Por Jorge D. Boimvaser.-

Mauro Viale se quejaba con amargura de que las pautas oficiales de publicidad están impagas y no le dan fecha para cancelarlas.

A una productora televisiva, los voceros de Daniel Scioli le fueron recortando los pagos hasta estar seguros de que la publicidad del Banco Provincia fuera suficiente para que fuera el FPV y no CAMBIEMOS quien tuviera más minutos de pantalla. No decimos cuál es, porque el dueño de esa productora no lo quiere hacer público, pero se los dijo a sus trabajadores para explicarles por qué se demoraba el pago de sueldos.

Al final, entró en default y tuvo problemas con su cuenta bancaria. Los llamados a Scioli no dieron resultado; Danielito dijo que no sabía lo que ocurría con los pagos pendientes.

En algo se pusieron de acuerdo Scioli y los publicistas K: no van a ser ellos quienes paguen las millonarias pautas publicitarias.

Los cobros siempre se demoran entre 60 y 90 días, pero esta vez los responsables operativos de los pagos tienen la orden de no liberar cheques, salvo algunas pocas excepciones.

No es tanto falta de dinero sino un juego digno de lo mediocres que resultaron ser “los pagadores” del FPV.

Si ni Daniel Scioli se tiene confianza de ganar, ya se presiente que con ese panorama delante nadie pagará “la puta fiesta” antes del 10 de diciembre.

Hasta peligra el mega festival de despedida a Cristina que se estaba organizando para comienzos de diciembre.

Los Fito Páez y compañía no quieren actuar si no cobran sus honorarios antes de subir al escenario.

El gobierno esperaba dejarlos pendientes, como las pautas oficiales de publicidad, para que las pague Mauricio Macri si se impone en el balotaje.

Sería un trago amargo que CAMBIEMOS les cancele deudas a los Navarro, Brancatelli, Fito Páez y demás empleados del cristinismo.

Pero los artistas que “tanto aman a Cristina” no suben al escenario si no cobran antes.

¿Despedirla gratis? Jamás, el amor por la Presi no da para tanto.

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