedad se procesan de manera pacífica dentro del marco institucional, fundamentalmente mediante el mecanismo de las elecciones. Añade que la polarización política, que tiene raíces profundas en las divisiones económicas, sociales y culturales, vuelve las derrotas electorales difíciles de aceptar e induce a los perdedores a falsear los resultados. Por lo tanto, lo mínimo que le podemos exigir hoy a la democracia es que los procesos electorales sean transparentes y los ciudadanos cuenten con una razonable posibilidad de destituir a los gobiernos que no sean de su agrado evitando el derramamiento de sangre.
17/08/2024 a las 1:26 AM
¿Y qué tienen que ver los comentarios transcriptos de «Página 12» y de «El cohete a la luna», insertados por Hernán Andrés Kruse, con «El implacable accionar de un genocida (1)»?.
Lamentable malversación del espacio ofrecido por I.P. para comentarios.
17/08/2024 a las 3:06 AM
ARO, ARO, AROOO : «YA VIENE SALIENDO EL SOL, REDONDO COMO
UNA LATA, ASÍ ME TIENE TU AMOR, FLACO COMO ESCOPETA».
17/08/2024 a las 9:02 AM
La denuncia a una red de trata infantil para explotación sexual que señala a capitalistas como Roemmers y encubrimiento de Lijo
Camila García
Prensa Obrera
16/8/024
Durante la jornada de “Trata Infantil: ¿Qué hay detrás de la desaparición de niños?” que se realizó en el Senado, una declaración llamó la atención de todo el país. Roberto Mazzoni denunció públicamente que, años atrás, fue víctima de “la red de trata más grande de Argentina” y aseguró que Alejandro Roemmers, dueño del laboratorio Roemmers, y Matías Barreiro, directivo del club River Plate y dueño del sanatorio Colegiales, estarían implicados.
“Acá no hay ninguna hipótesis, tengo demostrado cómo capta, qué preferencias tiene, blanquitos, chiquitos y lampiños; cómo paga comisiones para las presentaciones de menores de edad, otras para mayores de edad. Lo mismo otro chico, Matías Barrero”, detalló. Y agregó: Rommers lleva “a distintos chicos de diferentes edades a su casa y los expone sin remera para otros empresarios, también mencionados en el expediente. Son empresarios de la misma talla, son los que manejan el país”.
Mazzoni también denunció que la causa fue cajoneada por el juez Ariel Lijo, íntimo amigo de Milei, juez sobre el que además recaen las causas por corrupción donde están implicados los funcionarios del gobierno y candidato del presidente para integrar la Corte Suprema. “Soy víctima de una red de trata, la causa está en el juzgado del doctor Ariel Lijo, el fiscal es Ramiro González. Me humilló, me trató mal y me hizo pasar los peores momentos; el mismo infierno que yo venía a denunciar”, sostuvo. Según Mazzoni, incluso, la secretaria del juzgado, Paola Cohen, le dijo que Roemmers se había presentado en la causa con un DNI falso”.
También denunció el cerco mediático que dichos empresarios armaron en los medios de comunicación para que la denuncia no tuviera mayor alcance. “Me llaman de América, Rolando Graña, y pasamos meses reunidos con Rolando Graña y mis abogados. Filman en mi casa, a mí y a otra de las víctimas, tenía que salir en un programa que se llama GPS. Y le venden las notas al señor Roemmers”, exclamó.
Este caso es una muestra más de que las redes de trata en Argentina conforman un enorme negocio para los capitalistas, y que proliferan al amparo del Estado que es quien les garantiza la impunidad. Este entramado, que involucra a varios segmentos de la población, representa una fuente de ganancias para una minoría social.
La explotación sexual de menores es un negocio rentable. En él siempre están involucrados bancos, empresarios, y gobiernos. En Argentina, las leyes de blanqueo que han impulsado los gobiernos capitalistas de las últimas décadas (desde Alfonsín, pasando por Cristina Kirchner y Macri, hasta Alberto Fernández) han servido para legalizar el dinero proveniente de estas actividades barbáricas.
El gobierno de Milei ahora profundiza este tipo de medidas en beneficio del blanqueo de dinero provenientes de negocios espurios con la Ley Bases, y promueve un reforzamiento represivo que le otorga un mayor poder a la policía, que es la institución que garantiza la operatoria de estas redes. A esto se suma la complicidad del engranaje político, como es el caso de los jueces o los funcionarios implicados, lo que le otorga vía libre al negocio.
En paralelo, mientras las redes de trata de menores funcionan a plena luz del día, el Ejecutivo presenta proyectos para modificar el código penal y la jurisprudencia vigente para descargar todo el peso del punitivismo, no contra los peces gordos del delito organizado, sino sobre quienes protestan y luchan contra el hambre. No les importa terminar con este tipo de negocios espurios, porque el objetivo es preservar las ganancias de los capitalistas, que se financian con estas operaciones.
Todo esto es lo que quedó demostrado en 2019 con el caso de Natacha Jaitt, quien apareció muerta luego de denunciar la red de pedofilia más grande de Argentina, la cual operaba dentro del club Independiente en complicidad con grandes empresarios y funcionarios del Estado; Marcelo Corazza, exparticipante de Gran hermano, fue detenido por integrar una red de trata de menores de la también formaban parte empresarios hoteleros; Daniel Zisuela, exconcejal de Florencio Varela y burócrata sindical del gremio gastronómico, fue condenado a trece años de prisión por regentear una red de trata amparada durante décadas por el aparato del Partido Justicialista, el Poder Judicial y la Policía Bonaerense; otro exponente del asunto es el caso Loan, el cual desnudó el funcionamiento del crimen organizado en Corrientes, puntualmente de una red de trata de menores, en la cual está involucrada la cúpula policial y funcionarios públicos de la provincia, y el conteo puede seguir.
En su testimonio, Mazzoni también agregó el rol importante que cumplen en estas operatorias las instituciones religiosas, y recordó que Roemmers expresa en sus redes sociales que es vocero del Papa Francisco. Es sabido que la iglesia constituye una de las principales fuentes de casos de pedofilia y abusos a menores, son incontables la cantidad de curas y clérigos denunciados por este tipo de crímenes, pero son amparados por la propia Iglesia y el Estado.
Los medios de comunicación también están puestos al servicio de estos negocios porque, en su mayoría, responden al poder de turno. Es lo que quedó demostrado también con el caso Loan, donde una fuerte operación mediática acompañó el apoyo de Bullrich a las versiones falsas para desviar la investigación.
La explotación sexual de los menores es un aspecto del capitalismo, un régimen social basado en la desposesión y la miseria de la mayoría de la población. El crecimiento de la explotación sexual de las infancias ha venido de la mano del aumento de otras formas de explotación, como el trabajo forzoso. Se trata de un sistema que, además, se ensaña contra los más débiles, como lo son los menores.
Que haya tantas redes (y personas involucradas en ellas), y que funcionen durante tanto tiempo, solo puede ocurrir con la connivencia del Estado. Los capitalistas y sus representantes políticos (peronistas, macristas, radicales, etcétera) son responsables y cómplices de todo esto. Por eso, la lucha contra las redes de trata debe realizarse de manera independiente de todos los gobiernos.
17/08/2024 a las 11:18 AM
Cuidado no te manden un PULSA DENURA por tus declaraciones… por cierto el patán de San Martín es huesos… dejen de usarlo como manipulación a ese cenizoso y que se hunda en el olvido