Por José M. García Rozado.-

Lo acordaron el pasado 13/9 la canciller Susana Malcorra y el ministro británico de Asuntos Exteriores, Alan Duncan. Tras una reunión que mantuvieron en el marco del Foro de Inversiones y Negocios. Se resolvió “el establecimiento de dos escalas adicionales mensuales en territorio continental argentino, una en cada dirección”. Actualmente hay un solo vuelo por mes de Río Gallegos a Malvinas. Ambos gobiernos acordaron trabajar en conjunto políticas comerciales y la eliminación de trabas para la industria del gas y el petróleo. Así lo informaron a través de un comunicado conjunto, donde destacan restablecer los vuelos a las Islas e identificar a los soldados enterrados en el cementerio de Darwin, pero sin hablar de la Soberanía exigida por nuestro país. La Asamblea Legislativa de las Malvinas celebró el pacto. Cómo impactará en el desarrollo económico de las islas. Reino Unido y Argentina han acordado cooperar en áreas de interés común, pero sin que esto afecte la soberanía británica de las islas Malvinas, subrayó hoy el Ministerio de Asuntos Exteriores en Londres.

En un comunicado divulgado por el Foreign Office, el secretario de Estado británico para América, Alan Duncan, que visitó Buenos Aires, señaló que los dos países acordaron un primer paso positivo sobre asuntos que afectan al Atlántico Sur. Duncan, quien se entrevistó con el presidente argentino, Mauricio Macri, resaltó que el acuerdo no tiene impacto en la soberanía de las Malvinas y que el Gobierno está comprometido a respetar los derechos de los habitantes de las islas. Según el secretario de Estado, “el Reino Unido y Argentina están construyendo una relación positiva basada en áreas en las que claramente estamos de acuerdo”. “En los últimos dos días, he mantenido reuniones que han ayudado a alcanzar estos acuerdos. El Reino Unido y Argentina tienen una amplia relación que va más allá de sus diferencias”, agregó. “Para mí, está claro que Argentina está abierta a los negocios”, puntualizó el político conservador y recalcó que los dos países pueden conseguir progresos a través del diálogo.

Argentina y el Reino Unido acordaron ayer en Buenos Aires establecer un “diálogo” para “mejorar la cooperación” en todos los asuntos “de interés recíproco” del Atlántico Sur, donde están las Malvinas, bajo dominio británico, pero cuya soberanía reclama el país suramericano. La Cancillería argentina divulgó un extenso comunicado conjunto elaborado tras la visita a Buenos Aires de Alan Duncan. “En un espíritu positivo, ambas partes acordaron establecer un diálogo para mejorar la cooperación en todos los asuntos del Atlántico Sur de interés recíproco”, destacó la nota, que hizo referencia a la necesidad de trabajar conjuntamente en áreas como la pesca, la navegación y los hidrocarburos. El Reino Unido y Argentina se enfrentaron en un conflicto armado en 1982 por la posesión de las islas del Atlántico sur, que terminó el 14 de junio de ese año con la victoria de las fuerzas británicas.

Las relaciones entre los dos países se deterioraron durante el mandato de Cristina Fernández, pero el actual Gobierno de Macri busca impulsar los vínculos bilaterales. Como hace muchos años que no ocurría, la Asamblea Legislativa de las Malvinas dio la bienvenida al acuerdo alcanzado en las últimas horas por los gobiernos de la Argentina y el Reino Unido. En especial quedaron satisfechos con que “se remuevan todos los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo” de las islas. Se refieren a hidrocarburos, pesca, navegación y turismo. En el comunicado, publicado por la agencia Mercopress, la consejera Phyl Rendell agradeció incluso el trabajo de Alan Duncan, ministro de Estado para Europa y las Américas del Foreign Office, quien tras su paso por Buenos Aires -adonde participó del Foro de Inversiones y Negocios- se encargó de firmar el acuerdo. Duncan se entrevistó el martes con la canciller Susana Malcorra y el vicecanciller Carlos Foradori. Y esta mañana las cancillerías de los países publicaron la letra del acuerdo que deja en claro por qué los isleños están contentos: les concede casi todo -menos la soberanía- y Argentina se lleva poco y nada. Más aún, se retrocede la situación al Acuerdo que en 1999 firmaron Tony Blair y Carlos Menem. De esta manera, si bien la política de endurecimiento en materia de comunicaciones, petróleo y pesca más la continua agresividad hacia los isleños del gobierno de los Kirchner, no había sido más que contraproducente para el país, el acuerdo firmado por el gobierno de Mauricio Macri para avanzar en numerosas áreas, se muestra tibio en la cuestión del Conflicto del Atlántico Sur.

Y abre un interrogante sobre cuál va a ser el espacio -y cómo- para el reclamo de soberanía. Malcorra ya lo dijo al Financial Times. Las islas no son prioridad. El acuerdo firmado ayer señala sobre esta cuestión que las partes acordaron establecer un diálogo para “mejorar la cooperación en todos los asuntos del Atlántico Sur de interés recíproco”, y que será bajo la fórmula de soberanía del párrafo 2 de la Declaración Conjunta del 19 de octubre de 1989, es decir la que estableció el paraguas de soberanía. Por fuera todo, por dentro nada. “En este contexto se acordó adoptar las medidas apropiadas para remover todos los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo sustentable de las Islas Malvinas, incluyendo comercio, pesca, navegación e hidrocarburos. Ambas Partes enfatizaron los beneficios de la cooperación y de un compromiso positivo de todos los involucrados” señaló el comunicado de los gobiernos de Mauricio Macri y Theresa May, quienes posiblemente se reúnan este mes en Nueva York, en el marco de las reuniones de la Asamblea de Naciones Unidas. Lo más inquietante es que, si bien el Gobierno venía diciendo que quiere un vuelo directo del continente al archipiélago, el acuerdo señalan que las “partes acordaron que serían establecidas conexiones aéreas adicionales entre las Islas Malvinas y terceros países. En este contexto acordaron el establecimiento de dos escalas adicionales mensuales en territorio continental argentino, una en cada dirección. Los detalles específicos serán definidos”. Punto. Nada más.

Según Mercopress, Duncan dijo que estaba satisfecho con que las islas estén “libres para buscar conexiones aéreas con otros países en la región. Un escala en Argentina se va a buscar en acuerdos futuros similar al que ya existe”. Esto es claramente una referencia al vuelo que cada sábado hace la empresa Lan desde Santiago de Chile, Punta Arenas a Mount Pleasant y que solo una vez por mes hace escala en Río Gallegos. El comunicado emitido por la asamblea isleña también resaltó que cualquier acuerdo para un vuelo más desde Argentina que se arregle será bajo los principios de 1999, en los que Aerolíneas Argentinas no pudo participar. Luego, lo que sí parece fluir es el otro punto del acuerdo: “Ambas Partes expresaron su pleno apoyo al proceso de identificación de ADN con relación a los soldados argentinos no identificados sepultados en el cementerio de Darwin. Las conversaciones sobre esta delicada cuestión humanitaria serán llevadas adelante en Ginebra sobre la base de una evaluación del Comité Internacional de la Cruz Roja, complementada por las conversaciones bilaterales que sean necesarias. Ambas Partes acordaron que los deseos de las familias involucradas son de la mayor importancia”, expresó el comunicado, cuando existen inmensa cantidad de presentaciones de familiares que se niegan a dicha identificación y a exhumar los cuerpos del Cementerio de Darwin.

El gobierno de Argentina ha optado por el enfrentamiento interno en su acercamiento a la nueva administración conservadora de Reino Unido, según declaró a Sputnik Francesc Badia i Dalmases, director de Democracia Abierta. “No parece que la moderación y el pactismo esté en la agenda del presidente (Mauricio) Macri por el momento”, interpretó el experto en Latinoamérica de la reconocida plataforma informativa digital. El acuerdo anglo-argentino, que incluye la cooperación de ambos países en el desarrollo de la industria de hidrocarburos en las islas Malvinas, confirma, según Badia, “el giro de 180 grados” en la política Exterior del presidente Macri. “Las Malvinas fueron el caballo de batalla en la acción exterior del Gobierno anterior, cuya épica pasaba por un discurso duro y muy reivindicativo de las islas y un esfuerzo para renacionalizar el petróleo en clave soberanista”, explicó el analista político. Badia advierte de que este último paso del presidente Macri implica “concesiones” más allá de gestos previos para “congraciarse con el Banco Mundial, el FMI o Estados Unidos” “Parece que la administración Macri se siente suficientemente fuerte para aguantar el aluvión de críticas severas que este giro le esté ya conllevando”, argumentó. El experto anticipa “un ataque feroz” en Argentina a este acuerdo que contempla la retirada de restricciones a la extracción de petróleo en el entorno de las Malvinas.

La canciller Susana Malcorra y el vice canciller británico, Alan Duncan, acordaron una serie de medidas entre ambos países, entre las que se destaca el establecimiento de un nuevo vuelo mensual a las Malvinas. Así se informó a través de un comunicado con 10 puntos de acuerdo, luego de la reunión mantenida en el marco del Foro de Inversiones y Negocios que se realiza en el Centro Cultural Kirchner. El escrito destaca en su ítem “Atlántico Sur”, el “fortalecimiento de la relación bilateral y la búsqueda de soluciones de los problemas globales dentro de los marcos multilaterales que correspondan” y un apartado final señala lo relacionado a las Malvinas, cuya soberanía la Argentina reclama hace décadas. En ese contexto, se resolvió “el establecimiento de dos escalas adicionales mensuales en territorio continental argentino, una en cada dirección”, cuyos detalles serán definidos próximamente. A comienzos de agosto, Clarín publicó en exclusiva el facsímil de la carta que la Canciller británica, Theresa May, envió al gobierno argentino en la que invitaba a la Argentina a iniciar negociaciones que incluyeran el tema de los vuelos y el levantamiento de restricciones a la exploración y explotación petrolera en los mares de Malvinas.

A principios de este mes, Malcorra había dicho al diario británico The Guardian que nuestro país estaba evaluando retomar los vuelos desde Argentina y hacia las Islas y también “un Joint ventures argentino británico de exploración de petróleo alrededor de las islas Malvinas”. El anuncio en aquella oportunidad de la visita de Duncan a nuestro país, para participar del Foro, desde Londres fue calificado como una “mejora en las relaciones (?)”, que se habían deteriorado durante la gestión kirchnerista. Además, ambos funcionarios acordaron “adoptar las medidas apropiadas para remover todos los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo sustentable de las Islas Malvinas, incluyendo comercio, pesca, navegación e hidrocarburos. Ambas partes enfatizaron los beneficios de la cooperación y de un compromiso positivo de todos los involucrados”. “En un espíritu positivo, ambas partes acordaron establecer un diálogo para mejorar la cooperación en todos los asuntos del Atlántico Sur de interés recíproco”, señala el comunicado.

Argentina y Gran Bretaña expresaron dentro del punto “Ciencia y Tecnología, Derechos Humanos y Cuestiones de Género”, “su pleno apoyo al proceso de identificación de ADN” de los soldados argentinos que murieron en la guerra de 1982, sepultados en el cementerio de Darwin, y que aún no fueron identificados. “Las conversaciones sobre esta delicada cuestión humanitaria serán llevadas adelante en Ginebra sobre la base de una evaluación del Comité Internacional de la Cruz Roja, complementada por las conversaciones bilaterales que sean necesarias. Ambas partes acordaron que los deseos de las familias involucradas (?) son de la mayor importancia”, señala la nota de prensa. En tanto, ambos funcionarios también avanzaron en otras áreas como “Consultas Políticas de Alto Nivel”. En ese sentido, “se resolvió reactivar las Consultas Políticas Bilaterales de Alto Nivel iniciadas en 2002, otorgándoles carácter temático integral y periodicidad anual”. “Las Consultas Políticas buscarán ampliar la relación bilateral en torno a una agenda positiva que aborde los desafíos globales en el mediano y largo plazo, en áreas como democracia, derechos humanos, cooperación en paz y seguridad internacionales, no-proliferación, medio ambiente y cambio climático, energías limpias, comercio e inversión, ciencia, tecnología e innovación, turismo y deporte”, detalla el comunicado.

La “Lucha contra la corrupción y el crimen organizado”, “Arte, cultura, educación y deportes”, “Seguridad Internacional y Defensa”, “G-20” y “OCDE”, en el que el Reino Unido se compromete en apoyar la relación de nuestro país con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. Además de un acuerdo en torno a la “Crisis de los Refugiados”, donde se elogia la decisión del Gobierno argentino de establecer un programa para recibir a 3.000 refugiados sirios, y que día a día se desinfla un poco más. Otro punto es el de “Comercio e inversiones”, donde se arribó a trabajar con el objetivo de “incrementar significativamente el comercio bilateral”. Finalmente, establecerán una fecha para una reunión “más amplia a la mayor brevedad posible”. Los gobiernos de Argentina e Inglaterra emitieron su primer comunicado conjunto sobre el tema de Islas Malvinas desde 1999: entre otros puntos, acordaron trabajar para eliminar medidas que restringen la industria del gas y petróleo, pesca y embarques en el área de las Islas -una prioridad de la Gran Bretaña y una claudicación de Argentina-, aunque las autoridades británicas aseguraron “que las discusiones no abordan la cuestión de la soberanía, ni de retirar el embargo militar sobre argentina”.

El texto consensuado se publicó en las últimas horas luego del encuentro entre la canciller Susana Malcorra y el ministro de Estado para Europa y las Américas de la Secretaría de Relaciones Exteriores y Commonwealth británica, Sir Alan Duncan.

“Desde ya que el diálogo no incluye la cuestión de la soberanía. El Reino Unido continúa con un fuerte apoyo al derecho de los isleños, y nuestra posición no ha cambiado. No puede haber diálogo sobre este tema a no ser que los isleños así lo deseen”, explicó Duncan. Sin embargo, y consultados por Infobae, desde Cancillería indicaron que la soberanía de las Islas Malvinas “es una cuestión que ambos gobiernos reconocen como pendiente (?)”. ¡Puntualmente, el acuerdo radica en el trabajo conjunto para eliminar medidas que restringen industria de gas y petróleo, pesca y embarques en área Malvinas! “Ambas partes acordaron establecer un diálogo para mejorar la cooperación en todos los asuntos del Atlántico Sur de interés recíproco”, asegura la declaración conjunta, y agrega: “Se acordó adoptar las medidas apropiadas para remover todos los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo sustentable de las Islas Malvinas, incluyendo comercio, pesca, navegación e hidrocarburos. Ambas partes enfatizaron los beneficios de la cooperación y de un compromiso positivo de todos los involucrados”.

Las redes sociales explotaron: “Todo lo que le conviene a ellos a cambio de nada, cedemos en todo, ellos se benefician y nosotros no conseguimos nada, ahora estamos peor que antes, si ellos pueden desarrollar el petróleo, la pesca, y el desarrollo sustentable de las islas como dice la nota, se fortalece la posición de ellos y nosotros no conseguimos nada, esto es como la política de seducción de los noventa, todo a favor de ellos y nada para nosotros”, critica Marcelo Lebrero. “Abaratarles la colonia a cambio de nada no tiene sentido. España hace décadas tiene una actitud complaciente respecto a Gibraltar y no consiguió nada”, expresa asimismo Nicolás Zar. “Esta postura no sirve de nada… solo beneficia a los ingleses… ¿realmente creen que los piratas van a ceder algo? jajaja… preferible denunciarlos y truncar aunque sea en lo más mínimo sus planes que regalarles todo, por nada”, expone Ezequiel Rodrigues. El pasado 24/06 Infobae exponía: “El gobierno kelper aseguró en un comunicado que la salida de la Unión Europea es un proceso que tomará tiempo y su resultado final no es claro, pero no habrá cambios sustanciales en lo inmediato para su posición. “Vamos a trabajar todo el gobierno, el sector privado y las ONG para seguir indagando todas las posibles implicancias directas e indirectas, en particular relacionadas con el comercio”, afirmaron y añadieron que su objetivo será “retener los beneficios que actualmente tienen, sobre todo en relación al comercio”. “La salida de Gran Bretaña de la Unión Europea tras el referéndum de ayer puso a las islas Malvinas en una situación incómoda: el Brexit podría dejarlos desamparados a nivel diplomático y aislados en lo económico.”

“Para los kelpers, la Unión Europea era un paraguas para bloquear el reclamo de soberanía de la Argentina, además de permitirles el acceso al mercado común a sus exportaciones. El Tratado de Lisboa, ratificado en 2009, reconocía al archipiélago del Atlántico Sur como territorio británico, lo que daba apoyo cierto a Gran Bretaña, algo que podría perder fuerza justo en momentos en que, tras el cambio de gobierno, Argentina bajó el tono a la disputa bilateral, aunque los kelpers sospechan que vendrá aparejado de un endurecimiento de la posición. William Hague, ex canciller de David Cameron, sostuvo días atrás que con el Brexit, el Reino Unido se arriesga “a perder la solidaridad garantizada de 28 naciones respecto de la soberanía británica de las islas Falkland, incluidas aquellas con fuertes lazos con América latina, como España e Italia”. En el mismo sentido, el secretario de Defensa Michael Fallon sostuvo que la salida implicaría un peligro diplomático pero prometió que la protección militar continuará. La posición británica también quedaría debilitada respecto del conflicto con España por el Peñón de Gibraltar, sin contar con el hecho de que las derrota empujó a David Cameron a la renuncia. Sin embargo, más allá del previsible cambio de gobierno, la incertidumbre es moderada: nada hace prever en lo inmediato un cambio radical en la política exterior británica, sin contar con el hecho de que Gran Bretaña seguiría siendo miembro con derecho a veto en el Consejo de Seguridad de la ONU.”

“La economía de la isla es la principal amenazada: el 60% del PBI malvinense se debe a sus exportaciones pesqueras, el 95% de las cuales son ventas a países europeos. Además, la UE subsidia a los kelpers para diversificar su economía todavía dependiente de la pesca de calamar, mientras que los incentivos al petróleo y el turismo aún no rinden sus frutos. Esta semana -expresaba el pasado 24/06 Infobae- , la canciller Susana Malcorra reafirmó ante Naciones Unidas los derechos “imprescriptibles” de la Argentina sobre las Islas Malvinas, y afirmó que el reclamo sobre el territorio es “irrenunciable y permanente” al participar de una sesión del Comité Especial de Descolonización (C24), en Nueva York.” Natasha Niebieskikwiat en Clarín expresaba: “El vicecanciller Carlos Foradori defendió anoche el acuerdo alcanzado en las últimas horas con el Reino Unido, y aseguró que este “permitirá acercarnos más al objetivo de Estado constituido en recuperar el ejercicio de la soberanía sobre Malvinas”. El funcionario señaló, además, que para el gobierno de Mauricio Macri esto es una meta que “no sólo permanece inalterable, sino que se reafirma con la apertura del diálogo” con Londres. La canciller Susana Malcorra -que viaja a Washington en las próximas horas- y Foradori recibieron el martes 13/09 al ministro del Foreign Office Alan Ducan con quien firmaron una amplia declaración conjunta, que incluye muy diversos temas de acercamiento, incluyendo la cuestión del conflicto de soberanía en el Atlántico Sur. De este se desprende que Argentina y Gran Bretaña negocian establecer un vuelo entre el continente y las Malvinas que se sume al que hace una vez por semana el de Latam y que sólo una vez por mes hace escala en Río Gallegos.” Pero que no será realizado por Aerolíneas Argentinas sino por otra empresa.

Esta nueva ruta sería desde Buenos Aires, tocaría otro punto de Sudamérica como Brasil y podría ser más frecuente, aunque la declaración no lo especifica. Al mismo tiempo, se establecerá un amplio sistema de cooperación con Gran Bretaña y las Islas en materia hidrocarburífera, pesquera, de navegación y turística. Si bien busca destrabar la política agresiva de los Kirchner hacia las Islas, la declaración genera dudas (?) sobre lo que podría obtener Argentina en la cuestión de soberanía, mientras que a cambio se muestra más abierto que los británicos y los isleños en materia de cooperación por fuera del conflicto y bajo el llamado “paraguas de soberanía”. “No se puede reclamar que nuestros interlocutores conversen cuando al mismo tiempo nos cerramos a todo tipo de comunicación. Precisamente, este Comunicado Conjunto tiene como común denominador la instancia al diálogo bilateral. El numerador de esa ecuación reconoce innumerables temas a ser considerados entre las dos partes que constituyen objetivos comunes, como la lucha contra el narcotráfico, el terrorismo, el respeto por los derechos humanos y el comercio e inversiones entre muchos otros”, reafirmó a Foradori. La realidad después de tanto palabrerío es que Argentina se “ofrece mansamente a Gran Bretaña a cambio de nada”, pues el Imperio se saca las presiones en materia hidrocarburífera, no cede ni el control de la pesca que depreda nuestro mar y no el de ellos y tampoco levanta el vetusto e innecesario “embargo militar sobre armas” que pesa sobre nuestro país y que conlleva la casi imposibilidad (salvo con China, Rusia e Israel) de poder reequipar a nuestras indefensas FFAA y por lo tanto a la Patria. ¡Una verdadera vergüenza!

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