Por Orlando Agustín Gauna.-

Con falaces argumentos, se está enjuiciando al probo Dr. Luis María Vera Candioti en la Ciudad de Santa Fe.

Con la llegada del kirchnerismo, se inició el “negocio de los Derechos Humanos”, que se incrementó con la imputación de un “plan sistemático de apropiación de bebes”.

Según refieren las “abuelas de Plaza de Mayo”, superan el centenar, las personas, hijas de “desaparecidos”, que han recuperado su identidad. Pero menos del 10 % de los «apropiadores» de esos “nietos recuperados”, fueron sometidos a juicio. ¿Por qué?

Hasta se intenta evitar someter a juicio a los “apropiadores” de quien se dice que es nieto de la Sra. Estela de Carlotto.

A la vez, se silencia que muchos militantes de las organizaciones terroristas, refugiados y adiestrándose en Cuba, dejaron a sus hijos en casas que servían de guarderías, para retornar a nuestro país en las denominadas “contraofensiva” de los años 1979 y 1980, donde la mayoría de ellos perdieran la vida.

También se silencia que durante el cruento enfrentamiento que se produjo el 19 de enero de 1977 en el edificio ubicado en Ituzaingó y Las Heras de la Ciudad de Santa Fe, y cuando aún se resistía a tiros Osvaldo Ziccardi (a) Cholo; personal militar, a riesgo de su propia vida, rescató del fuego cruzado a dos niños, hijos de Ileana Gomez, (a) La Negra, la que había sido abatida cuando intentaba escapar del lugar disparando con un arma de fuego. Uno de los niños fue entregado a la familia de la occisa y el otro a los familiares de su progenitor, Jorge Piotti, (a) Pelado, también caído en el enfrentamiento.

En febrero de 1977, en Castelli 4531 de Santa Fe, donde se guarecían los militantes terroristas Enrique Cortassa y Blanca Zapata con su pequeña hija María Carolina, además de Cristina Ruiz de Ziccardi, con sus hijitos Ramón y Hernán Ziccardi; se produce un operativo en procura de capturar a los mayores, que se resisten a tiros y son abatidos. De este hecho, se denuncia que María Carolina es víctima del “plan sistemático de robo de bebes”, y en la causa se imputa al Dr. Luis María Vera Candioti, por entonces, Juez de Menores, pero se silencia que Ramón y Hernan Ziccardi, fueron inmediatamente restituidos a sus familias.

Por eso, cuando desde los Poderes del Estado, ante tantas falacias, se viola la Constitución Nacional y el principio de irretroactividad de las leyes, donde se pretende juzgar a determinadas personas por delitos inexistentes o por delitos reales que han prescripto; a los ciudadanos solo nos queda la palabra.

Entonces, bien caben las palabras de Martin Luther King: “No me duelen los actos de la gente mala, me duele la indiferencia de la gente buena.”

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