Por Francisco Viotti.-

Los Jubilados, siempre los Jubilados; somos el comodín de luchas, peleas y aprietes de todo tipo, a manos de gobiernos e instituciones que nos utilizan para fines espurios y luego volvemos al olvido de ambos contrincantes, como así también de gran parte de la sociedad a la que le ha interesado el tema de controversia como noticia política del momento. Una vez terminada la contienda, olvida nuevamente que los Jubilados, luego de haber sido utilizados como estandarte ocasional, somos desechados como profilácticos.

Luego de haber sido tildados de Buitres y Caranchos por la infame delincuente del Calafate, atrincherada junto a varios de los integrantes de la banda, en la ex – Honorable Cámara Legislativa, convertida en aguantadero de ladrones y corruptos; los sucesores de los directivos de la ANSeS de ese entonces, continúan con los mismos conceptos y pretenden hacer creer que de acceder a “nuestros legítimos derechos”, seríamos responsables del tan temido default. Lo que no dicen los actuales Directivos de ANSeS (¿O tal vez son los mismos de la corrupta gestión anterior disfrazados?) por qué ha sido utilizado el Fondo de Sustentabilidad y el total de los recursos para fines de todo tipo, menos para con sus legítimos destinatarios: los Jubilados que aportamos durante toda nuestra vida laboral activa y hoy estamos convertidos en parias de la sociedad, denigrados y mendigando lo que la Justicia ya ha Sentenciado a nuestro favor, en 22 de las 23 Cámaras de Seguridad Social y Apelaciones. Asimismo, 60 de los 64 Camaristas fallaron a favor del índice ISBIC que debe aplicar la ANSeS.

En la actual situación de controversia entre el Gobierno, reclamando que los Jueces paguen Impuesto a las Ganancias como todo el resto de la sociedad y por la otra parte, la Corte Suprema de Justicia de la Nación sosteniendo su postura al respecto; nos encontramos los Jubilados como Rehenes Omniscientes aguardando el veredicto del Alto Tribunal, el cual se tomará su tiempo (el tiempo que nos falta a los Jubilados. Nuestro tiempo es hoy. Ahora. Pues cada minuto que pasa, uno de nosotros parte de este mundo con la angustia de haber sido ESTAFADO por el Estado y por la Justicia) y se expedirá de acuerdo al rédito que pueda “acordar” con el Gobierno, respecto al tema del Impuesto a las Ganancias. También depende en gran parte, de la grieta política que existe dentro de la propia CSJN.

Esta es nuestra triste realidad de hoy y la incertidumbre de los 150.000 Jubilados, que no aceptamos el ofrecimiento de la limosna propuesta por ANSeS, en la denominada Reparación Histórica, aplicando la fórmula del engendro RIPTE creada a tal efecto por medio de la Ley 27.260 en julio de 2016; cuando en realidad se debe aplicar el índice ISBIC, el cual regía con la doctrina Elliff al momento de iniciar los respectivos Juicios Previsionales. Otra de las posibilidades nefastas que podría ocurrir, es que la SCJN se expida sola y únicamente a favor del Juicio “Lucio Orlando Blanco c/Anses…” y los “144.999” Jubilados restantes, debamos apelar a un nuevo Juicio amparándonos en la nueva Jurisprudencia; con todo lo que implica un nuevo litigio y principalmente el tiempo a transcurrir. El dichoso tiempo que nos falta a los Jubilados y que acrecienta nuestras enfermedades físicas y fundamentalmente las depresivas que terminan minando nuestra salud de manera terminal. Todo esto, a la ANSeS le sirve de maravillas para “hacer tiempo” y que varios de los “queridos abuelos” (léase Viejos de Mier…coles) revienten en el camino.

Todo es muy cruel, pero es nuestra realidad y los Jubilados no le importamos a nadie, a pesar de ser siete millones, deberíamos tener un partido propio, pero muchos recordamos en 1987, un intento del periodista previsional José Corzo Gómez, el “de las manos limpias” (ya fallecido) y el Partido Blanco, que resultó tener las manos no muy limpias y todo fue un fiasco. De todas formas siete millones de integrantes, no lo tienen algunos partidos políticos importantes; sólo que deberíamos estar muy seguros a la hora de votar, puesto que podríamos dar vuelta cualquier elección. Sólo deberíamos proponernos a dejar de ser “rehenes” y pasar a “exigir” por Nuestros Legítimos Derechos.

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