Por Carlos Tórtora.-

La flamante ley electoral porteña modifica la actual legislación y habilita al jefe de gobierno a optar por mantener las elecciones separadas o bien unificarlas con las nacionales. El plazo para la convocatoria a los comicios será de 120 días antes de las primarias del próximo 11 de agosto, es decir en abril.

En otras palabras, que Horacio Rodríguez Larreta deberá tomar una decisión sobre la fecha en los próximos seis meses. Se sabe que el jefe de gobierno se anota entre los que creen que lo mejor sería mantener los comicios separados. Las razones de esta postura pasan básicamente por la convicción de que, si se plebiscitara la gestión de Larreta en forma separada, éste cosecharía más votos que si la sábana de boletas la encabeza Macri. Como este motivo es casi inconfesable, se esgrime como argumento que conviene ir concretando una secuencia de triunfos que pavimenten el camino hacia la elección presidencial.

Larreta presionado

La realidad es que el entorno de Macri presionó a Larreta y el resultado es una reforma legal que le permite a éste optar por una elección unificada o separada. Si el criterio que se impone es la unificación, el macrismo porteño incurriría en una seria contradicción, ya que no podrá utilizar el sistema de boleta electrónica que rige para la Ciudad porque regiría el sistema nacional, o sea, boleta de papel. Pero la necesidad de contar con la movilización del aparato del PRO en la Ciudad sería muy fuerte.

Las versiones que hablan de un probable desdoblamiento de la elección bonaerense abonan la postura de que se debe unificar la elección porteña.

Si hay unificación también se produciría otra consecuencia: sumando los cargos porteños más los nacionales, los cuerpos de boleta llegarían a siete. Esto es, candidatos a Presidente y Vice, Senador Nacional, Diputados Nacionales, Parlamentarios del Mercosur, candidatos a Jefe y Vicejefe de Gobierno, candidatos a Diputados de la Ciudad y candidatos a comuneros. Esta inédita concentración de cargos le daría a la elección en Capital un interés especial.

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