Por Carlos Tórtora.-
La semana pasada, teniendo ya señales de que la cena con Javier Milei sería un fracaso político, Mauricio Macri lanzó la amenaza que más temería el presidente: dijo que el PRO se prepara para postular un candidato a presidente en el 2027. La posibilidad de que se divida el voto de derecha y que entonces el peronismo pueda ganar en primera vuelta es una pesadilla para el círculo presidencial. Y para evitar que se produzca este escenario, Karina Milei y Martín y Lule Menem estarían ya construyendo un esquema que termine de licuar el voto macrista.
La jugada en preparación más importante es el lanzamiento de Diego Santilli como candidato a gobernador. La expectativa libertaria es que el nuevo ministro del Interior, que carga con un confuso pasado peronista, consiga dividir a Fuerza Patria captando a algunos intendentes justicialistas del conurbano. Se trataría entonces de una operación inversa a la que se intentó con José Luis Espert. Es decir, no reducir todo a la dialéctica peronismo-antiperonismo sino tratar de romper el armado kirchnerista.
Otro capítulo importante del plan en marcha sería que el nuevo Jefe de Gabinete también dé el paso al frente y vaya por una segunda victoria, en este caso como candidato a Jefe de Gobierno de la Ciudad. Adorni sí encabezaría una alianza netamente antiperonista.
Como premio consuelo, Karina le ofrecería al PRO la vicejefatura de gobierno y varias diputaciones locales.
Aunque este tema el gobierno no lo podría blanquear todavía, la flamante senadora electa Patricia Bullrich tendría a su cargo el plan para neutralizar al PRO en el Senado. Bullrich ya estaría conversando con algunos senadores macristas para que abandonen el bloque del PRO y se pasen a la Libertad Avanza. Sería una operación replicada de la que Bullrich acaba de hacer con siete diputados nacionales del PRO la semana pasada. Como premio por su maniobra, Bullrich aspiraría a ser la futura vicepresidenta de Milei.
La impotencia de Macri
La realidad es que mientras Luis Caputo mantenga la situación económica bajo control, Macri bien poco podría hacer para evitar que Milei licue por completo al partido amarillo. Otro alfil del presidente pero aún embanderado en el PRO, Cristian Ritondo, también entraría en el nuevo plan. Al igual que Santilli, Ritondo continúa apareciendo como un operador de Macri aunque nadie duda de que su verdadera terminal es Milei.
Así es que Ritondo podría aterrizar finalmente en el gobierno como Ministro de Seguridad o titular de la SIDE, donde languidece sin ningún éxito Sergio Neifert.
Cómo es lógico, este plan podría ir sufriendo modificaciones sobre la marcha. Pero de lo que Milei estaría convencido es de que Macri, pase lo que pase, no romperá con el gobierno, porque no estaría dispuesto a pagar los costos de semejante aventura.
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