Por Guillermo Cherashny.-

En este medio dimos la primicia de la comida en la casa de Mauricio Macri con Sergio Massa en la que estuvo Juliana Awada, quien sirvió milanesas que preparó la cocinera y no eran del resto Sottovoce. Lo que no tenemos confirmada es la presencia de José Manuel de la Sota. De todos modos, hubo acuerdo para evitar el eventual fraude el 25 de octubre y se exploró de bajar candidatos en intendencias para favorecer en algunos casos a candidatos del PRO, en otros a los del Frente Renovador, y se aclararon muchas desconfianzas que impidieron un acuerdo el pasado 20 de junio que hubiera asegurado el triunfo en las PASO.

Lo previsible

Massa no puso ninguna condición pero dio a entender que Elisa Carrió debía pedir perdón por acusarlo falsamente de narco o por lo menos dejar de atacarlo con chicanas falsas. Todo esto si es que se puede llegar a un acuerdo para un eventual ballotage para que no gane Scioli en primera vuelta.

El sábado pasado, Carrió, a la vuelta de Estados Unidos y México, dijo que el Frente Renovador de Massa era republicano y pareció entonces que acompañaba la estrategia conciliadora de Mauricio Macri. Pero el lunes a la noche, en el programa de cable de Joaquín Morales Solá, la diputada comparó a Massa con Amado Boudou, lo que causó mucho malestar en el Frente Renovador, a lo que se agrega que en San Miguel, el intendente Joaquín de la Torre se queja de que algunos candidatos del PRO lo agreden, lo que se sumaría al embate del candidato del FpV Franco Laporta. Por lo cual, en el Frente Renovador hay quienes quieren lanzar la propuesta antifraude y romper las negociaciones con Macri debido a los arrebatos de Carrió.

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