Por Sebastián Dumont.-

La marcha anunciada para este viernes de los sindicatos de todas las centrales obreras para conmemorar el día del trabajo genera ya broncas internas debido a la confirmación que de la misma participarán dirigentes políticos del Frente para la Victoria e incluso podrían aparecer integrantes de La Cámpora. Para un sector del sindicalismo, convertir la movilización en un acto político partidario es un error.

La unidad del movimiento obrero parece encaminarse más temprano que tarde. Sin embargo, el acto por el día del trabajador, que se llevará a cabo este viernes, genera tensiones internas. Hay muchos dirigentes sindicales que creen válidos los reclamos pero que no ven con buenos ojos quedar pegados al Frente para la Victoria. El anuncio de que muchos de ellos participarán no cayó bien en varios hombres del sindicalismo.

Hugo Moyano, Luis Barrionuevo y Antonio Caló son las caras visibles más importantes de la movida. En los últimos días, el líder camionero levantó el perfil y criticó a Macri y también a Sergio Massa, por su postura con relación a la ley antidespidos, que ya tiene media sanción en senadores. Detrás de estos dichos, se observan otros movimientos del líder camionero. No son pocos los que recuerdan su activismo durante el gobierno de Fernando de la Rúa, que se aceleró a partir de la sanción de la “Ley Banelco” de flexibilización laboral. Con más años y experiencia encima, Moyano no pierde las mañas.

Lo que en principio iba a ser una acto para reivindicar a los trabajadores y dar una señal inequívoca de unidad sindical, puede sufrir un traspié. Al menos en la voluntad de muchos de ellos de acompañar y quedar pegados con La Cámpora.

A hombres como Luis Barrionuevo, que tiene un perfil anti K muy definido, no le cae en gracia que tenga que bancarse a los camporistas en el escenario. Hay que ver si alguno de ellos se anima a ir. Sí han confirmado su participación los integrantes de la nueva cúpula del PJ, donde Caló es uno de los vicepresidentes.

También se especula con que podrían participar intendentes del conurbano con movilización incluida. A tres meses de haber asumido el nuevo gobierno, muchos dirigentes sindicales creen que aún no es tiempo de mostrarle los dientes de manera tan abierta. Mucho más teniendo en cuenta que el gobierno puede dar curso a algunas de las peticiones que pide el sindicalismo.

En este contexto, la foto que arroje el escenario hoy será clave. Puede darle aire a Moyano para quedar como uno de los referentes de la oposición a Macri y no como líder importante del reclamo obrero.

Share