Por Carlos Tórtora.-

El diputado Alfredo Olmedo y el economista José Luis Espert son los dos emergentes políticos que de algún modo pueden considerarse como los precandidatos presidenciales que más se asemejan al perfil de Jair Bolsonaro. El salteño, que hasta ahora sólo muestra como estructura partidaria a su partido Salta para todos, está al parecer decidido a usufructuar la actual diáspora peronista. En sus cálculos está la siguiente evaluación: Cristina Kirchner no dará marcha atrás en su candidatura y, si no varían sustancialmente sus números, le alcanza y sobra para llegar al ballotage, donde perdería ante Mauricio Macri.

Ante este panorama, los sectores peronistas anti K se encuentran por demás incómodos ante la perspectiva de tener que optar en la segunda vuelta entre la ex presidente y el actual. Así las cosas, Olmedo entendería que se dan las condiciones para un nuevo proyecto de poder que capte a amplios sectores del justicialismo en torno a la idea de romper la polarización entre CFK y Macri.

Un campo fértil

Con esta agenda de temas, Olmedo se reunió recientemente con Eduardo Duhalde. Este último está convencido de que, si el peronismo no se unifica a través de un candidato de consenso (propone a Roberto Lavagna), se produciría la dispersión de sus votantes. La iniciativa de un candidato extrapartidario que movilice al votante independiente caería bien en distintos sectores del PJ, que ven el debilitamiento de Sergio Massa, la falta de iniciativa de Juan Manuel Urtubey y la carencia de peso propio de Felipe Solá como señales de la debilidad del peronismo antikirchnerista.

En los próximos días, Olmedo mantendría reuniones con grupos de dirigentes peronistas de varias secciones de Buenos Aires, acariciando el sueño de arrastrar una parte del voto peronista.

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