Por Carlos Tórtora.-

La tesis expresada por Javier Milei en el coloquio de IDEA es simple y hasta tiene algo de mágico: dijo que no hay razones para preocuparse, porque se viene una ola de inversiones de U$S 50.000 millones y esto llevaría a una reactivación global de la economía. Pero lo cierto es que se carece de datos concretos sobre esta gigantesca movida.

Más realista estuvo en su exposición Federico Sturzenegger, que exhortó a los empresarios a movilizarse para colaborar con la baja del gasto público pero ni mencionó la palabra inversiones.

Algunos de los empresarios presentes en el coloquio deslizaron en privado que el presidente no está tomando en cuenta en sus análisis que muchos encuestadores ya señalan que el gobierno tendría serios problemas para ganar las elecciones. De ser así, es difícil que las inversiones se arrimen en un contexto de turbulencia política. Avalando estás críticas, una manifestación impresionante contra Milei se hizo sentir en Mar del Plata.

Los brotes verdes

De este modo se confirma lo que se viene registrando en las últimas semanas. En su desesperación para llegar a fin de año sin que la situación se descontrole, el gobierno está haciendo un gran esfuerzo para instalar que la economía ya está reactivándose.

La realidad es que hay una coincidencia entre la mayor parte de los economistas y es que en el último trimestre se registrarán algunos indicadores de reactivación muy leves y sólo para ciertos sectores, además de que no cabe esperar inversiones con la actual política cambiaria. O sea, todo lo contrario de lo que dice Milei.

De concretarse este pronóstico que es ampliamente mayoritario, el gobierno deberá arrancar con el calendario electoral en medio de una situación social explosiva.

Ahora todas las alarmas apuntan a lo que puede ocurrir en diciembre, un mes tradicionalmente con mayor inflación y en el cual las protestas sociales aumentan. La probable sinergia entre éstas y el movimiento estudiantil preocupa y mucho.

Mientras tanto, el mecanismo de contención montado por el gobierno continúa desajustándose. Ayer el titular de la UOM y secretario de interior de la CGT, Abel Furlán, sostuvo que la central obrera debe convocar urgentemente a su consejo directivo para delinear un plan de lucha. La CGT le dijo presente a Axel Kicillof en el acto por el 17 de octubre.

Ante la clara inclinación del peronismo a pasar a una oposición más activa, los libertarios se esfuerzan por intentar mostrar que suman algo de justicialismo. Así, lanzarían el próximo 28 “La Carlos Menem”, una agrupación que sólo exhibe como sus dirigentes a algunos funcionarios de Milei como Sebastián Pareja, Martín Menem y Rodolfo Barra, aparte de la infaltable Zulemita Menem.

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