Por Carlos Tórtora.-

La escalada del conflicto mapuche en territorio argentino se inició con los disturbios que rodearon la muerte de Santiago Maldonado y siguió su línea ascendente con el reciente enfrentamiento armado con la Prefectura. La estrategia de confrontación de la RAM en nuestra Patagonia es paralela a la serie de atentados realizados en los últimos meses por la CAM mapuche de Chile.

Distintos análisis de inteligencia convergen en que la principal causa del hiperactivismo del sector ultra de los mapuches es la visita papal a Chile que tendrá lugar entre el 15 y el 18 de enero próximo.

Para empezar, el viaje de Bergoglio está ya instalado mediáticamente alrededor de su intervención en dos grandes conflictos: la salida de Bolivia al mar y la crisis mapuche.

Una de las tres misas que Bergoglio celebrará en Chile será en Temuco, uno de los centros de la población mapuche. El 25 de octubre pasado una delegación de las comunidades mapuches chilenas se reunió con Francisco en el Vaticano para exponerle sus expectativas sobre el viaje. Uno de los voceros de la delegación de diez personas que charló con el Santo Padre, Aucán, no se anduvo con vueltas y señaló que le habían entregado a éste una carta en la que le solicitaba que se expidiera favorablemente a los siguientes puntos: “pronunciarse por el crimen de genocidio, tanto en Chile como Argentina, por parte del Ejército en la Pacificación de La Araucanía y en la conquista del Desierto respectivamente; y paralelamente la toma y confiscación de tierras en ambos países”.

Esto tiene relación con el revisionismo de la política seguida por el estado chileno contra los mapuches que viene intentando Michelle Bachelet desde principios de año. Ésta pidió perdón en nombre del Estado chileno por los “errores” y los “horrores” cometidos o tolerados por las autoridades, en un esfuerzo por bajar la tensión del conflicto. Además, anunció el Plan de Reconocimiento y Desarrollo para la región de La Araucanía, mediante el cual planea invertir más de 63 millones de dólares anuales para el desarrollo de infraestructura. Estos gestos de reconciliación, fuertemente cuestionados por buena parte de la sociedad chilena, son un presente griego que Bachelet le deja a su probable sucesor, el centroderechista Sebastián Piñera, que el domingo pasado debía, según las encuestas, llegar al 45% y apenas superó el 36%, enfrentándose ahora a un difícil ballotage.

Fuentes chilenas señalan que probablemente los mapuches estén buscando concesiones similares por parte del gobierno de Mauricio Macri, lo que, de suceder, desataría una enorme polémica.

Cuanto peor mejor

Siguiendo con interpretaciones que se vinculan con informes de inteligencia, tanto la CAM como su par argentina la RAM, mediante acciones de provocación a las fuerzas de seguridad, estarían intentando instalar mediáticamente que va en aumento la persecución estatal al pueblo mapuche. Esta victimización tomó vuelo cuando se dio por sentado que Santiago Maldonado había sido asesinado. Pero las pericias definitivas hicieron que la hipótesis de homicidio se desmoronara en poco tiempo. La muerte de Rafael Nahuel potencia ahora mucho más el conflicto y le permite a RAM victimizarse con mayor facilidad, ejerciendo así mayor presión sobre un pontífice que se caracteriza por acercarse a las causas de los pueblos originarios y las minorías. En este aspecto, el escenario político militar más importante para los mapuches paradójicamente no es Chile, donde estará pronto el Papa, sino Argentina, porque Bergoglio es argentino.

Si esta interpretación se correspondiera con la realidad, la escalada debería continuar en las próximas semanas apuntando a un fin de año caliente. De hecho, este último enfrentamiento con Prefectura se da en la zona de Bariloche, cuya densidad demográfica es muy superior a Esquel, en cuyas cercanías murió Maldonado. No sólo la repercusión política es cada vez mayor sino que el daño económico se haría sentir. Con grupos mapuches armados fuera de control, el turismo barilochense, uno de los más fuertes del país, podría reducirse seriamente en las próximas semanas si la zona se convierte en una especie de campo de batalla.

En términos de teoría leninista, cuantos más muertos tengan a manos de las fuerzas de seguridad más cerca estarían los mapuches de influir en el discurso de Francisco.

Share