Por Juan José de Guzmán.-

Así como Julio y el polaco fueron si no los más, dos de los más reconocidos cantores de nuestra música ciudadana (Gardel al margen), Eduardo y Cecilia, lo fueron en su forma de abrazar los valores éticos que decidieron defender cuando eligieron estudiar Derecho, una característica natural en la juventud, que persigue ideales, que son los que le dan sustento al deseo de trascendencia que los guía desde sus primeros pasos hacia la adultez.

Hay un hilo conductor, y no es el tango, el que une a Eduardo Sosa con Cecilia Goyeneche. Ambos fueron fiscales y lucharon primero contra la corrupción, en Santa Cruz y Entre Ríos y, a posteriori, contra la injusticia, cuando fueron removidos de sus cargos, por los Kirchner (Sosa) y por el Tribunal Superior de justicia de Entre Ríos, afín al entonces gobernador Urribarri (Goyeneche), a quien no le perdonó que con su accionar el corrupto ex gobernador terminara preso luego de ser destituido tras la condena.

El Procurador Sosa, a pesar de los 3 fallos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que ordenó que debía ser restituido en el cargo con todas sus funciones no logró hasta el momento que el gobierno santacruceño acatara la orden del supremo tribunal.

A 30 años de que el entonces gobernador Kirchner impulsara la sanción de una ley provincial que eliminaba el cargo de Procurador General del organigrama judicial de Santa Cruz, el actual gobernador (Vidal) impulsa un proyecto de ley para reponerlo en el puesto (recordemos que, al ser eliminado el cargo, el Dr. Sosa, que estaba investigando el manejo de los fondos que la provincia había recibido por regalías mal liquidadas quedó automáticamente fuera de funciones). Es un soplo de aire fresco esta noticia que recogieron los medios, hoy.

Es de esperar que la medida no sea caratulada como “lawfare” si el Procurador Sosa puede retomar aquella investigación iniciada hace 3 décadas.

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