Por Guillermo Cherashny.-

El caso de la empresa española Isolux Corsán y su relación con la bitácora de la corrupción con la energía basada en el gas es muy curiosa, ya que mientras su dueño Luis Delso más conocido como «El Cabrón» negoció con Julio de Vido y por ende con Néstor Kirchner, el contrato de construcción del yacimiento de carbón de Río Turbio por 1500 millones de dólares, de los cuales la friolera de 1000 millones era el sobreprecio. Luego Delso empezó a tener problemas en España, aunque giró gran parte del sobreprecio a la península y, con problemas con los acreedores, finalmente quebró y la empresa Isolux quedó en manos de bancos. Pero la filial argentina tenía vida propia, dirigida por Juan de Goycoechea, un abogado cordobés, puso los huevos en otra canasta y en 2010, asociado con IECSA de Angelo Calcaterra, obtuvieron en el 2010 la construcción de las usinas de ciclo combinado de Brigadier López y Ensenada Barragán, que debían terminar en el 2014. Pero hicieron menos de la mitad, aunque cobraron 600 millones de dólares, y en 2015 aportaron para las campañas de Macri y Scioli respectivamente y en 2016. Con menos de la mitad de la obra reclamaron al gobierno de Macri la suma de 500 millones de dólares, para arreglar por 1600 millones de pesos que fueron pagados por Hugo Balboa, presidente de Enarsa y firmada por Juanjo Aranguren y el presidente Macri a pesar que tenían incumplimientos por 1500 millones de pesos, por lo cual se debían compensar las respectivas acreencias. Pero sólo cobraron de Goycoechea y Calcaterra. Unos meses después, Goycoechea recibió de Julio de Vido cuatro parques eólicos que en 2017 se los vendió a Gianfranco Macri, quien los revendió al grupo Genneia ganando en el pase 48 millones de dólares. Es decir, Goycoechea conseguía las obras con De Vido y luego negociaba los retornos con Roberto Baratta, como dicen los cuadernos Gloria. Pero como se ve, los negocios los repartía con la familia Macri-Calcaterra, comprando, según creía, una alta cuota de impunidad. Sin embargo, un chofer de Baratta lo enterró en la justicia. El problema es que, si se quiere arrepentir de Río Turbio, ya hay una causa que tiene el juez Luis Rodríguez, donde está preso De Vido y prófugo Luis Delso, pero si quiere zafar de los cuadernos tiene que hablar de sus negocios con Calcaterra. ¿Lo hará? ¿O Stornelli y Bonadío no tienen en sus planes incluir a Calcaterra en la causa?

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