Por Guillermo Cherashny.-

La pandemia del coronavirus ha puesto a Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli como figuras descollantes de Juntos por el Cambio y ha desplazado del foco de atención a Patricia Bullrich, la flamante presidente del PRO, que aparecía todos los días en los programas de televisión para criticar al gobierno.

En ese sentido, la ex ministra de seguridad expresa a miles de votantes de Macri que son profundamente antikirchneristas y antiperonistas, que están furiosos contra cualquier medida que tome Alberto Fernández y detestan aún más que Horacio Rodríguez Larreta diga que forma un mismo equipo con el gobierno nacional y los mandatarios provinciales radicales, porque no entienden que el país está librando una guerra. Este concepto bélico lo dijo Emmanuel Macron, el presidente francés, y Angela Merkel, la premier alemana, que consideró el desafío más grande para su país desde la segunda guerra mundial. Estos argentinos que no entienden que ante una guerra todos los argentinos deben estar unidos son una minoría intensa que es muy difícil que cambie porque consideran que el triunfo del Frente de Todos es ilegítimo porque lo votaron millones de analfabetos que constituyen el núcleo mayoritario del peronismo.

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