El hijo de la presidenta Cristina Fernández, Máximo Kirchner (Dibujo: NOVA).

El hijo de la presidenta Cristina Fernández, Máximo Kirchner, será el comisario político que la primera mandataria eligió para completar el binomio presidencial que competirá en las elecciones presidenciales de octubre por el Frente para la Victoria y que tendrá en la figura de Daniel Scioli al candidato nacional. Según pudo saber NOVA de fuentes del partido, la decisión se tomó en las reuniones que se dieron este jueves y viernes previas al Congreso del Partido Justicialista.

La estrategia nació del riñón duro del kirchnerismo y fue expresada por Andrés “el Cuervo” Larroque y el mismo Máximo cuando se reunieron con el candidato a   vicejefe de gobierno porteño, Leandro Santoro, para aclarar la situación que se generó tras el conocimiento de sus tuits críticos con la gestión del kirchnerismo a nivel nacional.

El objetivo de la iniciativa es condicionar a Scioli durante su hipotética presidencia y tener en el poder a una persona de máxima confianza de Cristina una vez que ella se vea forzada a conducir el partido desde afuera de la gestión. De todas formas, el gobernador bonaerense deberá superar en las PASO de agosto, sin mayor dificultad, a Florencio Randazzo, Sergio Urribarri, Agustín Rossi y Jorge Taiana (excepto que alguno decline su candidatura, como pidiera la misma Presidenta días atrás).

Scioli ya conoce lo que es llevar un comisario político en su fórmula ya que en el 2011 fue electo gobernador de la provincia de Buenos Aires con Gabriel Mariotto como vice. Exponente de La Cámpora y principal referente de la nueva Ley de Medios, Mariotto obró casi como un opositor desde su despacho en la Casa de Gobierno durante los primeros momentos de la gestión, aunque, ahora, a pocos meses de que finalice el segundo mandato de Scioli en la Provincia, terminó jugando a favor de la candidatura presidencial de su superior.

Si bien la posibilidad de una fórmula Scioli-Máximo aún no fue confirmada desde el círculo de confianza del gobernador, y con tiempo legal aún para presentar las candidaturas ante el Tribunal Electoral, el hermetismo que rodea a Scioli alienta a que surjan versiones al respecto. (Agencia NOVA)

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