Por Guillermo Cherashny.-

La presentación de Mario Quintana, el verdadero jefe de gabinete de ministros, a los cuales los controla férreamente, hizo su presentación, aunque no fue la primera, en A dos voces y su exposición fue un conjunto de mentiras y chicanas que demostraron la improvisación económica del gobierno, que carece de un plan económico.

Al criticar a Roberto Lavagna utilizó un argumento kirchnerista, cual fue decir que el ex ministro, al decir que hay atraso cambiario, está pidiendo que bajen los salarios reales.

Pero no terminó ahí; dijo que lo único que prometió el gobierno es bajar la inflación al 1,5% mensual el último trimestre y que nunca dijeron que crecería la economía, y otras mentiras más.

Y decimos que es el jefe de gabinete real porque Marcos Peña en realidad es ministro de comunicación estratégica y manda sobre todos los voceros ministeriales, a los cuales les dice que no miren tele ni lean diarios.

Pero lo más grave de las declaraciones de Mario Quintana no fue que vive alejado de la realidad sino que, ante una pregunta sobre si algunos ministros podrían ser desplazados en Chapadmalal, dijo: «Esperemos que alcance el combustible y lleguemos todos», en un acto de humor negro sobre la tragedia del equipo de fútbol de Chapecó.

Share