Desde que ganó el Presidente Macri, hemos escuchado toda la mala onda y mentiras posibles de parte del 97% de periodistas y 100% de opositores. No voy a entrar en la abrumadora mediocridad que representan, porque las urnas y la audiencia lo dicen todo. Pero sí quiero dar una explicación sobre algo que esa gente aún no comprende:

  • El por qué gano Macri y seguirá ganando.
  • Lo que significa la devastadora falta de Justicia.

Entre el #SiSePuede y la Resignación. Consciente & Subconsciente

Para la neurociencia, la personalidad está formada antes de los 30 años. Quiere decir que nuestros circuitos neuronales están listos para enfrentar cualquier situación y, por lo tanto, vamos a pensar, sentir y actuar de la misma manera el resto de nuestros días.

¿Por qué?

Porque el subconsciente, que representa el 98% de nuestro cerebro, es el software de la computadora cerebral, el centro de comando donde que se descargan desde nuestra infancia todos los PP (Patrones-Programas) que conforman nuestros circuitos neuronales, ergo, nuestra personalidad.

Es allí donde quedan grabados los Patrones-Programas de pensamientos, sentimientos, emociones, reacciones, comportamientos, traumas, frustraciones, etc., tanto heredados como adquiridos del entorno, y que manejarán lo que pensaremos, haremos y sentiremos, el resto de nuestras vidas; y cualquier evento que nos haga recordar esos Programas descargará una actualización automática. Para peor, cuanto mantenemos los mismos Patrones por largo tiempo, más fuertes se hacen esas conexiones neuronales y más difícil nos resultará cambiar.

El consciente representa sólo el 2% de nuestro cerebro, y es donde están nuestros pobres y débiles deseos, aspiraciones, sueños y voluntad. Así que, aunque conscientemente queramos ser felices, tener plata, trabajo o ser exitosos, si nuestros PP (Patrones-Programas) están programados para otra cosa, no lo lograremos tan fácilmente.

El 2% consciente y voluntarioso quisiera cambiar para no tener siempre los mismos problemas, emociones y reacciones que no quisiéramos volver a vivir. Pero si no sabemos cómo hacerlo es como tratar de eliminar los programas o las actualizaciones de la PC diciendo: ¡Para! ¡Deja de hacer eso!… Imposible que la PC nos haga caso…

Enfrentamos una lucha entre el 98% de respuestas automáticas disparadas desde el programado y muy entrenado subconsciente, contra el 2% de deseos, sueños y aspiraciones conscientes y voluntariosas. ¿Quién creen que gana?…

Ésta es la respuesta de por qué nos cuesta tanto cambiar. Es una lucha muy desigual.

También explica por qué “no vemos la realidad como es sino como somos”. La vemos, comprendemos, vivimos y reaccionamos según los Programas-Patrones que tengamos instalados.

Ahora bien, ¿qué significa y a qué voy con todo esto?

Cada vez que pensamos, fabricamos neuroquímicos. Si tenemos pensamientos de infelicidad nos sentiremos infelices. Cuando empezamos a sentirnos de la manera en que pensamos, empezamos a pensar de la manera en que sentimos. Es un círculo vicioso. Nuestro organismo se acostumbra al nivel de sustancias químicas que producimos; circulan por nuestro torrente sanguíneo e inundan nuestro cerebro y nos convertimos literalmente en adictos a los pensamientos, emociones y comportamientos que esos químicos nos provocan. Y al menor cambio, nuestro subconsciente hará todo lo que esté a su alcance para restaurar el equilibrio químico acostumbrado y no sentir abstinencia.

Es cuando el cuerpo manda sobre la mente como ocurre con cualquier adicción. Y lo peor es que esos Patrones-Programas se heredan convertidos en creencias.

De este modo, si una familia tiene Patrones-Programas de POBREZA heredarán esos patrones de creencias, pensamientos y sentimientos a sus hijos, éstos a los suyos y así sucesivamente. Porque sus PP y continuas descargas químicas son los de ADICTOS a la POBREZA.

Si una persona ha sufrido mal trato, abusos, falta de respeto o de amor; hay muchas probabilidades de que, cuando su hija elija un compañero, sea tan abusador como su padre o abuelo. Y si logra liberarse de él, elija otro que resulte tan o más abusador que el anterior. Porque el Programa-Patrón emocional instalado en el software-subconsciente la llevarán a buscar a quien le produzca los mismos neuroquímicos que sus PP ordenan y a los que su organismo es adicta. Sus Patrones-Programas emocionales son los de ADICTOS al MALTRATO.

También si en una familia hubo fracasos comerciales, laborales o académicos se heredarán esos PP de pensamientos, creencias, sentimientos y reacciones y también fracasarán. Y así con cada Patrón-Programa. Así que si no cambiamos por nosotros, al menos deberíamos hacerlo por nuestros hijos.

ESTO ES LO QUE EL PERONISMO LES HA HECHO A LOS ARGENTINOS POR MÁS DE 7 DÉCADAS.

A partir de que el Peronismo instalara en el subconsciente colectivo de los argentinos Patrones-Programas de sumisión, dependencia, pobreza, ignorancia, violencia, despotismo, obediencia, clientelismo, resignación, y demás devastación por más de 70 años; a través de la repetición constante de relatos que se trasformaron en creencias, especialmente llevados a cabo mediante el adoctrinamiento de los más jóvenes (nada es casual); han elegido una y otra vez a los mismos depredadores, con distintos trajes. Estos PP también explican por qué desde 1928 ningún presidente de otro partido ha podido terminar su mandato.

La gente decía: “El peronismo es el único que sabe y puede gobernar. Las cosas son así. Es lo que hay. Todos los políticos son iguales. Todos los políticos roban. Esto nunca va a cambiar. Acá nadie va preso”, etc. Y como el cerebro no cree en algo que no haya experimentado, o haya sido descargado en su software-subconsciente, estas frases prueban que todos los peronistas han sido y son iguales.

La resignación y el desamparado frente a los políticos y punteros peronistas que se hacían millonarios frente a las narices de la gente a la cual esclavizaban mientras sólo les restaba seguirlos como perritos callejeros rogando que les tiren una migaja, ha sido el Patrón-Programa descargado por el peronismo en el inconsciente colectivo de los argentinos.

Pero entonces, ¿cómo pudo haber ganado Macri, y por qué sigue y seguirá ganando?

Simple: Se llama confianza y esperanza. La gente percibió (y percibimos con el subconsciente) que Macri dice la verdad. Y no menor, que no es tóxico, no enferma, tiraniza, envenena ni esclaviza.

Todos los grandes de la historia, Mandela, la Madre Teresa, Martin Luther King, William Wallace, Mahatma Gandhi, nos han regalaron un sueño de libertad, paz y justicia. Producen un verdadero cambio como hace Macri contagiando que SÍ SE PUEDE pensar, actuar y vivir de forma diferente. Logran entrar en los Patrones-Programas y los modifican gracias a quienes son. A su persistente ejemplo de coherencia entre lo que dicen y lo que hacen (no se viste de pobre para las campañas). Y una vez logrado esto, no hay vuelta atrás en la historia; la cambian.

Un verdadero líder sabe que no es omnipotente. Por eso el Presidente dijo: ”No me dejen solo”. Macri tiene muy claro que ningún hombre puede solo. Siempre necesitamos de los demás, y de que cada uno haga su mejor parte para llevar adelante un sueño colectivo. La gente lo entendió, y por eso, tarde lo que tarde y cueste lo que cueste, lo acompaña.

También comprendieron que Macri es el único verdaderamente capacitado para sacar este país adelante. La gente SABE que Macri SABE. Saben que no es un chamuyero vende humo como todos los responsables del desastre que dejaron desde hace 30 años. Ven por primera vez un Presidente capaz y un equipo preparado.

Y una vez que comprueban que ese cambio es realidad, que por primera vez les hacen cloacas, les dan agua potable, calles asfaltadas, rutas, puentes, gas, luminarias. Que por primera vez tienen créditos a 30 años para comprar su casa. Que por primera vez se están haciendo las obras para que dejen de inundarse y perderlo todo. Que los miran a los ojos, los respetan, les hablan con verdad y cumplen la palabra, se sienten respetados como jamás lo han estado, confiados y esperanzados con la posibilidad de vivir dignamente. Porque por más PP negativos que tengamos y nos cueste el cambio, siempre nos cuesta menos acostumbrarnos a lo bueno que a lo malo.

¿Y la justicia?

“A los enemigos ni justicia”. Ésta es otra de las devastadoras consecuencias que aún padecemos del tóxico y enfermante Peronismo. La falta de justicia provoca la más alta y negativa descarga de neuroquímicos tóxicos que pueda existir.

¿Por qué?

Porque el hombre sabe desde la noche de los tiempos que la justicia es el último recurso, la última posibilidad de protección y amparo que pueda tener el ser humano frente al mal, las injusticias. Es el Patrón-Programa más antiguo de toda la humanidad y, mientras existan las sociedades como tales, nada ni nadie podrá modificar ese sentimiento, porque las sociedades se basan en ello.

Cada día que pasa sin justicia, y cada momento que lo recordamos, nuestro cerebro fabrica torrentes de neuroquímicos venenosos de desprotección, impotencia, dolor, furia, odio y desamparo que descarga en nuestro organismo. Porque el cerebro no reconoce la diferencia ente a la vivencia y el recuerdo, así que tanto cuando vivimos las situaciones como cuando las recordamos fabricamos y descargamos los mismos químicos.

De allí el visceral y creciente rechazo hacia los Kirchner y sus esbirros, que han literal y científicamente enfermado a la sociedad con su devastación tóxica.

Y de allí el visceral y creciente rechazo que está provocando en la gente la falta de justicia. Porque sabemos inconscientemente que sin ella no hay sanación posible.

Como vemos, los pensamientos, emociones, sentimientos, palabras y acciones negativas literalmente nos enferman. Las mentiras, falta de respeto, subestimación, injusticias y la falta de justicia nos enferman. Pero también los pensamientos, palabras y acciones; la coherencia, la verdad, el respeto y la justicia pueden sanarnos.

Mauricio Macri lo sabe, y está llevando a cabo la más grande transformación en 100 años. Lo que ya logró es lo que muchos llaman milagro. Y seguirá cambiando los PP tóxicos y enfermos de indefensión, resignación, frustración y desesperanza de la conciencia colectiva, por los de una sociedad sana y saludable indispensable para un verdadero desarrollo.

Lo verdaderamente trascendente de la Presidencia de Mauricio Macri no está en que después de 100 años este haciendo cloacas y dando agua potable. Ni en cuál será el nivel de su éxito en lo económico, institucional o lo rápido que lo haga. Lo verdaderamente trascendente, el antes y después del Presidente Mauricio Macri, es que está sanando al país gracias a que está sanando a su gente.

¡Hagámoslo juntos!

Alesia Miguens

Obras en ejecución desde la asunción del Presidente Macri:

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Gestión Mauricio Macri Presidente:

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