Por Oscar Edgardo García.-
Las recientes disputas que tuvieron como actores principales a Javier Milei, Patricia Bullrich y Victoria Villarruel son lisa y llanamente degradantes desde el punto de vista institucional, demostrativas de una preocupante pobreza intelectual, que sólo contribuyen al divisionismo político, el odio y el resentimiento.
La malevolencia puesta en evidencia con prepotencia por estas importantes figuras del gobierno nacional son un desprecio del tiempo que deberían destinar para la solución de los serios problemas que existen en el país e inconducentes para la construcción de un próspero futuro para sus habitantes.
Todos ellos, pero principalmente el Presidente de la Nación, deberían reflexionar sobre sus conductas sociales y desistir en el futuro de llevar a la práctica un matonismo que no es aceptable en el ejercicio de sus funciones porque es propio de la violencia callejera, caracterizada por la intimidación, la agresión, el acoso y el patoterismo.
14/07/2025 a las 12:56 PM
Está todo dicho
14/07/2025 a las 1:27 PM
Comparto plenamente esa visión
15/07/2025 a las 12:52 AM
ESTAMOS DE ACUERDO, PERO SER MALEDUCADO,
ES MENOS GRAVE QUE SER TRAIDORA.
15/07/2025 a las 9:40 AM
La traición es un problema entre ellos mientras que la mala educación, la grosería y la pelea callejera afecta a la institucionalidad y eso es más grave que la pedorra relación entre Milei y Villarruel.
15/07/2025 a las 1:34 PM
DON MORANO, NO ES UN PROBLEMA ENTRE ELLOS, ES UN PROBLEMA NACIONAL.
A USTED PARECE QUE NO LE SUBE EL AGUA AL TANQUE, NO SE DA CUENTA EL PERJUICIO QUE CAUSO «MORTICIA».
15/07/2025 a las 5:54 PM
Bueno, si a mí no me sube el agua al tanque es un problema menor con respecto al suyo que no le llega la sangre al cerebro. Cuídese. Cordiales saludos.
15/07/2025 a las 11:03 PM
HAY GENTE QUE NO SABE DISCUTIR, SE ENOJA AL PRIMER INSULTO !!