Por Guillermo Cherashny.-

El sábado pasado, Elisa Cárrió, en La Noche de Mirtha dijo que no le gustaban algunos ministros del Presidente electo y señaló que hablaría con Macri en privado pero le mandó un aviso por la televisión y nombró a Daniel Angelici, el presidente de Boca Juniors, quien en su Comisión de Seguridad tiene a los fiscales Stornelli, Plee y Pollicita y también al juez federal Ariel Lijo.

Es cierto también que Angelici tiene influencia en la Justicia y en el Consejo de la Magistratura de la Ciudad tiene una influencia importante y Germán Garavano, Ministro de Justicia designado, le responde, pero nadie duda de sus excelentes condiciones en derecho penal, ya que escribió en una nota Clarín. Tiene las mismas propuestas de Sergio Massa, es decir, congelar y modificar el Código Procesal Penal y modificar el Código Penal. También el Ministro de Justicia designado en la Ciudad, Martín Ocampo, un radical como Angelici, que militó en la parroquia sexta que lideraba Juan Trilla, donde Angelici fue asesor y, mientras estudiaba Derecho, respondía al «Coti» Nosiglia pero después se unió al PRO y formó un grupo de radicales que lo siguen, como Laura Alonso, la diputada nacional. De Nosiglia se podrán decir muchas cosas buenas y malas, pero nunca se dedicó a perseguir opositores en la Justicia las veces que tuvo poder. Daniel Angelici tampoco lo hizo en la Ciudad y las relaciones del presidente de Boca son con los organizadores del #18F, es decir, los fiscales que homenajearon masivamente a Alberto Nisman y que se oponen al manejo militante de Gils Carbó. De ahí que Angelici quiera manejar la justicia sea disparate total. Es muy probable que Macri le encomendara al Coti Nosiglia que proponga a un radical para comandar la AFI y sería el senador chubutense Mario Cimadevilla, cuyo mandato vence el 10 de diciembre y que estuvo en el Consejo de la Magistratura nacional. La suposición de Carrió de que Angelici interviene en la Justicia es otro disparate, ya que si se deja que Comodoro Py se auto-regule, ningún ex funcionario ni Cristina irán presos, sino que abogados penalistas y jueces federales se harán millonarios en dólares.

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