Por Carlos Tórtora.-

La crisis cambiaria le dio esta semana que pasó un respiro al gobierno, que en cambio sufrió el exitoso paro sindical del 1° de mayo. Este tiempo de relativo sosiego fue aprovechado por el presidente para intentar sumar al peronismo no K a un documento de gobernabilidad de 10 puntos que le mostrará al FMI y la Casa Blanca que al menos una parte del justicialismo apoya la continuidad de la actual política financiera. El resultado fue pobre, porque Roberto Lavagna anticipó un fracaso y Sergio Massa reclamó que se convocara a Cristina Kirchner en su condición de líder de la oposición. Sólo Juan Manuel Urtubey y Miguel Ángel Pichetto aceptaron el marco de diálogo propuesto por el oficialismo.

Macri ha mostrado en la práctica la misma predisposición para el diálogo que CFK -o sea ninguna-, con la diferencia de que esta última perseguía a la oposición. En realidad, lo que habría iniciado el macrismo es la operación de sondeo del peronismo anti K con vistas a un ballotage. Un primer análisis indica que este peronismo inclinaría la balanza de la lucha por el poder. Este diálogo podría sentar las bases para un apoyo en la segunda vuelta. Sin embargo Massa, cada vez más dedicado a negociar con el cristinismo, se ocupó de hacer naufragar la iniciativa.

Las colectoras a punto de volver

El tigrense tiene un ojo puesto en el despacho de María Servini de Cubría, la que está dando señales de que haría lugar al pedido de varios dirigentes peronistas para que la justicia deje sin efecto el reciente Decreto 259, que limita casi por completo la posibilidad de la existencia de listas colectoras. En un reciente fallo sobre cambios en el sistema de votación en el extranjero, Servini señala que no deben admitirse cambios en la legislación electoral realizados durante el mismo año electoral. De fallar en ese sentido la jueza y confirmarlo la Cámara Nacional Electoral, sí habría colectoras y en consecuencia el peronismo podría intentar que haya un candidato a gobernador de Buenos Aires unificado. Un traje a la medida de Massa si éste consuma una alianza con el cristinismo.

Share