Por Carlos Tórtora.-

Este viernes Clarín publicó un extenso informe que se titula “Exclusivo Un espía detrás de Lagomarsino el día que murió Nisman, la nueva pista del caso”.

La investigación de 45000 llamadas que sigue haciendo la Unidad Federal de Investigaciones Especiales de la Policía Federal -son la nueva prueba en el caso Nisman y ya están incorporados al expediente que investiga la muerte del fiscal- Específicamente sobre el día de la muerte de Nisman, la investigación periodística pone el acento en un agente de la SIDE de nombre desconocido que habría estado investigando a Lagomarsino antes de que su cadáver fuera descubierto. Todos estos registros que sigue haciendo la Unidad Federal de Investigaciones Especiales de la Policía Federal- son la nueva prueba en el caso Nisman y ya están incorporados al expediente que investiga la muerte del fiscal, Mientras el espía se reportaba desde el barrio de Lagomarsino, el director de operaciones de la SIDE Pocino llamaba a Juan Martin Mena, subsecretario del organismo, 11 veces. Varios de esos contactos tienen una duración muy breve, de 7 u 8 segundos. Pero en otros mantienen conversaciones más extensas. A las 12.00 hablan casi 15 minutos; a las 15.48, cinco minutos y a las 16.16, 37 segundos. Todos los llamados son de Pocino hacia Mena y mientras los custodios de Nisman aún no habían subido a golpearle la puerta a éste.

Agrega Clarín que además de llamar a Mena, Pocino tiene también varias comunicaciones con Alberto Massino -director de Análisis de la SIDE que respondía a Antonio Stiuso- y con César Milani. Con éste habla a las 13.45 (casi 7 minutos) y a las 17.06 (94 segundos).

Las conclusiones políticas son relevantes. Pocino tenía relación directa con Cristina Kirchner, con la que había trabajado en la Comisión Bicameral de la AMIA y también Mena hablaba con la ex presidente. En cuanto a Milani, Pocino lo conocía desde que era coronel.

Del informe se deduce entonces que buena parte de la plana mayor de la SIDE estuvo en alerta en el horario en que murió Nisman y que el espía que trabajaba sobre Lagomarsino se reportó permanentemente. Así las cosas, la ex presidente, ante la cual se reportaba la SIDE, debería dar explicaciones sobre la inusual actividad de sus agentes mientras se producía la muerte de Nisman. Y mucho más por cuanto conducía la SIDE por ese entonces Oscar Parrilli, mano derecha de CFK.

Responsabilidades ascendentes

La aparición de la pista SIDE se produce luego de que el Ejecutivo, a través de la ministra de Seguridad Sabina Frederic, dio a conocer su intención de revisar la pericia de Gendarmería que dictaminó la causa de la muerte de Nisman como homicidio, mediante una nueva pericia oficial. También coincide la pista SIDE con el anuncio de Alberto Fernández de que participará el jueves próximo en el Foro Internacional de Líderes en Conmemoración del Día Internacional de Recordación del Holocausto y la Lucha contra el Antisemitismo, que se realizará en el Museo de Yad Vashem, de Jerusalén. Con este viaje el gobierno trata de minimizar el frente de tormenta que empezó a gestarse cuando, también a instancias de Frederic, trascendió que se derogaría el decreto de Mauricio Macri declarando a Hezbollah como organización terrorista-

Se supone que en los archivos de la AFI hay rastros de la operación sobre Nisman que realizaron Mena y Pocino y que la intervención a cargo de Cristina Camaño debe tener acceso a la información.

Justamente, de avanzar la justicia en la profundización de la pista SIDE, los hechos darían la razón a Alberto Fernández acerca de la necesidad de intervenir el organismo y de reestructurarlo.

También hay que tener en cuenta que Clarín, con el tono que le da a su informe, le está pasando otra factura a Cristina Kirchner.

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