Por Carlos Tórtora.-

La reunión de Javier Milei del viernes pasado con diputados de La Libertad Avanza y el PRO no habría fructificado en ninguna política de contención del Congreso. Más bien lo contrario. En el Senado, hubo nuevos retoques al proyecto de Boleta Única y varios senadores radicales estarían a punto de retirar su voto afirmativo, lo que podría hacer que el oficialismo no cuente con los 37 votos necesarios para la sanción.

Mientras tanto, en la cámara baja, un numeroso grupo de afiliados radicales atacaron por inconstitucional y autoritario el nuevo DNU que restringe el acceso a la información pública. Mientras tanto, un Senado bastante crispado por el veto a la ley de movilidad jubilatoria, optó por diferir que haya sesión por Boleta Única, Financiamiento universitario y DNU de la SIDE el próximo jueves, aunque algunos creerían que se postergará aún más.

Sin rumbo

La realidad es entonces que el Congreso está en la práctica rebelado contra el presidente y lo demuestra cada vez que puede. Es una pésima señal para el tratamiento de la Ley de Presupuesto, que ingresará a mediados de este mes. Casi como ironía, Milei hizo trascender que iría personalmente al Congreso a presentar el proyecto de ley de presupuesto. Esto, en las actuales circunstancias, parece un disparate.

En el entorno presidencial impera a todo esto un clima tenso. Todos esperaron en vano durante agosto que se insinuaran indicadores positivos de reactivación pero ocurrió lo contrario.

Los crujidos internos en La Libertad Avanza se sienten cada vez más, mientras se suceden las denuncias por corrupción. En este ambiente degradado, se habla de que Yuyito González sería candidata a Diputada Nacional mientras que Lilia Lemoine oficia de vocera de la Casa Rosada.

Un Milei sin rumbo, anclado en la negación de la realidad, repite hasta el hartazgo la fórmula de atacar y descalificar a todos los que no le obedecen.

Una de las pocas expectativas favorables que tiene el gobierno es que el peronismo ingrese en una interna salvaje entre cristinistas, algo muy poco probable.

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