Por Carlos Tórtora.-

La mayor parte de las encuestas reflejan que el crecimiento de Javier Milei es sostenido, sobre todo en la franja etaria de menos de 40 años y en los grandes centros urbanos. Los más optimistas seguidores del economista liberal especulan hasta con que podría superar al Frente de Todos y llegar al ballotage con Juntos por el Cambio. De ser así, estaríamos frente a la reconfiguración de todo el mapa político. Pero desde JxC surgen otros análisis que apuntan a que el crecimiento de Milei en las encuestas luego no se reflejaría exactamente en los votos. Esto quiere decir que sumaría menos votos que lo que su puntaje indica. Las causas de esto serían múltiples. Para empezar, La Libertad Avanza no cuenta con estructuras partidarias con peso territorial. Esta es la situación del Partido Demócrata o de la Unión Celeste y Blanca, los dos baluartes del libertario. A lo anterior habría que sumarle el déficit que por ahora tiene Milei en materia de organización política. ¿Podrá, por ejemplo, contar con los 32.000 fiscales de mesa necesarios para que no se evaporen en el escrutinio provisorio los votos de la provincia de Buenos Aires? ¿Contará Milei con un aparato de dirigentes y punteros capacitados para pelear voto a voto en los 24 distritos? El precio que podría pagar por estas carencias sería la pérdida de unos cuantos puntos. Cabe recordar que el PRO tardó una década para expandirse desde la Capital hacia el interior y que todavía tiene escasa gravitación en la mayor parte de los distritos. El crecimiento aluvional del economista libertario sería entonces defectuoso por carecer de estructuras políticas sólidas que le den efectividad política.

Los barones del conurbano

Ahora bien, así como estos cuestionamientos ponen en duda que los números de la Libertad Avanza se traduzcan exactamente en votos, también surgen -en este caso en el peronismo- otros análisis que indicarían lo contrario. Por ejemplo, hay fuentes que señalan que los barones del conurbano están más que preocupados porque los números actuales del FdT muestran que muchos perderían sus feudos. En la reacción desesperada, no hay que descartar que unos cuantos intendentes, para salvarse, repartan masivamente sus boletas locales junto con la de Milei presidente, sumando con esto los puntos necesarios para su reelección.

Como se ve, hay distintas interpretaciones acerca de si Milei podrá dar el batacazo en las PASO del 13 de agosto para luego consolidarse en las generales de octubre.

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