Por Guillermo Cherashny.-

Lo más importante de la presentación de Cristina el jueves en la Feria del Libro fueron sus elogios al general Perón, porque cuando fue presidenta dijo que lo había votado por izquierda metiendo la boleta de Jorge Abelardo Ramos, el nacionalista revolucionario que acompañaba con una colectora.

Además, Néstor y Cristina Kirchner siempre recordaron que estaban entre los militantes que el General echó de la plaza y es más, cuando Juan Domingo Perón dijo que se quedaba con la música maravillosa del pueblo, antes de eso echó a los Montoneros de la plaza, por lo cual la afirmación de Cristina elogiándolo y a José Ber Gelbard, su ministro de economía, fue una clara actitud revisionista y más aún cuando reivindicó la figura de Roberto Lavagna como ministro de economía de Eduardo Duhalde, seguramente asesorado por Alberto Fernández, el ex jefe de gabinete que también estuvo distanciado de ella desde el 2009 y que acompañó a Massa en las elecciones legislativas del 2013.

Indudablemente, con estas referencias, su objetivo fue seducir al peronismo que está distanciado de ella y en especial de los gobernadores del peronismo que tiene muy buenas relaciones con el gobierno de Macri.

El futuro próximo demostrará si este operativo de seducción tendrá éxito en las próximas elecciones o bien si Cristina fuera presidente de nuevo, ganándole a Macri en las próximas elecciones y necesitará el apoyo del Peronismo Federal a su gobierno, que tendrá nulo apoyo de los mercados voluntarios de crédito.

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