Por Carlos Tórtora.-

Las últimas 48 horas fueron de dificilísimas negociaciones en la cúpula de la alianza electoral que hoy presentarán ante la justicia federal el PRO, la UCR y la Coalición Cívica. Este nivel de tensión augura una situación todavía más compleja para el próximo plazo legal, el de presentación de listas de candidatos, que finalizará el próximo 20.

Algunos esperaban fuertes discusiones entre los representantes del PRO y la UCR, pero la realidad fue otra: Elisa Carrió se constituyó en la vedette absoluta de las negociaciones, al punto que la alianza anoche a última hora seguía sin tener nombre, porque la diputada habría objetado unos cuantos.

La boleta a utilizar por la triple alianza en las PASO del 9 de agosto también está siendo objeto de una densa discusión. Como se sabe, todas las listas que participen de la primaria deben llevar boletas con el mismo diseño y colores. El macrismo intentaría que la parte más visible de la boleta sea amarilla, a lo cual se opone la jefa de la Coalición Cívica, con el argumento de que, con ese color, los tres partidos parecerían sectores del macrismo. A las cansadas, ayer a última hora empezaba a existir consenso para que la boleta sea blanca, con alguna combinación con amarillo.

En cuanto a la lista para diputados nacionales por la Capital Federal, Ernesto Sanz es favorable a una lista única, teniendo en cuenta la enorme diferencia de votos a favor que acumula el PRO. De este modo, los radicales podrían conseguir al menos dos bancas. Pero Carrió ayer pateó el tablero y exigió listas separadas. Es que ella supondría que, si bien en el orden nacional perdería en las PASO contra el aparato radical, en Capital podría ganar, es decir, salir segunda detrás del PRO, lo que le evitaría una derrota global.

También se negociaba ayer sobre las listas en Buenos Aires. Hubo un acuerdo unánime para que haya una sola lista de diputados nacionales. Pero de ahí para abajo la competencia sería feroz y se presentarían en cada distrito y sección de la provincia numerosas listas para intendentes, concejales y legisladores provinciales. Una dispersión de votos que puede volvérsele en contra a la triple alianza.

Un tema central, que ya empezó también a negociarse en las últimas 72 horas es quién encabezará la lista nacional de candidatos al PARLASUR, siempre suponiendo que CFK sea la estrella del gobierno para ese cargo. Las miradas en este punto convergen en Carrió, de perfil ideal para debatir con la presidente. Pero hay en el medio problemas. Por ejemplo, a Carrió le quedan dos años como diputada nacional y, como se sabe, el cargo de diputada del PARLASUR se vincula con la condición de ñoqui, ya que dicho cuerpo recién se integrará en el 2020. Si buscamos hoy en la página oficial del PARLASUR, encontraremos apenas algunas declaraciones de principios y eso es todo. Obviamente, hoy por hoy, se trata de un cargo sólo útil para contar con fueros, un objetivo muy caro a la presidente pero no a Carrió.

Un nuevo cisma

Por último, la jefa de la Coalición Cívica parece condenada a sufrir permanentes crisis internas. A menos de 24 horas de su lanzamiento como candidata a presidente, dirigentes de diferentes provincias emitieron un duro documento donde señalaron que “nos encontramos en esta etapa en una situación paradojal de un camino sin retorno que comenzó en La Emilia finalizando hoy en SOCMA. La primera, como símbolo de la destrucción menemista, y la Sociedad es Macri como los grandes triunfadores de la década neoliberal”.

Como se recordará, la fuerza carriotista tuvo su inicio en medio de la crisis del 2001 en La Emilia -partido de San Nicolás- junto al ya fallecido dirigente socialista Alfredo Bravo; ese lanzamiento ubicó a la Alternativa por una República de Iguales -ARI- claramente en un espacio de izquierda.

“Frente a esta realidad, estamos convencidos de que la única salida posible es la de construir un espacio progresista capaz de expresar con hechos, discursos y conductas los valores republicanos, no sólo por su importancia institucional sino principalmente por su capacidad de transformar la realidad de una sociedad hacia senderos prósperos con Igualdad y Decencia”, se establece en el documento firmado por dirigentes como Griselda Baldata, Liliana Piani, Susana Moledo y el platense Alejandro Carranza.

Frente al acuerdo electoral, los referentes lamentaron el atropello “que llega hasta nuestra puerta” y agregaron que “claramente no estamos a favor de una alianza que sólo garantiza continuidades, pues más allá de las formas, está claro que tanto Daniel Scioli, Sergio Massa o Mauricio Macri expresan un mismo pensamiento político-ideológico”.

Asimismo, manifestaron su apoyo al Frente Progresista, respaldando la candidatura presidencial de Margarita Stolbizer. Ayer, en fuentes del PRO, se evaluaba que esta ruptura apenas incidiría en las urnas.

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