Por Otto Schmucler.-
La oposición desde el primer día y ahora el gobierno (en una ciega lucha de hostilidades) están enfrascados en una cruel batalla de mezquindades cuya víctima principal es “la gente”.
Es así que los dirigentes que “protegen a los necesitados” los envían a la calle (tomándoles lista de asistencia) para que las cámaras de los noteros los muestren por televisión.
Del otro lado de la disputa, la ministra Pettovello redobla la apuesta y también en la calle, cara a cara, les dice que ella en persona va a atender cada uno de sus reclamos, no así los de los dirigentes sociales.
Entonces, como respuesta, estos vuelen a las calles (al lugar donde trabaja la ministra) generando una fila de más de 20 cuadras para que cumpla con su promesa de atenderlos a todos.
Pero sucede que ella está en otro lugar (cumpliendo con sus funciones) y, ante la requisitoria de los periodistas, responde que “ella no los había convocado aún, que si estaban allí era por la orden de los dirigentes, no por un llamado suyo”.
Y tal vez esta novela no concluya aquí y se le sumen nuevos capítulos.
En el medio de este miserable juego de poder, está la gente que, con sus necesidades a cuestas, obedece lo que les mandan que hagan “sin recibir soluciones de ninguno”.
¿No será hora de que detengan este jueguito macabro y piensen que la mitad de los argentinos se hallan en la pobreza y es necesario prestarles atención urgente ?
Antes de que sea demasiado tarde.
06/02/2024 a las 3:09 PM
Los responsables son los gerentes de la pobreza, que han convertido a millones en rebaños de menesterosos obedientes.
06/02/2024 a las 9:42 PM
A TODOS ESOS SALAMES QUE VAN HASTA EL MINISTERIO A
MANGUEAR COMIDA, HAY QUE REDIRECCIONARLOS HACIA
LA CALLE JUNCAL Y QUE LA MANGUEEN A LA YEGUA QUE
VIVE AHÍ, Y QUE COBRA CATORCE MILLONES DE JUBILACIÓN.
07/02/2024 a las 12:55 PM
La gente es manoseada por una dirigencia de corruptos y fanáticos.
07/02/2024 a las 9:18 PM
Sr Otto,tenés razón sobre lo expuesto,ese tipo de idas y venidas solo enoja a la gente.
09/02/2024 a las 6:19 PM
Sr.Otto
La última frase «Antes que sea demasiado tarde».
Sí le digo ; ya es demasiado tarde.
Porque aunque alguna mano salvadora se apiadara de esta gente, el daño producido es irreversible.
La falta de comida, de vivienda, de educación, de acceso a los medios de culturta(serios, no el cuarteto), a la salud (desde la cuna), de seguridad, de trabajo , de justicia…ya ha tomado para ellos un camino sin retorno.
Si alguien, no se bien quién, intentara algo al respecto deberíamos estar hablando de décadas. El resto será parche , tras parche. Porque la sensibilidad de la clase política(ya a esta altura sin miramiento de banderías) se ha prostituído de tal manera que el arar y sembrar de nuevo para una cosecha mejor, llevará mucho tiempo.
Sumarle a ello la anteojera que cada ciudadano (llevado por las crisis recurrentes) se ha puesto en esa tarea titánica de sobrevivir a un mundo escandaloso y perverso en el que lo han metido por tanto tiempo. Es tan cruel lo que afirmo(espero no serlo tan al extremo) que estoy seguro ningún dirigente se pone a la cabeza de, siquiera, pensar en estos principios elementales que señalo(propio de un nene de la salita de 4).
Han perdido la brújula y nos han llevado, sin escalas, a un infierno del que cualquier ser bien nacido debería arrepentirse de por vida. Relatos, discursiva, agregada a una corrupción modelada quirúrgicamente, son la génesis de este estado de cosas. Al menos, desde los 40 a hoy.
No quiero seguir, porque la auto censura y el riesgo de la otra, me lo impiden.